jueves, 24 de septiembre de 2015

Contando en Córdoba (Argentina)

Vamos con la última crónica ya de la gira por Argentina y Chile que me ha tenido en danza cuarenta y cinco días de agosto y septiembre. Como os contaba en el anterior post el martes por la noche salí rumbo a Córdoba donde iba a pasar unos cuantos días contando.
El miércoles 9 de septiembre, tras llegar, acomodarme en la casa de Daniel y Gabi (los encargados de este tramo de la gira), descansar algo y almozar, fui a contar a todos los alumnos de primaria de un colegio. Fueron tres funciones intensas y muy divertidas.

Foto de Gabi del Valle 

El jueves 10 a primera hora (¡a las ocho de la mañana!) conté para alumnos de primero y segundo de secundaria en un instituto. Aunque las condiciones no fueron muy adecuadas (150 chavales en un enorme gimnasio con una acústica infame) los cuentos consiguieron abrirse paso y disfrutamos de la función todos (chavales, profesorado y yo).

Foto de Daniel Sosa

A mediodía estuvimos en un par de canales de televisión en Córdoba anunciando la función del sábado por la noche (podéis ver el reportaje y la entrevista aquí).
Y por la tarde comenzamos con el curso de Repertorio de narración oral (me encanta este curso), una primera parte (tres horas) que continuaría al día siguiente.
El viernes 11 tuve la mañana libre, tomando impulso para las cinco horas (de 14 a 19) que pasé impartiendo la segunda parte del curso de repertorio para narradores. Me da mucha rabia no tener ni una foto de los participantes.
Después del curso nos fuimos al Venique Tecuento, una actividad que lleva casi 20 años y que es parecida a los Viernes de los Cuentos en su formato inicial: un grupo de gente se reúne para contar o escuchar cuentos. Aprovechando que estaba por allí me animé a contar un par de cuentecitos.

Foto de Gabi del Valle

El sábado12 pasé la mañana revisando el equipaje, la tarde de paseo y la noche en la última función de la gira: Sesión golfa de cuentos. Quería quitarme el mal sabor de boca de la última vez que conté estos cuentos (¿recordáis, auditorio Kraft?) y parece ser que lo conseguí. Fue una guinda estupenda para una gira intensa y emocionante. Una función divertida en la que el público me hizo vibrar y disfrutar como pocas veces. La fotógrafa Mariana Marramé hizo esta estupenda serie de fotos de esa función, te animo a que te asomes.

Foto de Gabi del Valle

El domingo 13 llegué a Buenos Aires. De ese día, además de los preparativos (no había manera de que cerrara la maleta) para el viaje, guardo un hermoso, imborrable recuerdo mirando atardecer a través de una ventana: Buenos Aires desdibujándose con las caricias de la noche. Una maravilla.
El lunes 14 fui al aeropuerto de Ezeiza donde, a media mañana, subía al avión que me devolvería a mi casa, a mi vida, a mis días. Una vez más con esa sensación agridulce, feliz por regresar, triste por partir. Uno no acaba de marcharse nunca: va dejando trozos de sí en cada lugar por el que pasa.


Antes de terminar quería incluir aquí tres notas.
Primero dar las gracias a Claudio Pansera que ha sido el artífice de que esta monumental gira saliera adelante: soñar algo así y lograr que muchos otros lo sueñen contigo para hacerlo realidad tiene en verdad mucho mérito. Gracias.


Gracias a todas las personas que han dado calor y calidad humana a este periplo. Empezando por mi gente que ha estado siempre al otro lado de la pantalla para charlar y hacerme sentir no tan lejos (o algo más cerca); continuando por los productores, instituciones que han apoyado esta gira (especialmente AECID y AC/E) y compañeros con los que hemos compartido emociones, aventuras (desventuras) y palabra (Jackelinne, Emilce, Daiana, Vatto, Sandra, Paty, Carol, Giselle, Katerina, Carla, Pía, Hache, Alicia, Paola, Carlos, Luly, Patricia, Flaka, Gabriela, Claudia, Fabio...); y terminando con los amigos y amigas que he ido haciendo y a los que espero volver en algún otro momento (Carolina, Gazel, Nadina, Fer, Daniel, Edel, Gabi, Virginia... ay, son tantos y tantas, me dejo a muchos en el tintero, ¡no me lo tengáis en cuenta!). Gracias. De corazón, gracias.

Y por último deciros que mientras estaba terminando de escribir esta entrada en el blog me han llamado del seguro para confirmarme que se va a resolver positivamente el asunto del robo, que ya se está tramitando todo. Así pues la cosa no ha quedado en más que un disgusto porque voy a recuperar exactamente lo que me robaron.
No se me ocurre mejor final para un viaje de cuento(s).
Saludos

2 comentarios:

  1. Y mira que se te extraña!!!!!!...en Argentina

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    1. Es posible que vuelva en unos meses ;-)))))) yo también os echo mucho de menos. Saludos

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