martes, 28 de febrero de 2012

Dos de Alzheimer

En estos días me he topado con dos libros cuyos protagonistas padecen la enfermedad de Alzheimer. Los dos me han gustado mucho y por eso quería hacer una breve entrada en el blog para que quede constancia de los títulos por si alguien anda interesado en este asunto.


El primero de los dos libros se titula Arrugas, es un cómic escrito y dibujado por Paco Roca y publicado por Astiberri.
La historia comienza cuando Emilio, el protagonista, empieza a padecer los primeros síntomas de la enfermedad y su hijo (y nuera) deciden ingresarlo en una residencia de mayores. A lo largo de las páginas se nos muestra un catálogo de personajes diversos (todos ellos habitantes de la residencia) y de pequeñas historias que van articulando los días. El cómic nos instala en la residencia y logra transmitir esa sensación (peligrosa) de abandono que abre las puertas a la rutina y al sopor: estos nos merodean, pero siempre hay algún pequeño detalle que hace brillar los días. La trama, en este sentido, es verdaderamente estupenda: nos hace caminar por una senda en la que a un lado está el vacío (de los días vacíos) y al otro lado hay un paisaje entre cuyas sombras se vislumbran atardeceres, detalles hermosos, umbrías...
Y mientras deambulamos por estas páginas Emilio, el protagonista, va perdiéndose entre sus recuerdos, olvidando las palabras, borrando el mundo, desdibujando los rostros amigos... hasta llegar a la página en blanco (brillante el cómic en este punto, brillante de verdad).
Un cómic duro y hermoso (cuya adaptación al cine, por cierto, ha recibido dos Goyas en la reciente gala del cine español: a la mejor película de animación y al mejor guión adaptado).


El otro libro es un álbum ilustrado de Martin Baltscheit titulado El zorro que perdió la memoria y publicado por Lóguez.
En esta ocasión podemos ver el proceso de pérdida de memoria que el zorro va viviendo a causa de la enfermedad (que, por cierto, no se cita). Es quizás un libro más poético, delicado, lleno de sensibilidad y sin dramatismo, un libro que nos permite una manera muy interesante de explicar esta enfermedad a los más pequeños.
Y más allá de su intención (de mostrar el proceso de pérdida del zorro) el cuento es un hermoso cuento, una historia en verdad tierna y llena de silencios (y blancos) de gran elocuencia.
Un álbum precioso que ganó el Premio Alemán al Libro Infantil y Juvenil de 2011, ahí es nada.

Dos libros para no olvidar.
Saludos

sábado, 25 de febrero de 2012

De críticas flojas

Hace casi un año que hablaba en este mismo blog sobre una crítica algo inconsistente que había leído en internet sobre un libro que acababa de salir publicado, La familia C, flamante ganador del "III Premio Internacional COMPOSTELA de Álbum Ilustrado", con ilustraciones de Mariona Cabassa, textos míos, y publicado por Kalandraka.
No hace unos días que he vuelto a toparme con otra crítica de otro libro nuestro, Los caminos de los árboles, una crítica que pienso es fruto de una lectura somera. Ojo, no es una mala crítica del libro, es una mala crítica porque es floja, está poco pensada y mal contada. Hasta tal punto es así que he tenido que escribir un breve comentario señalando algún error de bulto (como el nombre de la ilustradora) o incidiendo en algunos aspectos del cuento que habían sido pasados por alto a pesar de su relevancia en el texto (como el mensaje que subyace en el cuento).
Tras mi comentario Patricia, la autora, ha corregido y añadido detalles a su reseña pero, desde mi punto de vista, sigue siendo una lectura poco profunda y una reseña poco elaborada.
Todo esto viene a cuento de lo siguiente:
  • Por un lado, cuando uno escribe (y publica), debe estar preparado para recibir críticas positivas y negativas. Por eso es importante dar a imprenta sólo aquello de lo que uno no pueda arrepentirse y que pueda defenderse solo: yo ya hice mi trabajo escribiendo, ahora el libro debe hacer su propia andadura.
  • Es verdad que una de las virtudes de internet es la difusión de opiniones, críticas, reseñas... este mismo blog es un ejemplo sobre esta cuestión.
  • Pero también es verdad que es importante reflexionar sobre lo leído, ser cuidadoso y tratar de argumentar bien lo reseñado (ya sea positivo o negativo). En este sentido internet pone a un mismo nivel críticas de blogs más serios y enjundiosos, con otros blogs más flojos y con menos profundidad en sus reflexiones.
Si se lee la crítica se verá que hay algunas cuestiones bien tocadas (libro ideal para lectura compartida, o libro que tal vez sea mejor para niños a partir de seis años) porque parten de la propia experiencia (práctica) de quien reseña el libro; sin embargo hay otras cuestiones mal vistas o mal trabajadas (libro para niños que se sienten inferiores, o libro con una -o dos- moralejas), cuestiones estas que parten de una reflexión (teoría) liviana sobre la lectura. Sin contar con la cantidad de errores de todo el texto (fruto de la premura y reflejo de poca seriedad), la ausencia completa de comentarios sobre las ilustraciones y alguna otra cuestión bastante insólita como tildar a este libro de "educativo en valores".
No me importa recibir malas críticas (sobre todo si están bien argumentadas y son constructivas). Pero sí me importa que se escriba de cualquier manera sobre los libros: ya sea bien o mal, ya sean mis libros o los de otros. Por eso hay blogs que recomiendo (aquí a la derecha, básicamente en dos bloques: El hilo de Ariadna (Un ojo y Manos)), son blogs que sigo y que me parecen bastante serios y que ahondan en lecturas.
Me gustan muchos los críticos. Por eso escribo esta entrada (y otras como ésta).
Saludos

PD: Os animo a que leáis los comentarios a la reseña o a esta nota en féisbuc.

viernes, 24 de febrero de 2012

El diario rojo de Flanagan

Estas últimas semanas mi hijo mayor está enganchadísimo con la saga de Flanagan (podéis comprobarlo en su blog, aquí y aquí) y por eso compré los tres últimos títulos que nos faltaban de toda la colección. Y resulta que el último de los libros de la saga es una especie de diario-novela-manual sobre sexualidad para adolescentes... y por eso me puse a leerlo antes de dárselo. Y aquí va la reseña.


Acabo de terminar de leer El diario rojo de Flanagan, de Andreu Martín y Jaume Ribera, publicado por Destino. Este libro, como el resto de títulos que he leído de la saga, me ha encantado (me gusta mucho Flanagan, pero mucho mucho).
El libro nos cuenta los avatares del protagonista de la serie en el despertar de su sexualidad. Todo aderezado con un poquito de aventura, algo de investigación (y misterio), otro poco de amor, de dudas, de incertidumbre y un mucho de despertar y de información básica (bien contada y bien seleccionada) sobre la sexualidad y sus alrededores.
He leído unos cuantos libros sobre erotismo y sexualidad, manuales para jóvenes y niños, no muchos (porque tampoco hay muchos) pero sí unos cuantos, y puedo decir que éste es uno de los que más me ha gustado. Y eso a pesar de que contiene mucha información (sobre sexualidad), información que creo que está muy bien integrada en la historia, que ocupa el espacio preciso, que no ralentiza demasiado a la acción y que, además, está muy bien contada (sin dogmatizar y sin llegar a fórmulas mágicas): esto es lo que hay y cada cual decide.
Pienso que está muy bien planteada toda la historia, las dudas de los protagonistas, los debates, los diferentes perfiles de personajes y las diferentes maneras de vivir y sentir la sexualidad. Me ha emocionado leer este libro y lamento que no estuviera ya escrito a mis quince años ;))
Soy fan de Flanagan y he leído otros libros de estos autores: nunca me han decepcionado. Siempre he disfrutado y me he quedado enganchadísimo y con hambre de más. Recuerdo que cuando leí el primer Flanagan me quedé tan sorprendido, tan entusiasmado, que en una semana me leí todo lo que se había publicado de la saga (¿seis libros por aquel entonces?), luego he ido comprando los títulos según iban saliendo y, tachán, después de este Diario rojo de Flanagan tengo otros dos libros más pendientes de este detective estupendo. Pero antes voy a tratar de hacer con El diario rojo de Carlota, el otro punto de vista de esta misma historia, de Gemma Liena, también en Destino. Genial.
Totalmente recomendable. Imprescindible.
Saludos.


PD: Ya leí el Diario rojo de Carlota, podéis ver la reseña aquí.
PD2: Hay al menos una guía de lectura de sendos libros para profesorado, aquí en PDF.

martes, 21 de febrero de 2012

Crónica de los días pasados

La pasada semana pasé casi tres días completos fuera de casa contando cuentos y conversando sobre lectura. Aquí va una breve crónica de los días vividos y disfrutados, con algunas fotos y sensaciones.

El miércoles salí bien temprano de casa y, tras unas cuantas horas de viaje y unos cuantos cientos de kilómetros llegué por la tarde a El Rompido, en Huelva. Impresiona eso de salir de casa a bajo cero y llegar a la playita donde había 18º C.


La biblioteca de El Rompido está en el antiguo faro y casa del farero. Después de subir al faro y ver la biblioteca y departir con Ana, la bibliotecaria, llegó el club de lectura.


Pasamos más de dos horas conversando sobre la lectura, los libros, las diversas posibilidades y actividades que pueden hacerse desde el club de lectura, etc. Al final también conté cuentos, claro.
Creo que fue un rato estupendo. He de decir que no conozco muchos clubes de lectura con un nivel tan extraordinario de lecturas y con una selección tan buena de títulos y autores en su haber. Fue, en verdad, una tarde deliciosa.


Al día siguiente fui a trabajar a Castilblanco de los Arroyos, en Sevilla. Carmen, la bibliotecaria, y el grupo de mujeres del club de lectura me recibieron estupendamente: un té de canela y unas pastas caseras para comenzar. También pasamos un par de horas hablando de libros, lectura, el club de lectura... y claro, al final también conté un par de cuentos.
Otra tarde deliciosa para el recuerdo.

Pero no hubo tiempo para mucho porque nada más terminar tocaba carretera de nuevo. Cogí el coche y subí por la A66 (Autovía de la Plata) hasta el norte de Cáceres, donde hice noche.
A la mañana siguiente, bien temprano, salí para Sanchidrián (Ávila) donde el CRA Tomás Luis de Vitoria se reunía para celebrar un día de convivencia.


Habían preparado la biblioteca estupendamente, y la tenían decorada con materiales de Los doce meses (¡qué ilusión!).


A las diez de la mañana ya estaba contando a los más pequeños. Después de tres sesiones divertidas y emocionantes, contando cuentos a todos los niños y niñas del CRA, tras conocer a un grupo estupendo de profesores y profesoras, subí al coche y volví a casa.
Ese es un buen momento: por un lado saborea uno los ratos maravillosos que ha compartido, y por otro sabe que a pocas horas está la familia: hogar dulce hogar ;))
Saludos

lunes, 20 de febrero de 2012

Hoy en la SER, pájaros

Es lunes y toca recomendar libros. Anoche curioseando en la estantería me topé con un librito que a mi hijo pequeño le encanta y que tiene un cedé con cantos de pájaros, pensé que tal vez el tema podría ser ese: cuentos con pájaros. Por eso, para leer las recomedaciones de hoy podéis abrir otra ventana con este enlace y darle al play para ir escuchando a los pájaros que ha grabado JosanBoza.

Comenzaremos con el libro que ha suscitado el tema de hoy, se trata de ¡Canta, ruiseñor, canta!, de Françoise de Guivert, con texto de Chiaki Miyamoto y música de Daniel Goyone, traducido por Miguel Ángel Mendo y publicado por Kókinos.
Este librito no es de ficción (que suele ser habitual en esta sección), sino que es un libro de aves, en el que se nos habla de un buen puñado de pájaros, sus costumbres, su forma de vida, su descripción... e incluye un cedé con cantos de todos los que aparecen en el libro. Es, en verdad, un libro delicioso para disfrutar solo o en compañía. Ideal para los más pequeños.


Continuamos con un clásico entre mis recomendaciones, se trata de un librito de Antonio Rubio: Pajarita de papel, con ilustraciones de Óscar Villán, publicado por Kalandraka. Es un libro de puntas redondeadas, de hojas duras, de formato pequeño... formalmente ideal para 0-3 años. Pero es que también es un libro maravilloso, con un texto exquisito y unas ilustraciones fantásticas. Uno de esos libros que no debes dejar de tener (igual que los otros cuatro títulos de "De la cuna a la luna").




Para seguir traigo un álbum que me acompaña desde hace años, se trata de Dos amigos, un libro escrito por Paz Rodero e ilustrado por Jozef Wilkon, publicado por Kókinos. Una historia sencilla que cuenta la amistad entre un pájaro y un pez que tiene unas ilustraciones deslumbrantes, poco habituales en los álbumes ilustrados, especialmente por el uso de los dorados.


Para terminar he elegido una pequeña joya, un libro maravilloso que ha recuperado recientemente Faktoría K de Libros, se trata de Para hacer el retrato de un pájaro, texto de Jacques Prévert, ilustraciones de Mordicai Gerstein y traducido por Pedro Ángel Almeida.
Un libro que nos habla sobre el proceso creativo y artístico, sobre la importancia de la paciencia... y que nos cuenta una hermosísima historia. Un libro que estoy contando hace unos meses y que me tiene completamente deslumbrado (desde el primer momento, como puedes ver aquí).


[AUDIO:] Aquí puedes escuchar la grabación de mi intervención en el programa.
Feliz semana y felices lecturas.
Saludos

domingo, 19 de febrero de 2012

La pulga de acero

Acabo de terminar de leer un libro insólito, se titula La pulga de acero, de Nikolái Leskov, traducido por Sara Gutiérrez, con una estupenda introducción de Care Santos y con ilustraciones de Javier Herrero. Lo edita Impedimenta. Y es uno de los Libros de Resistencia.


La pulga de acero es una novela breve, o un relato largo; en fin, un cuento muy potente, escrito (y traducido) de una manera peculiar, con mucho sabor a cuento tradicional (mucho sabor pero gracias al magisterio del escritor) y lleno de detalles brillantes, diálogos afilados, situaciones humorísticas y personajes deslumbrantes.
La historia es bastante sencilla: el zar ruso en su visita a Inglaterra recibe como regalo una pequeña pulga de acero, un juguete hecho por los artesanos ingleses, y a su vuelta a Rusia quiere saber si los artesanos rusos son capaces de igualar o mejorar tal artificio.
Partiendo de esta trama (aparentemente simple) hay una sucesión de secuencias (casi cinematográficas), con unos pocos (y contundentes) personajes capaces de levantar el andamiaje de este cuento y multiplicar sus planos posibles de interpretación.
No conocía a este autor ruso del S. XIX, pero puedo aseguraros que no lo voy a olvidar. El librito tiene una potencia, una capacidad para atrapar al lector y habitarlo, que te deja anonadado. En algún momento de la lectura he recordado otro librito breve maravilloso, La leyenda del Santo Bebedor, que ya he comentado aquí. En los dos libros unos pocos personajes (muy queridos por el autor, como tan acertadamente señala Care Santos) son capaces de hacer crecer una pequeña historia hasta convertirla en una fábula que trasciende lo local, lo anecdótico, para ser metáfora y búsqueda y reflexión y pregunta sobre la esencia del ser humano.
Una lectura completamente recomendable.
Saludos

1, 2, 3 gatitos

Hace años que tengo un álbum en casa que es estupendo y hace las delicias de los más pequeños, se trata de 1, 2, 3 gatitos, con texto e ilustraciones de Michel Van Zerveren, con traducción de Verónica Uribe y publicado por Ekaré.


Se trata de un álbum ilustrado que nos cuenta la historia (que tan bien conocen muchos niños y niñas pequeños) de esos momentos cotidianos a última hora del día: el baño, la cena y a dormir; pero que, al mismo tiempo, nos propone contar (hasta tres) y jugar con el texto y las ilustraciones. Uno de esos álbumes aparentemente muy sencillos que, en realidad, tienen mucho fondo y una sólida (y compleja) estructura. Ah, y un final estupendo, muy bien resuelto.
La historia de los tres gatitos a los que siempre les falta algo para que todo esté correcto (y sea igualitario) funciona. Y funciona muy bien con los pequeños.
Si tuviera que ponerle un pero a este álbum es la ausencia del padre, pero, obviamente, el cuento es reflejo de una realidad que todavía hoy (sorprendentemente) se vive en muchas casas.
En verdad un cuento delicioso, un éxito seguro con los más pequeños. Uno de esos libros que te pedirán y volverán a pedirte una y otra vez.
Saludos

Historias de osos

En estos pasados días leí un librito delicioso titulado Historias de Osos. Cuentos para contar, de Montserrat del Amo, con ilustraciones de Núria Feijoó y publicado por Planeta en su colección "Cometa". Lamento que sean tan pocos los libros que he leído o reseñado de esta autora que tiene en su haber más de setenta títulos publicados y que es uno de los referentes imprescindibles para comprender la pervivencia y auge de la narración oral en España: podéis encontrar más información sobre ella aquí.


Historias de osos es un librito con dos cuentos tradicionales en los que aparece el oso: "Los dos amigos" y "La pastora y los tres hijos del leñador". El libro tiene, además, una pequeña introducción de la autora.
Los dos cuentitos están escritos con mucho oficio y son ideales para ser leídos en voz alta o para ser contados.
El cuento de "Los dos amigos" resulta ideal para conversar tras la lectura con los niños y reflexionar sobre el mensaje que trata de transmitir. Por otro lado el cuento de "La pastora y los tres hijos del leñador" tiene una estructura tradicional reconocible (ese bendito número tres) y, sin complicación ninguna ni artificio estridente, nos cuenta una historia maravillosa con un final feliz (para el protagonista, claro).
Las ilustraciones acompañan perfectamente al texto. Un buen trabajo.
En conclusión, un librito ideal para pasar un buen rato con los pequeños.
Saludos

Una entrevista en Radio Adaja

El pasado miércoles 15 de febrero, con motivo de mi asistencia al CRA Tomás Luis de Vitoria para contar cuentos, me hicieron una pequeña entrevista (menos de nueve minutos) en Radio Adaja en la que me preguntaron sobre el oficio de contar, sobre cuentos, público, autores...
Por si os resultara de interés aquí os la dejo enlazada.
Saludos.

La siesta de los Enormes, candidato a los awards

Esta semana he recibido una estupenda noticia, La siesta de los Enormes ha sido seleccionado para los candidatos a los awards de la Feria del Libro de Bolonia, la Bologna Children's Book Fair, la feria más importante en el mundo de la literatura infantil y juvenil. Entre los preseleccionados de España hay unos cuantos amigos escritores e ilustradores, y, muy interesante, unos cuantos amigos y colegas narradores orales. Los cuentistas seguimos soñando buenos cuentos.


Podéis ver la lista de todos los candidatos en este enlace.
Saludos

martes, 14 de febrero de 2012

El amanecer de un marido

Acabo de terminar de leer El amanecer de un marido, un libro de cuentos escrito por Héctor Abad Faciolince y publicado por Seix Barral. De este autor ya había comentado El olvido que seremos hace prácticamente un año (en este mismo blog, aquí). Lo cierto es que El olvido que seremos no terminó de engancharme y su lectura me resultó, a ratos, algo pesada; y precisamente de este tema estaba hablando el pasado viernes con Txus, un amigo que me ha recomendado varias lecturas muy valiosas y me ha dado a conocer autores que leo con verdadero placer. A Txus, Héctor Abad Faciolince le gusta mucho, y habla con gran entusiasmo de sus libros, por eso me insistió a que probara y leyera este otro libro suyo. Y lo he hecho.


El amanecer de un marido es una colección de cuentos. Muchos de ellos remiten a capítulos de la vida del autor que conocemos tras haber leído El olvido que seremos.
En general todos los cuentos hablan de ese momento de la pareja en el que la pasión va desapareciendo y el amor se convierte en una costumbre de los días: los personajes que transitan por esta encrucijada buscan caminos diversos para iluminar sus días.
La verdad es que el libro me ha parecido muy desigual, y aunque eso puede suceder a veces con los libros de cuentos, en este caso me ha resultado especialmente llamativo: algunos cuentos me han interesado, unos pocos me han gustado, muchos me han aburrido, y tres no los terminé. Leyendo el libro he tenido la sensación de que a los textos les falta algo de tensión (narrativa), y también me he topado cuentos bastante flojos, con argumentos de poca hondura o, para mi juicio, con resoluciones muy regulares.
En suma, ha sido una lectura que, sospecho, pasará sin pena ni gloria por mi vida lectora. Y no saben cómo lo lamento, porque si Txus lo recomienda ¡en verdad debe merecer la pena!, pero no termina de entrarme este autor por los ojos, en fin. Y es que, si curioseáis por la red veréis que hay mucha gente a la que este libro le parece maravilloso, mira por ejemplo aquí (donde da buena cuenta, por cierto, de la trama de todos los cuentos, para que os hagáis una buena idea).
Saludos

lunes, 13 de febrero de 2012

Diógenes

Acabo de terminar de releer Diógenes, texto escrito por Pablo Albo que fue merecedor del prestigioso premio Lazarillo de creación literaria en 2008. El libro se publicó en Kalandraka con unas fantásticas ilustraciones de Pablo Auladell. Si leéis últimamente este blog ya sabréis que Pablo Albo tiene ficha entre mis autores favoritos.


Recuerdo cuando conocí la noticia de que Pablo había ganado el Lazarillo, un premio prestigiosísimo que muy pocos narradores orales han conseguido hasta hoy (Carles Cano, por ejemplo; o, precisamente este último año Margarita del Mazo en la modalidad de álbum ilustrado con un libro a cuatro manos con la ilustradora Ángela Carrasco), como decía recuerdo el día que me enteré de la noticia ¡pasé unos cuantos días feliz como si lo hubiera ganado yo mismo! Pablo es amigo pero también es uno de los narradores orales más relevantes en el panorama actual, y premios como éste dan visibilidad a nuestro pequeño oficio.
Después de conocer la noticia del premio hubo que esperar unos cuantos largos meses hasta que pudimos leer el libro (tan bellamente ilustrado por Pablo Auladell y editado por Kalandraka), y la felicidad fue doble. Porque Pablo no sólo había recibido un premio, sino que también había escrito un libro extraordinario.
Diógenes nos cuenta la historia (las historias) de una familia que no deja de acumular, guardar, conservar, atesorar... cosas, todas las cosas. Desde campanas a árboles, desde arena a cartas de amor, desde gusanos de seda a charcos. Todo puede ser coleccionado, contado y guardado para estos protagonistas. Obviamente el título nos remite al conocido síndrome de Diógenes que es exactamente eso: acumular cosas (muchas veces inútiles).
El libro está escrito con un estilo muy pulcro, muy limpio, lo que permite un ritmo alegre en la lectura. Y sucede que además de esta pulcritud el texto está cargado de poesía, de imágenes y frases llenas de hondura y sabor (una suma siempre difícil que da medida del magisterio del escritor: texto pulcro y poético).
Y si a esto le sumamos que todo el libro está armado con pequeños textos que son como teselas que van dando la imagen completa de un mosaico, pues la lectura se promete feliz. Estas teselas, además, funcionan como partes de una maquinaria perfecta, completamente encajada y engrasada, que palpita con la lectura y crece con cada relectura.
En estos días he releído Diógenes tres veces, y, si como he afirmado en otras ocasiones, soportar relecturas es una buena pista para valorar la calidad de un texto, Diógenes no solo soporta relecturas sino que crece con cada una.
Un libro hermosísimo y feliz. Una lectura gozosa y llena de guiños, detalles, silencios, hondura. Unas ilustraciones perfectas para este texto. Una suma de cosas buenas, se mire por donde se mire. Un libro completamente recomendable.
Saludos

Hoy en la SER, Anaya

Es lunes y toca hablar de libros en la SER. Hoy el tema quizás os pueda parecer algo raro, eso de recomendar libros de una única editorial no es lo habitual, pero tiene su motivo. Os explico. Ayer murió don Germán Sánchez Ruipérez, una persona extraordinaria para el mundo de los libros y la lectura en España (os animo a que echéis un vistazo a su entrada en la wikipedia).


El punto de partida de su incursión en la edición y los libros fue la creación de un sello editorial, Anaya, que será hoy el elemento común de todos los libros que recomendaré. Pero antes de ello os animo a que visitéis algunas páginas relacionadas con Germán Sánchez Ruipérez:

La editorial Anaya comenzó siendo una editorial escolar, famosa sobre todo por sus manuales de literatura firmados por Fernando Lázaro Carreter (qué recuerdos, madre mía), pero con el paso de los años abrió nuevas vías de trabajo y, entre ellas, se ocupó por la edición y promoción del libro infantil y juvenil (LIJ), siempre asesorado por reconocidos expertos (como Felicidad Orquín) y gestionado por estupendos editores (muchos de ellos formados en el propio sello) como Antonio Ventura.
Dentro de esta línea de LIJ se preocuparon por la publicación de textos de nuevos autores. Dos ejemplos muy significativos son los de Daniel Nesquens y Pablo Albo, que iniciaron sus andaduras literarias al calor de este sello editorial (y cada uno de una forma diferente).
Daniel Nesquens publicó su primer libro Diecisiete cuentos y dos pingüinos, con ilustraciones de Emilio Urberuaga, en Anaya. Casi podría decirse que pasó a ser un autor de la casa pues muchos de sus libros (hasta el día de hoy) han sido publicados por esta editorial.


Pablo Albo publicó también en Anaya su primer álbum titulado Mar de sábanas, con ilustraciones de Pablo Auladell. Esta publicación fue gracias al concurso que Anaya promovía junto a la ciudad de Alicante, concurso que pretendía promover el género del álbum ilustrado y descubrir a nuevos autores e ilustradores. El libro que presentaron Pablo Albo y Pablo Auladell ganó y éste fue el primero de una larga lista de maravillosos álbumes que los dos (juntos o con otros artistas) han ido dando a la imprenta.


Otra línea importante de trabajo ha sido la recuperación de títulos imprescindibles de LIJ que ya habían sido editados en España pero que se encontraban agotados. Hemos citado en muchas ocasiones títulos como Negros y blancos, de David McKee, o La aventura formidable de un hombrecillo indomable de Hans Traxler, o El oso que no lo era, de Frank Tashlin, o Los tres amigos, de Helme Heine... libros todos ellos maravillosos y cuya lectura es deliciosa, divertida, imprescindible, emocionante.


Para terminar, también se preocuparon desde Anaya por traer libros desconocidos hasta la fecha en España y que eran maravillosos. Un ejemplo bien significativo en este sentido es el libro de Jürg Schubiger, Cuando el mundo era joven todavía, con ilustraciones de Rotraut Susanne Berger, uno de los libros que más he leído y releído, una joya que os recomiendo encarecidamente. Un libro que corre de boca en boca entre cuentistas pues son muchos los narradores que cuentan cuentos de él (Oswaldo, Cristina Verbena, Estrella Ortiz...). En verdad un libro que no debéis perderos.



[AUDIO:] Aquí está el enlace con la grabación de mi intervención en el programa.
Espero que la entrada de hoy sirva como pequeño homenaje a un gran hombre preocupado por los libros y la lectura, y vaya con ello mi más sentido pésame a la familia.
Saludos

domingo, 12 de febrero de 2012

Alan Lomax por España

Gracias a este artículo de Iker Seisdedos aparecido hoy en El País he tenido noticia de Alan Lomax, insólito folclorista, y de esta web: www.culturalequity.org, donde están colgando los miles de archivos sonoros, fotográficos, videograbados, etc., recogidos a lo largo de su vida (falta todavía mucha información, aunque también hay mucha ya puesta a disposición de los curiosos internautas).


Entre estas grabaciones hay también unas cuantas recogidas en España en los años 1952 y1953 en los que pasó unos seis meses en nuestro país. Y entre esas grabaciones hay, también, unos cuantos romances (uno siempre pensando en sus cosas...).
Es una buena noticia: un folclorista incansable con un tesoro que, poco a poco, se nos va desvelando y acercando.
En la ficha de Alan Lomax en la wikipedia hay enlace directo con las Spanish Recording, grabaciones españolas, y se pueden ver listados de textos recopilados en Aragón, Valencia, País Vasco, Navarra y Extremadura; y aquí podéis ver los índices de Galicia y las Islas Baleares (Mallorca e Ibiza y Formentera).
Desde el féisbuc me llegan estos dos enlaces.

  • En este enlace (gracias Pablo) podéis ver la discografía completa de Alan Lomax.
  • En este otro enlace (gracias María) podéis escuchar la versión que grabó en 1952 de Gerineldo a Carmen Prieto (hermosísima versión).

Saludos

sábado, 11 de febrero de 2012

El perfume del cardamomo

Acabo de terminar de leer un librito que me ha gustado mucho mucho mucho, se trata de El perfume del cardamomo. Cuentos chinos, escrito por Andrés Ibáñez, con una introducción de Félix Romeo y publicado por Impedimenta. Es uno de los Libros de Resistencia.


El librito, como reza el subtítulo, es una colección de cuentos chinos. Pero, entendámonos, de cuentos de autor (Andrés Ibáñez) escritos al modo de los cuentos clásicos chinos, cuentos en los que se respira el perfume de los textos tradicionales chinos, en los que se percibe una forma de comprender y contar el mundo (la china), con tramas y personajes que podrían pertenecer perfectamente a cuentos chinos (de verdad chinos). Y lo que resulta más interesante: en verdad son cuentos chinos, no suenan a pastiche ni a reescritura ni a impostura, ni chirrían: son verosímilmente chinos.
Además, algunos de ellos, me han parecido verdaderamente maravillosos. Por ejemplo el cuento que abre la colección, "La mujer del bandido", realmente estremecedor y que, con una condensación y economía verbal extraordinaria, nos cuenta una historia fabulosa. O el titulado "Hay un camino", maravilloso y de gran hondura (no deja de rondarme este cuento). O "La luna en estío", de una intensidad, melancolía y poesía extraordinarias (de verdad extraordinarias). O, por poner un ejemplo que salga de lo breve (hasta ahora citado) y de lo espiritual (también hasta ahora citado), un cuento del mundo flotante, el titulado "Historia de Chi Hsin Mien, el insaciable", divertida y procaz (muy del estilo de la literatura libertina tradicional china... y de mi estilo).
En suma, una hermosa colección de cuentos que merece la pena tener, leer, releer, conservar en la memoria y en la biblioteca. Una lectura completamente recomendable.
Saludos

Los caminos de los árboles en el Biblioabrazo

El blog de Ana Nebreda, El Biblioabrazo es muy especial: cuidado, lleno de sugerencias, con críticas que ahondan en los libros y los acercan a los lectores. Por eso, que hayan reseñado Los caminos de los árboles, el último libro que publiqué con Mariona Cabassa, es un motivo de gran felicidad.


Aquí os dejo el enlace directo para que podáis leer de la crítica y disfrutarla.
Estoy emocionado.
Saludos

jueves, 9 de febrero de 2012

Jim Botón y los trece salvajes

Acabo de terminar de leer Jim Botón y los trece salvajes, una novela maravillosa escrita por Michael Ende (uno de mis autores favoritos con ficha en mi web), traducido por Adriana Matons de Malagrida, con ilustraciones de J. F. Tripp y publicado por Noguer. Esta novela es la continuación de Jim Botón y Lucas el maquinista.


No había leído este libro estupendo, y siempre es un placer toparse con una lectura de este tipo, llena de aventuras, de intrigas y de emoción. Pero vayamos por partes.
Jim Botón y los trece salvajes es la segunda parte de Jim Botón y Lucas el maquinista, y en esta novela se cierran algunas cuestiones que quedaban abiertas en la primera, fundamentalmente la cuestión del origen de Jim Botón, aunque surgen otras cuestiones que también van resolviéndose a lo largo del libro: la utilidad de Nepomuk y de Tur Tur, los habitantes del mar, el enfrentamiento con los trece salvajes... Por todo esto conviene que se lean en su orden, aunque puede leerse sólo uno y de manera independiente. Pero creo que la lectura será mejor si se respeta este orden.
Me ha gustado mucho que esta novela se articula básicamente con los mismos personajes que la primera (salvo en el caso de los habitantes del mar, el resto participaban del primer libro con mayor o menor presencia), creo además que la arquitectura de este libro es más compleja que el primero (que es más una historia lineal con una sucesión de aventuras), en este caso hay distintos lugares en los que encajan distintos personajes y donde diversos problemas se van resolviendo (magistralmente) con los recursos que ya había en la primera novela. Uno no deja de admirar el encaje afinadísimo de toda la trama hasta conseguir armar un libro complejo y perfecto, que funciona al milímetro y sin ninguna estridencia (siempre dentro del nivel de verosimilitud propuesto desde la primera página del primer libro).
Hay también un derroche de imaginación (como en "El país que no puede existir" o en la iluminación del mar), una sucesión trepidante de aventuras (inolvidable la lucha contra los trece salvajes) y muchos momentos emocionantes.
Si se me permite la burrada, hay también algún momento en el que, leyendo este libro, he pensado en El Quijote: eso de que en el segundo libro los protagonistas sepan que muchos niños han leído el primer libro... no deja de sonarme. Igualmente la idea de dos protagonistas juntos como motor de la acción. O también las diferencias entre el primer libro y el segundo (estructurales y de complejidad bien diferente). Pero bueno, era solo por decir algo que no ha dejado de rondarme en estas últimas horas después de leer el libro.
En suma, una lectura maravillosa, trepidante, emocionante, feliz y muy gozosa. Totalmente recomendable.
Saludos

miércoles, 8 de febrero de 2012

Julio Verne

Ayer celebrábamos el ducentenario del nacimiento de Dickens y sucede que un ocho de febrero (de 1828) nacía Julio Verne, acaso el padre del género de la literatura de ciencia-ficción y uno de los autores que más leí en mi infancia (en la Colección Historias de Bruguera, con texto y cómic, ¿recordáis?).


Quizás sus obras hayan envejecido mal, al menos recuerdo que pensé eso cuando hace unos años releí unos cuantos libros suyos para elaborar (junto con Lourdes Quesada) una Gymkana (que tienes aquí) en conmemoración del centenario de su muerte. Pero aun así hay libros suyos que son maravillosos y que, si no has leído, te recomiendo. De su obra títulos me gustan acaso los títulos más conocidos: Viaje al centro de la Tierra, 20.000 leguas de viaje submarino, 5 semanas en globo... y sobre todo La vuelta al mundo en 80 días, de entre todos mi favorito.


Que sus historias sigan interesando lo demuestra que no dejan de aparecer películas que las versionan (con mayor o menor fortuna). Y es que sus libros pueden haber envejecido mal o bien, pero hay que reconocer que Julio Verne sabía imaginar y contar historias y eso, hoy en día, sigue siendo un bien escaso.
Saludos

martes, 7 de febrero de 2012

Charles Dickens

Hoy hace doscientos años nacía Charles Dickens, uno de los grandes escritores en lengua inglesa. En sus libros puso luz sobre las oscuras tripas del industrialismo y la esclavitud de las clases pobres de la Inglaterra de principios del S. XIX.


No he leído mucho de este autor, quizás haber visto algunas versiones de Oliver Twist o David Copperfield en cine me han hecho postergar su lectura. Pero esto no es un problema, es más bien una suerte: ¡quedan tantos buenos libros por leer!
Sin embargo sí tengo una pequeña historia alrededor de un libro de este autor que aprovecho para contar ahora.
En verano de 2006 fui a contar cuentos a varios países de Iberoamérica, el periplo duró unos cuarenta días y me llevó desde Panamá hasta Argentina pasando por Paraguay, Bolivia, Brasil y Venezuela (en algunos de estos sitios sólo estuve de paso). Lo cierto era que mi intención fue llevar un equipaje reducido, apenas una maleta pequeña y una mochilita de modo que las dos entraran como equipaje de mano en los aviones para no andar embarcando bultos en cada uno de los trece vuelos que tenía previsto. A pesar del poco espacio que esto suponía organicé mi equipaje tanto para el tropical Panamá como para el invernal Buenos Aires y la posible escala de climas (con la técnica de la cebolla ;))).
Luego la cosa no fue tal como la planeé pues en medio de la gira apareció la ley (o moda, o negocio, no sé) por la que no se permitía llevar botes con líquidos en el equipaje de mano y tuve que empezar a facturar todo en cada vuelo. Además sucedió que de cada país me quería traer algún recuerdo y día a día mi equipaje crecía y mis dos maletitas iniciales acabaron siendo cuatro. Pero eso es otro tema.


Lo cierto es que para un equipaje tan exiguo y tantos viajes previstos tuve que seleccionar con mucho cuidado las lecturas (y ediciones) que me llevaba. Y finalmente escogí tres títulos (sospechando, como así fue, que a lo largo del viaje alguno más adquiriría), y uno de ellos fue Los papeles póstumos del Club Pickwick, la primera novela de Dickens.
Recuerdo que la lectura de aquel libro (en tres volúmenes, en la edición de bolsillo de Alianza) se convirtió en un modo de aferrarme a casa: abrir el libro era recordar el lugar de la biblioteca donde estaba, en el salón, y de ahí, de recordar lo familiar a sentir a mi familia, había un suspiro. Así el libro me acercaba los míos (¡mis hijos eran tan pequeños por aquel entonces!) y me hacía menos penosa la ausencia. Sucedía también que las aventuras de los peculiares viajeros del Club Pickwick, tan divertidas y ridículas, me ayudaron a dar un poco de distancia a mis propias vivencias y experiencias.
Fue así como este libro se convirtió en una lectura verdaderamente especial para mí, un verdadero gran compañero de viaje. Y aunque mi plan inicial era ir abandonando los libros según los iba leyendo... no pude hacerlo. Le cogí tanto cariño a esa edición, me resultó tan buena y acogedora su compañía, que la sola idea de ir abandonando los libros en las paradas de mi viaje se hizo repugnante. Y acabé trayéndolos de vuelta a casa.
Todavía hoy, de vez en cuando, tropiezo con los tres libritos en mi biblioteca cuando ando merodeando sus baldas. Sólo con verlos el recuerdo de los viajes, de las experiencias vividas, de las gentes maravillosas que conocí, se hace nítido y fuerte y me entran ganas de volver a enredarme en largos vuelos y giras exóticas.
Pareciera como si los libros de Dickens quisieran volver a salir de paseo.
Saludos

lunes, 6 de febrero de 2012

Hoy en la SER, ¿preguntas?

Tras las recomendaciones de la pasada semana (¿recordáis, filosofías?) hoy he traído a la SER libros relacionados con las preguntas (y esa relación es de manera diversa, como podréis ver ahora). Espero que os resulten interesantes. Allá vamos.


Para comenzar hemos hablado de un divertido álbum ilustrado titulado ¿Kiencomoqué? escrito e ilustrado por José Parrondo y publicado por Kalandraka. Se trata de un álbum cuya historia se va construyendo a partir de las respuestas que se van dando a las preguntas que incluye. Os pongo un ejemplo para que me entendáis, en la primera lámina se ve un platillo volante y una pregunta: ¿Quién acaba de llegar a la Tierra?, pasas la página y, como seguramente habías sospechado, la respuesta (ilustrada) es: ¡el marciano! En la siguiente página de nuevo una ilustración (esta vez de una casa un poco rara) y una pregunta: ¿Qué se ha olvidado en casa?... y así se va armando toda la historia. Es uno de esos libros maravillosos para compartir, jugar y disfrutar. Seguro que pasáis un rato estupendo con él.


Para continuar he llevado uno de esos libros diferentes que aparecen en el panorama de los libros para niños y niñas. Se trata de Pregúntame, de Antje Damm, publicado por Anaya. Un librito que es una sucesión de preguntas (hoja izquierda) con una ilustración como respuesta a cada pregunta (hoja derecha); la ilustración-respuesta siempre sugiere más de una respuesta (esa es gran parte de su gracia). Éste también es un libro ideal para compartir y disfrutar y jugar (sí, jugar, basta con abrir una página al azar para que te sugiera alguna actividad o propuesta o idea).


Para terminar he traído dos álbumes completamente extraordinarios, rara avis en el panorama de LIJ actual y que os darán para ver y volver a ver y leer a solas o acompañados. Los dos álbumes son de Nikolaus Heidelbach y están publicados por Libros del zorro rojo, y se titulan ¿Qué hacen los niños? y ¿Qué hacen las niñas? Tengo muchas ganas de hacer una reseña en profundidad de estos dos libros, pero mientras tanto os dejo este enlace donde podéis leer a Ana (una buena amiga y experta en LIJ) hablando de ellos. Yo sólo os diré que son libros en los que el género del álbum ilustrado llega a una perfección extraordinaria por la tensión que se establece entre texto e ilustración y el juego que permite.


En los enlaces que he puesto en los títulos de los libros hay más información sobre ellos (y también hay bastantes ilustraciones de los dos últimos títulos).
[AUDIO:] Aquí puedes escuchar el audio de mi intervención en el programa de hoy.
Creo que esta semana las recomendaciones os pueden dar para pasar ratos muy agradables. Espero que así sea.
Pasad una feliz semana de lecturas.
Saludos

domingo, 5 de febrero de 2012

Mis autores imprescindibles

Después de unos días de memoria (y desmemoria) he acabado por fin este artículo sobre mi bio/bibliografía de autores imprescindibles. Escritores y textos (más o menos clásicos o canónicos) que han sido importantes (o muy importantes) en mi vida lectora. Seguro que me dejo algunos en el tintero, pero también es seguro que todos los que cito son imprescindibles en mi trayectoria como lector.
Aquí os dejo el enlace directo por si os resultara de interés.
Saludos

sábado, 4 de febrero de 2012

El gran libro del lobo feroz

El otro día Pilar me dejó un libro titulado El gran libro del lobo feroz y publicado por editorial Juventud, escrito e ilustrado por varios autores y traducido por Raquel Solà García. Habíamos estado hablando de cuentos tradicionales (y, sobre todo, de ese tema recurrente de lo políticamente correcto) y por eso insistió en que leyera el libro.


He de decir, antes que nada, que el libro me parece una buena idea y que he disfrutado, en general, con su lectura. Reúne un puñado de cuentos (algunos tradicionales y otros no) en los que el lobo se nos muestra con bastante crudeza. Me han gustado especialmente: "El verdete del miedo", "La cabra del señor Seguin" y "El lobo y el cordero". También me han parecido interesantes la fiel versión de "Pedro y el lobo" y la variante de "El lobo valiente" (que a muchos recordará a "Los músicos de Bremen").
En otros cuentos, especialmente en versiones de textos muy conocidos, el libro falla. Pienso sobre todo en "Caperucita Roja", donde si bien el lobo se come a la niña (siguiendo el texto que publicó Perrault) hay una carencia importante: ¡¡la madre no advierte a la niña del peligro del lobo!!, por lo tanto el cuento todo se desmonta, pues si la madre no avisa, la niña no desobedece, y el castigo es desmedido. Igual sucede con el cuento de "Los tres cerditos", los dos cerditos vagos ¡¡se salvan de ser comidos por el lobo!! cuando hasta en la versión que recogieron los Grimm (tan cautos siempre ellos) los dos primeros cerdos eran devorados (por vagos) para no dar pie a confusión. Y por último en "Los siete cabritillos" además de perder pasos en el avance del lobo hasta los cabritillos, eso de que el pequeño se esconda en un baúl y pierda la connotación simbólica del reloj, tan importante, pues tampoco está nada cuidado.
Las ilustraciones son muy desiguales (lo cual enriquece el libro) y algunas me han gustado mucho (y otras no tanto). Y en cuanto a los juegos y propuestas que se suceden a lo largo del libro, bueno, ni frío ni calor.
Tampoco la traducción me ha parecido extraordinaria (a veces con tímidos intentos de ser rimada).
En suma, un libro que es un buen intento, que tiene algunos textos muy interesantes, pero que también tiene carencias importantes.
Saludos

viernes, 3 de febrero de 2012

La niña que iba en hipopótamo a la escuela

Acabo de terminar de leer La niña que iba en hipopótamo a la escuela, un libro de Yoko Ogawa traducido por Yoshiko Sugiyama y publicado por Editorial Funambulista.  De esta autora reseñé no hace mucho un librito completamente maravilloso: La fórmula preferida del profesor.




El libro nos cuenta un año muy especial en la vida de Tomoko, año en el que esta niña tiene que separarse de su madre (que se va a Tokyo) e irse a vivir con sus tíos (y su prima Mina, su tía abuela Rosa, la señora Yoneda, el señor Kobayashi ¡y el hipopótamo Pochiko!) a los que apenas conoce.
Si a esto le añadís que el libro está lleno de imágenes delicadas, de silencios sugerentes, de pequeñas historias que alumbran los días, de otras pequeñas historias que los oscurecen, de personajes interesantes (un buen puñado de ellos secundarios, a veces dibujados apenas en dos líneas) y de esa prosa aparentemente frágil pero lo suficientemente fuerte para sostener sin problemas una novelota de más de cuatrocientas páginas.
Me ha gustado mucho de esta novela cómo la autora consigue dibujar la línea en la que se mueven las dos niñas, esa línea que separa la infancia de la adolescencia, llena de incertidumbres, deseos, incomprensiones, descubrimientos... De verdad que me ha encantado.
Igual que sucede en su otro libro es una novela sin estridencias, en la que la gran historia de la vida se arma con los pequeños detalles de los días y la hondura de sus personajes (me ha recordado a algunos cuentos de Katherin Mansfield a quien, por cierto, se cita en la novela). Aunque a diferencia de La fórmula preferida del profesor ésta es más coral y también está más llena de otras pequeñas historias.
Una lectura muy recomendable que disfrutaréis desde las primeras páginas.
Saludos

miércoles, 1 de febrero de 2012

Rosa y animar a leer

Hace años que conozco a Rosa, la bibliotecaria de Villafranca de los Caballeros, una de las personas más creativas, dinámicas, lectoras, luchadoras, generosas y entusiastas que conozco. Ella es una de esas bibliotecarias que siempre tiene la biblioteca patas arriba y a los lectores leyendo o jugando con libros o con hambre de más libros.
A veces hemos coincidido en algún curso de formación, alguna otra vez he pasado por su biblioteca a contar, pero las más de las veces, cuando me ha ido de paso (aquellos insólitos viajes cruzando toda Castilla La Mancha cuando había trabajo, ¿recordáis?) entre una sesión y otra, entre un pueblo y otro, he hecho una paradita en su biblioteca para charlar, tomar un café y aprender. Aprender, siempre. Porque Rosa no deja descansar el magín y anda en todo momento ideando nuevas estrategias, propuestas y artimañas para acercar los libros a la gente. Y parar en su biblioteca, pasear con ella, escuchar sus últimas ideas y dejarse contagiar de su entusiasmo, era, es, siempre un regalo.
Por eso me alegra tanto, pero tanto, que por fin Rosa se haya animado a abrir un blog y compartir sus experiencias. Está como quien dice empezando, pero ya tiene un montón de propuestas interesantes.
Este blog está llamado a ser un referente imprescindible, no lo perdáis de vista. Y si no, al tiempo.
Saludos