jueves, 22 de marzo de 2012

La mano invisible

A pesar del trajín de estos días he ido encontrando tiempo para leer el libro que me regalaron Elena y César estas navidades, se trata de La mano invisible, escrito por Isaac Rosa y publicado por Seix Barral.


El libro nos habla de un grupo de trabajadores de oficios diversos que comienzan a trabajar en una especie de escenario, cada uno haciendo su labor: el albañil levantando un tabique, el carnicero troceando un animal, la teleoperadora llamando, etc., mientras el público les observa desde la grada. Esta es la línea central sobre la que van girando las vidas de los personajes y sin que sepamos quién ha organizado todo esto y por qué.
La verdad es que al principio me resultó una novela lenta y reiterativa: la descripción de las tareas de cada protagonista (que son unos cuantos) y los ligeros esbozos sobre las vidas de estos fuera de la escena ocupan muchas páginas y uno estuvo tentado de dejar la lectura a medias; y es que la idea parecía clara con los tres primeros trabajadores, por eso uno espera que tras este punto de partida suceda algo que provoque el movimiento, la acción en la novela.
Sin embargo el autor continúa describiendo oficios y mostrándonos a sus protagonistas demoradamente, uno tras otro, hasta que muchas páginas después sucede algo que rompe esa rutina: los trabajadores se van a reunir para ver si toman alguna medida contra las nuevas exigencias de la empresa. Y es este momento cuando vemos a todos juntos fuera de la escena, robando tiempo a sus vidas, e iniciando algo juntos. En este punto se abre una segunda línea argumental de relaciones entre ellos y con la misteriosa empresa.
Lo que me ha ido pasando con este libro ha sido que he ido entrando en el ritmo demorado que nos propone su narrador, tedioso a veces, reiterativo otras veces, y he acabado por pensar que forma parte del juego que propone el libro: el trabajo como algo reiterativo, que a veces nos deshumaniza, brutal, mecánico, que vivimos de maneras muy diversas. Y cuanto más he ido avanzando en la lectura, más sentido han ido adquiriendo todas las páginas anteriores y más me ha ido gustando.
Este es, en verdad, un libro que dice a las claras lo que pretende: escribir sobre el trabajo. O, mejor aún, el trabajo como protagonista de una novela, como estudio artístico, como motor de los días y de las páginas.
En suma, una novela diferente que me ha regalado buenos momentos de reflexión y lectura.
Si te interesa leer ¿ficción? sobre el trabajo, este es tu libro.
Saludos

2 comentarios:

  1. Muy buenas las 99 pulgas que acabo de leer.
    Enhorabuena a los tres. Me ha costado bastante acabar con alguna de las últimas pulgas, la verdad, se escondían como ratas las muy... Pero al fin lo conseguí. Y eso que eran pequeñas y huidizas, las malditas.
    Repito: enhorabuena Albos y Pep.
    Un abrazo,

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  2. Jajajajaja, muchas gracias Víctor, no es La mano invisible, sino este otro libro:
    http://palabrasdelcandil.blogspot.com.es/2010/07/99-pulgas.html
    Un abrazo
    Pep

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