Por eso uno no puede resistirse a hablar de la serie de Lost Girls, tres libros del género novela gráfica (cómic) creados por Alan Moore y Melinda Gebbie, en la editorial Norma.
Lost Girls comenzó siendo una entrega por folletos y acabó por convertirse en un clásico de culto. Pero, te preguntarás, ¿qué tiene que ver este cómic -vitalista y con escenas de sexo explícito- con los cuentos? Te contesto, no te apresures. Las tres protagonistas de esta serie son Wendy (¿recuerdas Peter Pan?), Dorothy (sí, sí, la del camino de baldosas amarillas) y Alicia (ya sabes, la de a través del espejo); eso sí, las tres están más allá de sus historias, es decir, están "después de" los cuentos que las hicieron famosas.
Ahora las tres protagonistas son mujeres adultas que se encuentran en un hotel, se hacen amigas y comparten confidencias y aventuras (sexuales).
Ayer terminé el primero de los tres volúmenes y en estos días espero acabar con los otros dos, se dejan leer fácilmente y tienen ilustraciones llenas de sugerencias y detalles (aunque no sea el estilo de ilustración que más me atrae sí pienso que es muy adecuado para la historia que cuenta). Me tiene muy enganchado y no te mentiré si te digo que estoy disfrutando con su lectura. Así pues, totalmente recomendable.
Saludos
Desde luego, el punto de partida es bárbaro. Somerset Maugham decía que siempre se sentaba en la mesa de las mujeres mayores... "pues nadie tiene conversaciones tan interesantes como ellas".
ResponderEliminarUn abrazo,
Bueno Víctor, me han gustado mucho los tres libros, especialmente el segundo.
ResponderEliminarTe animo a que les eches un vistazo.
Abrazos