Hay algunos libros que han sido merecedores de muchas reseñas y elogios en estos últimos meses y que yo no he comentado aquí. Obviamente no me da tiempo a leer/reseñar todo, pero es que también sucede que no suelo ser muy amigo de novedades: prefiero leer los libros cuando ha pasado un tiempo desde que salieron publicados y la novedad ha dejado de serlo, pasando a ser una lectura recomendable (o prescindible).
Lo cierto es que me voy dejando llevar y los libros van llegando, y parece que siempre en su momento.
Pero vayamos al lío. Hace unas semanas estuve en Ilustratour (Valladolid) y allí adquirí este libro que hoy comento, se trata de Bombástica Naturalis, de Iban Barrenetxea, publicado por A buen paso, una editorial muy especial puesta en marcha por Arianna Squilloni.
Bombástica Naturalis es un precioso álbum ilustrado que maneja diversos discursos narrativos bajo el disfraz de un catálogo de plantas, un herbario.
Un primer plano narrativo lo proporcionan texto e ilustración: mostrando un catálogo de plantas extraordinarias (y fantásticas), sería el más evidente. Podríamos hablar de un segundo plano (si es que estos discursos narrativos pudieran desgajarse unos de otros) que vendría de la mano de los textos que extrañan la realidad (clave a la hora de entrar en tierras de ficción): plantas de nuestro entorno (como el tilo, el peral, el manzano, la cala...) descritas desde una óptica fantástica, juego en estado puro. Un tercer plano vendría de la aplicación de esa textualidad extrañada en las ilustraciones (hermosas y delicadas, luego hablamos de ellas). Pero es que además en ese plano de las ilustraciones vamos viendo una historia (o suma de historias) que no se cuentan (con palabras) pero que tienen pequeñas llamadas de una página a otra (sigan al pájaro azul, la mariposa, el hombre que cae por el puente -¿no les recuerda a algo ese puente?-, el zorro, el frasco de tinta, el gato negro, el pescado, las aceitunas disparadas, las manzanas, los personajes...), un montón de pequeñas historias que van armando una gran historia.
Este último plano es delicioso, me recuerda a las ilustraciones de algunos libros de Anno, que van contando historias de unas páginas a otras, pero en este álbum todo está muy atado: vean si no cómo el hombre dispara el trabuco (suponemos que para cazar al zorro que, suponemos, habrá robado una gallina -menudo disgusto la mujer-) y las aceitunas llegan al cielo donde en la siguiente página dan al doctor Bombastus que está estudiando las nubes (en su globo pera) y, sobresaltado, deja caer el frasco de tinta (que tiñe una nube de negro: ¡por eso en la siguiente lámina está lloviendo!) y el frasco cae y asusta al portador del paraguas (miren en sus pies)...
Mención aparte merecen las hermosas ilustraciones, con una estética muy personal y coherente, perfectas para mostrar el mundo que sugieren y juegan, bellísimas y llenas de detalles delicados. Un regalo para el ojo, muy adecuado para glotones de cosas hermosas.
El álbum de Iban Barrenetxea es maravilloso, ideal para jugar (se puede copiar el modelo y extrañar más vegetales, o pasar a los animales o minerales o personas...), también ideal para observar y descubrir historias y más historias (no dejan de encontrarse en posteriores relecturas nuevos matices, historias...), y, por supuesto, ideal para leer y disfrutar (sin más pretensiones). Un libro inagotable, alimento para el ojo y el alma, ficción y juego en estado puro.
Un libro que es un lujo. Una verdadera joya.
Imprescindible.
Saludos
Qué pasada de reseña, Pep, estoy emocionado. ¡Abrazos!
ResponderEliminarAdmirado Iban, esta reseña no es nada: tu libro es una absoluta maravilla. Gracias a ti.
ResponderEliminarUn abrazo
Y yo sigo sin leerlo, de este mes no pasa. Gracias Pep por la reseña me ha encantado.
ResponderEliminarEnhorabuena Iban!
:-)))) Un beso Ade
ResponderEliminarMirad qué maravillosa animación de este libro han hecho en Corea (vía @libreros)
ResponderEliminarhttp://graffica.info/2013/02/10/impresionante-la-animacion-de-bombastica-naturalis-escrito-e-ilustrado-por-iban-barrenetxea/