Seguro que alguna vez os ha pasado que alguien os ha confundido con otra persona. En esos momentos solemos pensar que tenemos un doble (más o menos parecido). Imaginad que esto os pasara a menudo y que no se tratara de un hecho puntual, sino de algo que empezara a suceder a menudo, como si tuvieras un montón de dobles pululando en tu misma ciudad, en tu mismo barrio, y que esto además os generara unos cuantos problemas (puede que algunos de tus dobles no sean tan buenas personas como tú). Pues este es el punto de partida de este librito, bien sugerente ¿no os parece?
Me ha interesado mucho que no se cuente el motivo por el que esto sucede, pues realmente el motivo es lo de menos, y lo que de verdad importa es cómo afecta esto a Perico, el protagonista, y, sobre todo, cómo lo resuelve (ojo, sin que el problema se resuelva).
Me ha gustado mucho (mucho, como os podréis imaginar), que el hecho de contar, de narrar, tenga tanta importancia en esta novelita y que, además, el protagonista sea "un gran narrador" (p. 97).
Me encanta que hablar y contar tenga tanta relevancia y así se haga constar en el libro. Los problemas se acumulan sobre todo porque el protagonista no tiene a quién contárselos (¡o porque los cuenta a la persona equivocada!).
La narración oral como algo que ayuda a organizar el discurso y la historia, a dar un punto de vista más alejado de los hechos (y por tanto con más campo de mira), a incorporar en la propia vida lo contado, a ver, comprender, asumir... Sí, en verdad me ha encantado cómo se resuelve el libro.
Una lectura estupenda que os hará pasar un buen rato.
Saludos
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