La pasada semana estuve contando cuentos por varios municipios de las provincias de Jaén, Madrid, Ciudad Real y también en Guadalajara capital. La próxima semana tengo unas 14 sesiones de cuentos por varios municipios de la provincia de Huesca. Parece claro que este oficio mío implica, entre otras cosas, viajar. Y mucho.
Hace unos años, antes de la irrupción de la crisis y el desmontaje sistemático de la cultura, yo hacía una media de unos 60.000 km al año con el coche (a los que había que sumar otros desplazamientos en avión o tren, que no eran pocos) para contar cuentos, dar talleres, hacer visitas de autor, etc. En estos últimos años la cifra ha bajado (unos 40.000 km al año), pero sigue siendo notable.
Hace unos diez años que, como autónomo, imputo en mi cuenta de gastos como gasto necesario para ejercer mi oficio lo relativo al coche. De hecho, para que no hubiera ninguna confusión en ese sentido, tuve que comprar un coche "de empresa", diferente del coche "de uso doméstico". Es más, esto no podía ser si el coche de casa era pequeño (pongamos un "Saxo") y el de empresa grande (pongamos un "Passat"). Por eso me "obligaron" a tener dos coches grandes, uno para casa (pongamos un "Passat") y otro para la empresa (pongamos otro "Passat"). Y digo que hace años que esto va siendo así (y sin problemas) desde que soy autónomo. (Vamos, sin problemas para los señores agentes tributarios, que para mí es una triste gracia tener que pagar dos coches grandes, y sus seguros y talleres y gastos e impuestos... a veces da la sensación que trabajo para el coche).
Sin embargo ha llegado la crisis y con ella el notable afán recaudatorio por parte de las administraciones (no para dotar a las bibliotecas, no para mejorar las escuelas, no para incrementar los servicios sanitarios... sino para mantener a flote a los bancos y tapar sus vergüenzas) y ahora resulta que la Agencia Tributaria ha decidido que mi coche "de empresa" no es justificable, y por lo tanto, no es imputable como gasto en mi oficio.
Sin embargo, paradojas del destino, sí me puedo desgravar como gasto un billete de tren. Pero no la gasolina del coche que uso para ir a contar.
Quizás se piensan los señores agentes tributarios que yo voy todos los días a contar a Madrid y Barcelona con tan buenas comunicaciones y tan "baratos" transportes públicos. Que me expliquen los señores agentes tributarios cómo viajo la próxima semana de Cabanillas del Campo a Fraga (echen cuentas del tiempo y combinaciones de transporte, por favor, y de costes), y de Fraga (donde cuento en dos lugares bien distantes en la misma mañana) a Torrente de Cinca, y de allí a Alcampell, luego a Altorricón, pasando por Tamarite de Litera y Albelda y de nuevo a Fraga y de ahí a Borrastre para terminar el sábado en Fiscal. Todo esto con "fantásticas" combinaciones de transporte público "ideales" para poder moverse de un lugar a otro. Ah, y luego tengo que volver de Fiscal a Cabanillas del Campo intentando llegar el sábado antes de que mis hijos se acuesten, por ver a la familia y pasar un rato con mis hijos (la familia, esa cosa que tanto parece importar a los políticos de la derecha y que por eso, tanto miman -¿o era minan?).
Ahora mi coche no quieren que sea imputado como gasto de mi oficio y yo no consigo entender por qué. Invito a los señores agentes tributarios a que se vengan conmigo la próxima semana de ruta, lo mismo salir de su despacho les hace ver las cosas de otro modo.
Sí, somos pocos contando en España, pero este oficio nuestro existe y es especial: hacemos muchos kilómetros, como los camioneros o los taxistas, e igual que ellos necesitamos un vehículo de empresa que nos lleve y nos traiga (con nuestra carga de cuentos). Pero es que además: creamos como los escritores, estamos frente a un público como los actores, preservamos textos antiguos como los archiveros, desvelamos lecturas como los bibliotecarios, educamos como los maestros, contamos historias como los directores de cine, divertimos como los payasos, hacemos magia con las palabras como los magos (¿o era malabares como los malabaristas?), emocionamos como los músicos... Sí, el nuestro es un oficio muy raro. Pero existe. Al menos de momento.
Y si estamos pagando religiosamente nuestros autónomos y nuestros impuestos (un 42% antes de abrir la boca para contar), entonces también será justo que podamos desgravarnos, como hasta ahora, los gastos que nuestro oficio conlleva. Digo yo. Y entre ellos, el coche. Digo yo.
Mientras tanto, así seguimos: los señores agentes tributarios erre que erre y sin ganas de devolverme lo que me corresponde según mi declaración de 2011 (es decir, la renta de 2010) y yo atónito sin entender nada. O entendiendo mucho. Y yendo día sí y día también a hablar con mi gestor y siguiendo con los recursos que la ley permite. Por eso escribo este post, y por eso quiero avisar: pienso agotar todas las vías legales. Me cueste lo que me cueste. No es una cuestión de que me devuelvan más o menos dinero de la renta de 2010. Es una cuestión de dignidad, de amor propio. Un acto de pura resistencia.
Saludos
miércoles, 31 de octubre de 2012
martes, 30 de octubre de 2012
StoryCubes
Tengo una pequeña colección de mazos de cartas para inventar historias (diez o doce tipos distintos). Las guardo más como curiosidad que como herramienta real para mi trabajo, aunque es cierto que hay algunas que las uso en talleres y cursos.
Ayer Alicja nos regaló tres cajas de StoryCubes, dados para inventar cuentos. Y mis hijos están completamente enganchados. Hasta yo estoy sorprendido de lo bien que funcionan, por eso los traigo hoy aquí, para que los conozcáis y, si os interesan, os hagáis con ellos y paséis muy buenos ratos jugando solos o en compañía.
Aquí tenéis una foto:
Y aquí tenéis esta versión estupenda elaborada a modo de aplicación informática por Arancha Ortiz, José Luis Martins Morais y Juan Carlos Falcón (vamos, no te lo pienses, entra en el enlace y juega, lo vas a disfrutar, te lo aseguro).
Saludos
Ayer Alicja nos regaló tres cajas de StoryCubes, dados para inventar cuentos. Y mis hijos están completamente enganchados. Hasta yo estoy sorprendido de lo bien que funcionan, por eso los traigo hoy aquí, para que los conozcáis y, si os interesan, os hagáis con ellos y paséis muy buenos ratos jugando solos o en compañía.
Aquí tenéis una foto:
Y aquí tenéis esta versión estupenda elaborada a modo de aplicación informática por Arancha Ortiz, José Luis Martins Morais y Juan Carlos Falcón (vamos, no te lo pienses, entra en el enlace y juega, lo vas a disfrutar, te lo aseguro).
Saludos
lunes, 29 de octubre de 2012
Hoy en la SER
Es lunes y todos los lunes toca recomendar libros en la SER. Hoy ando algo despistado tras el turbión de emociones ayer en las puertas del Teatro Moderno, espero que no se me note mucho delante de los micrófonos. Y es que lo de ayer fue, en verdad, una de esas sesiones que te rondan durante días y no te borran la sonrisa de la cara. Una sesión inolvidable.
Pero vayamos al lío.
Hoy, como es costumbre, he recomendado un par de libros.
Para empezar traje uno de los últimos álbumes de Julia Donaldson y Axel Scheffler publicados en España, se trata de El dragón Zog, traducido por Roberto Aliaga y publicado por MacMillan Infantil y Juvenil. Si escucháis mi participación en los lunes de la SER de Guadalajara desde hace algún tiempo sabréis que este tándem de autora-ilustrador me gusta mucho, que alguno de sus libros se encuentra entre mis favoritos (y los favoritos de millones de niños y niñas), y que siempre que puedo los traigo aquí. El dragón Zog os hará pasar un buen rato con los más pequeños, seguro, a pesar del buenismo final del texto el cuento funciona. Ah, y la traducción de Roberto Aliaga está fenomenal.
Para continuar he traído un libro de cuentos eróticos, un clásico [quizás me anime a traer una vez al mes algún libro de este género]. Se trata de Delta de Venus, de Anaïs Nin, mi edición es de Círculo de Lectores pero podréis encontrarla también en Plaza y Janés. Esta colección es muy interesante por varios motivos: para empezar porque pertenece al género de la literatura erótica, un ámbito bastante secreto y, durante siglos, perseguido, quizás no tanto por la temática que toca (que también), sino por se acerado y crítico en sus textos y mostrando las vergüenzas de una sociedad siempre tan hipócrita (en este sentido, quizás os interese echar un vistazo a estas breves reflexiones sobre contar cuentos eróticos). Para continuar, estos cuentos fueron escritos por encargo (lo cual resulta una rareza interesante). Y para terminar, estos cuentos eróticos quizás sean punta de lanza de la voz narrativa femenina en el género de la literatura erótica. Más información sobre este libro aquí.
En suma, un festín de relatos vergonzantes contados por una escritora con voz firme, ideales para estos días de frío.
También me dio tiempo a contar una fabulita de Esopo, la de "La zorra que acariciaba a un corderito y el perro". Sin desperdicio, claro.
Aquí tienes el audio de mi intervención hoy en la SER.
Feliz semana de cuentos.
Saludos
Pero vayamos al lío.
Hoy, como es costumbre, he recomendado un par de libros.
Para empezar traje uno de los últimos álbumes de Julia Donaldson y Axel Scheffler publicados en España, se trata de El dragón Zog, traducido por Roberto Aliaga y publicado por MacMillan Infantil y Juvenil. Si escucháis mi participación en los lunes de la SER de Guadalajara desde hace algún tiempo sabréis que este tándem de autora-ilustrador me gusta mucho, que alguno de sus libros se encuentra entre mis favoritos (y los favoritos de millones de niños y niñas), y que siempre que puedo los traigo aquí. El dragón Zog os hará pasar un buen rato con los más pequeños, seguro, a pesar del buenismo final del texto el cuento funciona. Ah, y la traducción de Roberto Aliaga está fenomenal.
Para continuar he traído un libro de cuentos eróticos, un clásico [quizás me anime a traer una vez al mes algún libro de este género]. Se trata de Delta de Venus, de Anaïs Nin, mi edición es de Círculo de Lectores pero podréis encontrarla también en Plaza y Janés. Esta colección es muy interesante por varios motivos: para empezar porque pertenece al género de la literatura erótica, un ámbito bastante secreto y, durante siglos, perseguido, quizás no tanto por la temática que toca (que también), sino por se acerado y crítico en sus textos y mostrando las vergüenzas de una sociedad siempre tan hipócrita (en este sentido, quizás os interese echar un vistazo a estas breves reflexiones sobre contar cuentos eróticos). Para continuar, estos cuentos fueron escritos por encargo (lo cual resulta una rareza interesante). Y para terminar, estos cuentos eróticos quizás sean punta de lanza de la voz narrativa femenina en el género de la literatura erótica. Más información sobre este libro aquí.
En suma, un festín de relatos vergonzantes contados por una escritora con voz firme, ideales para estos días de frío.
También me dio tiempo a contar una fabulita de Esopo, la de "La zorra que acariciaba a un corderito y el perro". Sin desperdicio, claro.
Aquí tienes el audio de mi intervención hoy en la SER.
Saludos
domingo, 28 de octubre de 2012
En el Teatro Moderno
Hoy he contado cuentos en la puerta del Teatro Moderno dentro de la programación alternativa que la Asociación de Amigos del Moderno ha elaborado para este mes de octubre como medida de protesta por el cierre/privatización que la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha ha decidido para este emblemático teatro de nuestra ciudad.
Estoy completamente emocionado porque han asistido unas doscientas personas a la sesión de cuentos, con sus sillas y alfombras y bien abrigados (que frío hacía, frío de ese que anticipa ya en firme la llegada del invierno), y con muchas ganas de reivindicar lo suyo y pasarlo bien.
He llevado algunos cuentos participativos, de esos en los que el público tiene que cantar algo o responder o mover un brazo, igual que he llevado cuentos de los de escuchar y disfrutar por la historia hermosa que narran o cuentos que eran invitaciones a jugar e improvisar. En suma, una sesión con cuentos variados pero que tenían algo en común: las ganas de pasarlo bien y de reivindicar lo nuestro. Quizás por eso han ido saliendo algunos guiños en los cuentos ante la situación del Teatro Moderno, citas a la responsabilidad de los gestores de lo público (de lo nuestro), referencias al valor de la democracia y al poder de la comunidad, etc.
En suma, ha sido una tarde maravillosa, muy emocionante, muy feliz. Se siente uno con fuerzas para seguir embarcado en este y todos los frentes que haga falta. Porque vamos a resistir. Seguro.
Si encuentro alguna reseña o crónica del evento aquí dejaré constancia.
Saludos
foto MJPC |
He llevado algunos cuentos participativos, de esos en los que el público tiene que cantar algo o responder o mover un brazo, igual que he llevado cuentos de los de escuchar y disfrutar por la historia hermosa que narran o cuentos que eran invitaciones a jugar e improvisar. En suma, una sesión con cuentos variados pero que tenían algo en común: las ganas de pasarlo bien y de reivindicar lo nuestro. Quizás por eso han ido saliendo algunos guiños en los cuentos ante la situación del Teatro Moderno, citas a la responsabilidad de los gestores de lo público (de lo nuestro), referencias al valor de la democracia y al poder de la comunidad, etc.
foto de NuevaAlcarria |
Si encuentro alguna reseña o crónica del evento aquí dejaré constancia.
- Noticia en PlaceresYMás previa a la sesión de cuentos: Pep Bruno defenderá con sus cuentos el NO al cierre del Teatro Moderno, por Paz Ruiz Utrilla.
- Crónica de CulturaEnGuada: El cuento como fórmula de resistencia, de Rubén Madrid.
- Noticia en DiarioCrítico CLM: Contando cuentos para salvar un teatro de Guadalajara del cierre.
- Breve nota en Nueva Alcarria: Pep Bruno cerró la programación reivindicativa a las puertas del Moderno.
- Nota de la Plataforma NO AL CIERRE DEL TEATRO MODERNO: Una tarde más el público ha acudido a la cita dominical en las puertas del Teatro Moderno, más de doscientas personas han colocado su silla en medio de la calle esperando que comenzase la función, en esta ocasión los cuentos de Pep Bruno.Esta tarde Pep nos ha regalado sus cuentos, los ha puesto al servicio de la causa, y ha demostrado que le sobran tablas, que es un narrador como la copa de una "encina", que puede hacernos disfrutar dentro y fuera del teatro, que se entiende bien con los grandes y también con los pequeños. Aun en plena calle y con frío nos hemos sentido abrigados (la palabra bien dicha siempre calienta), formando parte de algo (lo oral crea comunidad) y, lo más importante, reivindicando un espacio de la ciudad que no debería estar cerrado.Aunque hoy ha sido la última de la funciones de la programación alternativa a las puertas del teatro moderno esto no es un colorín colorado, nada de eso: la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha tiene que contarnos todavía qué pretende hacer con el único teatro de titularidad regional, cuándo y cómo va a ser esa superinauguración de la que hablaba el Consejero. Los ciudadanos de Guadalajara vamos a seguir defendiendo el Moderno con todas nuestras energías, pidiendo su reapertura y recordándoles a los gestores de lo público que una de sus obligaciones es promover la cultura y hacerla accesible a todos los ciudadanos, que en el Moderno la función debe continuar.Gracias a las personas que han actuado a las puertas del Moderno, a las que han venido con su silla y a las que lo han contado y difundido.
Saludos
Bálano
Acabo de terminar de leer Bálano, de Eduardo Rojas Rebolledo, publicado en Fondo de Cultura Económica. Este libro me lo recomendó (y me lo hizo llegar, todo sea dicho) mi buena amiga Charo Pita, narradora y escritora.
El libro nos cuenta la historia de Günter von Gropius y Hugo von Nagel, o más exactamente nos cuenta la vida de Hugo von Nagel relatada por Günter von Gropius. Hay otros personajes relevantes en esta historia (Estefania, Nora, Maria, Inés, los marineros del Kalamanzuf -especialmente Chuco Moreira-, etc.). Os preguntaréis qué tiene de peculiar la vida de Hugo para que merzca esta novela, la respuesta está en el título: Bálano. El bálano es la "parte extrema o cabeza del miembro viril" según recoge el DRAE, y la peculiaridad de Hugo es que su bálano es enorme, tan grande que no hay lugar (o casi no hay) donde alojarlo temporalmente.
Dicho esto uno podría pensar que esta novela nos cuenta un montón de aventuras y desventuras sexuales alrededor del prodigioso pene del protagonista. Y si bien es cierto que hay escenas eróticas y sexuales, también es cierto que no es el eje principal de la trama de la novela. Me explico: en verdad el bálano desmesurado es el motor de la acción, pero no es la acción en sí, pues toda la novela nos cuenta las dificultades de Hugo von Nagel para amar y ser correspondido en su amor. Por eso me atrevería a decir que este libro es una hermosa y trágica historia de amor en la que el sexo ocupa el lugar que le corresponde dentro de la trama.
Tiene además unas estupendas descripciones amatorias, con una riqueza de matices, detalles, vocablos... que hacen de su lectura un verdadero disfrute para el ojo y la piel. Y es, como muchas otras buenas novelas, un viaje en busca de la propia felicidad, con sus remansos y sus rápidos, con sus tormentas huracanadas y sus playas en calma.
Tiene además un personaje especial, Chuco Moreira, ayudante del cocinero en el Kalamanzuf, que es un narrador incontinente (y cuyo final resulta muy interesante y cargado de simbolismo). Os lo dejo unas líneas en acción:
"Las noches que siguieron en altamar fueron nuestra versión austera de las portentosas Mil y una. Chuco Moreira nos habló incontinente de todas las situaciones por la que había pasado desde que Hugo y yo abandonamos el Kalamanzuf al regreso de Filipinas. Nos contó, con lágrimas sinceras, del triste fallecimiento de Julios Narek. Lo hizo en un tono épico, glorioso, como si en vez de estar hablando de un bruto cocinero que murió abatido por una sobredosis de ginebra, estuviera habldo del furioso Orlando cayendo en los brazos heroicos de Carlomagno. Éstas son las cosas que me fascinan de las mentes ingenuas y sinceras: su capacidad -en todos los haceres de la vida- para extraer la belleza de los hechos más simples y vulgares. Cuántos hombres de letras no venderían su alma por un talento de tal guisa.
También nos relató (...) una a una sus aventuras de burdel. Empleaba la minucia de un retratista flamenco para cada descripción, pormenorizando en los olores y sabores, en las texturas y densidades de los pechos y las nalgas, en los brillos de la lengua o la espesura del pubis, y resaltando el ritmo de los gemidos... las sacudidas de sus placeres. Hubo momentos en los que Hugo y yo sentimos la sangre palpitarnos caliente en la entrepierna; y los hubo, también, en los que la risa nos nació incontrolable: por lo grotesco de la escena, por las metáforas de las que echaba mano el entusiasta narrador... Chuco contaba a los cuatro vientos, pero cada pausa, cada silencio, eran para Hugo von Nagel: para buscar su mirada de complicidad, la aquiesencia del admirado maestro." (pp. 115-116).
He disfrutado mucho con su lectura y os la recomiendo sabiendo que también disfrutaréis leyéndolo.
Saludos
El libro nos cuenta la historia de Günter von Gropius y Hugo von Nagel, o más exactamente nos cuenta la vida de Hugo von Nagel relatada por Günter von Gropius. Hay otros personajes relevantes en esta historia (Estefania, Nora, Maria, Inés, los marineros del Kalamanzuf -especialmente Chuco Moreira-, etc.). Os preguntaréis qué tiene de peculiar la vida de Hugo para que merzca esta novela, la respuesta está en el título: Bálano. El bálano es la "parte extrema o cabeza del miembro viril" según recoge el DRAE, y la peculiaridad de Hugo es que su bálano es enorme, tan grande que no hay lugar (o casi no hay) donde alojarlo temporalmente.
Dicho esto uno podría pensar que esta novela nos cuenta un montón de aventuras y desventuras sexuales alrededor del prodigioso pene del protagonista. Y si bien es cierto que hay escenas eróticas y sexuales, también es cierto que no es el eje principal de la trama de la novela. Me explico: en verdad el bálano desmesurado es el motor de la acción, pero no es la acción en sí, pues toda la novela nos cuenta las dificultades de Hugo von Nagel para amar y ser correspondido en su amor. Por eso me atrevería a decir que este libro es una hermosa y trágica historia de amor en la que el sexo ocupa el lugar que le corresponde dentro de la trama.
Tiene además unas estupendas descripciones amatorias, con una riqueza de matices, detalles, vocablos... que hacen de su lectura un verdadero disfrute para el ojo y la piel. Y es, como muchas otras buenas novelas, un viaje en busca de la propia felicidad, con sus remansos y sus rápidos, con sus tormentas huracanadas y sus playas en calma.
Tiene además un personaje especial, Chuco Moreira, ayudante del cocinero en el Kalamanzuf, que es un narrador incontinente (y cuyo final resulta muy interesante y cargado de simbolismo). Os lo dejo unas líneas en acción:
"Las noches que siguieron en altamar fueron nuestra versión austera de las portentosas Mil y una. Chuco Moreira nos habló incontinente de todas las situaciones por la que había pasado desde que Hugo y yo abandonamos el Kalamanzuf al regreso de Filipinas. Nos contó, con lágrimas sinceras, del triste fallecimiento de Julios Narek. Lo hizo en un tono épico, glorioso, como si en vez de estar hablando de un bruto cocinero que murió abatido por una sobredosis de ginebra, estuviera habldo del furioso Orlando cayendo en los brazos heroicos de Carlomagno. Éstas son las cosas que me fascinan de las mentes ingenuas y sinceras: su capacidad -en todos los haceres de la vida- para extraer la belleza de los hechos más simples y vulgares. Cuántos hombres de letras no venderían su alma por un talento de tal guisa.
También nos relató (...) una a una sus aventuras de burdel. Empleaba la minucia de un retratista flamenco para cada descripción, pormenorizando en los olores y sabores, en las texturas y densidades de los pechos y las nalgas, en los brillos de la lengua o la espesura del pubis, y resaltando el ritmo de los gemidos... las sacudidas de sus placeres. Hubo momentos en los que Hugo y yo sentimos la sangre palpitarnos caliente en la entrepierna; y los hubo, también, en los que la risa nos nació incontrolable: por lo grotesco de la escena, por las metáforas de las que echaba mano el entusiasta narrador... Chuco contaba a los cuatro vientos, pero cada pausa, cada silencio, eran para Hugo von Nagel: para buscar su mirada de complicidad, la aquiesencia del admirado maestro." (pp. 115-116).
He disfrutado mucho con su lectura y os la recomiendo sabiendo que también disfrutaréis leyéndolo.
Saludos
sábado, 27 de octubre de 2012
Menuda semana
Esta semana ha sido bien ajetreada: sesiones varias de cuentos en Las Rozas; visita de autor por Alcázar de San Juan; charlas y sesiones de cuentos por varios municipios de Jaén (mira, aquí una breve nota de mi paso por Andújar, o esta entrada del paseo por Arjonilla); celebración del Día de la Biblioteca; la sesión de cuentos en La Posada del Diablo, en Alcalá de Henares (mira, otra nota) y, para terminar, mañana sesión de cuentos-protesta por el cierre y/o privatización del Teatro Moderno de Guadalajara.
Y por eso escribo esta pequeña entrada en el blog, para animaros a que vengáis mañana a la sesión de cuentos a las puertas del Teatro Moderno. Será a las 17,00, habrá que venir abrigados y con silla, pero seguro que lo vamos a pasar bien. Lo explica con todo lujo de detalles Pilar Ruiz en esta recomendación del blog PlaceresYMás, echa un vistazo si todavía no lo tienes claro.
Y por eso escribo esta pequeña entrada en el blog, para animaros a que vengáis mañana a la sesión de cuentos a las puertas del Teatro Moderno. Será a las 17,00, habrá que venir abrigados y con silla, pero seguro que lo vamos a pasar bien. Lo explica con todo lujo de detalles Pilar Ruiz en esta recomendación del blog PlaceresYMás, echa un vistazo si todavía no lo tienes claro.
jueves, 25 de octubre de 2012
El trovador Macías
Ayer estuve contando cuentos para adultos en Arjonilla, un pueblo de la campiña jienense rodeado de extensos olivares. No es la primera vez que paso por este lugar a contar, pero sí la primera que tuve tiempo para dar un paseo y contemplar algunos de sus rincones.
Lo que me interesó de Arjonilla (hasta tal punto de traerlo a este blog), es su vinculación con la leyenda del trovador Macías, el Enamorado. Pero vayamos por partes.
En la extensa familia de los cantores y narradores (a lo largo de los siglos y las culturas) los trovadores tuvieron un lugar bien destacado en la Europa de los siglos XII y XIII. Los trovadores solían provenir de alta cuna (llegó a haber entre ellos algún rey y algún Papa, lo que da una pista de lo prestigiado que estaba escribir y cantar poesía). Fueron también los trovadores quienes se encargaron de dar a conocer y difundir la nueva del "amor cortés" y, por tanto, de edificar los fundamentos del concepto de amor en la literatura tal como se entiende ahora en Occidente.
Además, mientras los poetas todavía componían sus versos en latín, los trovadores utilizaban para sus composiciones las lenguas vernáculas (occitano, catalán, alemán, galaico-portugués, castellano...). Esto es muy interesante porque en su momento supuso algo completamente novedoso y fue un paso muy importante en la recuperación de la palabra: se contaba/cantaba y todo el público que escuchaba podía entender lo que se contaba y cantaba. No sucedía lo mismo con las composiciones escritas en latín que, para ser entendidas, era necesario que el auditorio tuviera conocimientos de esa lengua.
Por otro lado, y en un plano más popular, los trovadores cohabitaban con los juglares, que también cantaban y contaban (en muchas ocasiones composiciones de otros, o cuentos y canciones tradicionales, aunque algunos también componían sus propios textos) pero, además, podían desarrollar otras actividades artísticas y de entretenimiento (saltimbanquis, músicos, danzantes, equilibristas...).
Aunque al principio estos juglares estuvieron mal vistos (Alfonso X el Sabio llegó a declararlos infames) poco a poco fueron encontrando el favor, no solo de las clases populares, sino también de los nobles.
De hecho, con el paso de los años, hubo juglares que pasaron a formar parte de algunas cortes, y se les denominó bufones (aunque si leéis el enlace con detenimiento veréis que los poderosos siempre han tenido costumbre de rodearse de cómicos que han recibido distintos nombres a lo largo de los tiempos).
Estos juglares pasaron de las plazas de los pueblos a los pórticos de las iglesias y más adelante llegaron a trabajar dentro de las mismas iglesias en lo que fue el germen del teatro medieval español.
Dicho todo esto, volvamos a Arjonilla y al trovador Macías el enamorado y su historia: El trovador, que Macías estaba al servicio del marqués de Villena, se enamoró de doña Elvira, una dama de compañía de la marquesa. Sin embargo el marqués casó a doña Elvira con un rico hidalgo. A pesa de ello Macías y doña Elvira perseveraron en su amor y el marqués decidió recluir al trovador en la cárcel de Arjonilla. Allí Macías siguió cantando a su amada hasta que un día, el marido, loco de celos, fue hasta la cárcel y le dio muerte.
He encontrado diferentes versiones en la red, pero la más fiable, una vez más, es esta que os enlazo directamente desde la wikipedia.
Ayer pude dar una vuelta por Arjonilla, ver el castillo donde el trovador estuvo recluido y pasear por la calle que lleva su nombre. No conozco muchas calles dedicadas a cantores y narradores, ni muchos pueblos que se honren por tener entre sus señas de identidad historias vinculadas con la palabra dicha, por eso mi visita de ayer a este lugar resultó especialmente emocionante.
Saludos
Lo que me interesó de Arjonilla (hasta tal punto de traerlo a este blog), es su vinculación con la leyenda del trovador Macías, el Enamorado. Pero vayamos por partes.
UN POCO DE HISTORIA Y TÉRMINOS
(Del estudio de la figura del narrador oral, en el que ando enredado)
En la extensa familia de los cantores y narradores (a lo largo de los siglos y las culturas) los trovadores tuvieron un lugar bien destacado en la Europa de los siglos XII y XIII. Los trovadores solían provenir de alta cuna (llegó a haber entre ellos algún rey y algún Papa, lo que da una pista de lo prestigiado que estaba escribir y cantar poesía). Fueron también los trovadores quienes se encargaron de dar a conocer y difundir la nueva del "amor cortés" y, por tanto, de edificar los fundamentos del concepto de amor en la literatura tal como se entiende ahora en Occidente.
Además, mientras los poetas todavía componían sus versos en latín, los trovadores utilizaban para sus composiciones las lenguas vernáculas (occitano, catalán, alemán, galaico-portugués, castellano...). Esto es muy interesante porque en su momento supuso algo completamente novedoso y fue un paso muy importante en la recuperación de la palabra: se contaba/cantaba y todo el público que escuchaba podía entender lo que se contaba y cantaba. No sucedía lo mismo con las composiciones escritas en latín que, para ser entendidas, era necesario que el auditorio tuviera conocimientos de esa lengua.
Por otro lado, y en un plano más popular, los trovadores cohabitaban con los juglares, que también cantaban y contaban (en muchas ocasiones composiciones de otros, o cuentos y canciones tradicionales, aunque algunos también componían sus propios textos) pero, además, podían desarrollar otras actividades artísticas y de entretenimiento (saltimbanquis, músicos, danzantes, equilibristas...).
Aunque al principio estos juglares estuvieron mal vistos (Alfonso X el Sabio llegó a declararlos infames) poco a poco fueron encontrando el favor, no solo de las clases populares, sino también de los nobles.
De hecho, con el paso de los años, hubo juglares que pasaron a formar parte de algunas cortes, y se les denominó bufones (aunque si leéis el enlace con detenimiento veréis que los poderosos siempre han tenido costumbre de rodearse de cómicos que han recibido distintos nombres a lo largo de los tiempos).
Estos juglares pasaron de las plazas de los pueblos a los pórticos de las iglesias y más adelante llegaron a trabajar dentro de las mismas iglesias en lo que fue el germen del teatro medieval español.
SOBRE EL TROVADOR MACÍAS Y SU LEYENDA
Dicho todo esto, volvamos a Arjonilla y al trovador Macías el enamorado y su historia: El trovador, que Macías estaba al servicio del marqués de Villena, se enamoró de doña Elvira, una dama de compañía de la marquesa. Sin embargo el marqués casó a doña Elvira con un rico hidalgo. A pesa de ello Macías y doña Elvira perseveraron en su amor y el marqués decidió recluir al trovador en la cárcel de Arjonilla. Allí Macías siguió cantando a su amada hasta que un día, el marido, loco de celos, fue hasta la cárcel y le dio muerte.
He encontrado diferentes versiones en la red, pero la más fiable, una vez más, es esta que os enlazo directamente desde la wikipedia.
Ayer pude dar una vuelta por Arjonilla, ver el castillo donde el trovador estuvo recluido y pasear por la calle que lleva su nombre. No conozco muchas calles dedicadas a cantores y narradores, ni muchos pueblos que se honren por tener entre sus señas de identidad historias vinculadas con la palabra dicha, por eso mi visita de ayer a este lugar resultó especialmente emocionante.
Saludos
miércoles, 24 de octubre de 2012
Feliz Día de la Biblioteca
El 24 de octubre celebramos el Día de la Biblioteca. En la biblioteca el cuento contado habita cómodo y es gracias a la biblioteca que mi oficio, el de contar cuentos, ha resurgido y se ha consolidado en estos últimos años.
Por eso desde AEDA, la asociación de profesionales de la narración oral en España, hemos hecho un pequeño vídeo que quiere ser un homenaje a la biblioteca. A las bibliotecas.
Por eso desde AEDA, la asociación de profesionales de la narración oral en España, hemos hecho un pequeño vídeo que quiere ser un homenaje a la biblioteca. A las bibliotecas.
A la biblioteca, a las bibliotecas, gracias.
¡Feliz Día de la Biblioteca!
Saludos
¡Feliz Día de la Biblioteca!
Saludos
lunes, 22 de octubre de 2012
Hoy en la SER
Hoy es lunes y, como todos los lunes, toca ir a la radio para hablar un poco de todo y recomendar también libros. Comenzamos charlando sobre la huelga de las familias convocada por la CEAPA, también hablamos del inicio de los Viernes de los Cuentos (fantástica Jan Blake) y del Teatro Moderno y de la semana que hoy comienza y en la que se celebra el Día Internacional de la Biblioteca. En casa pasamos así el día de la huelga.
Además nos dio tiempo para hablar de libros.
En primer lugar hice mi presentación en sociedad de mi último álbum (no deja de darme algo de pudor esto de hablar de mis libros... en fin): La mejor bellota, con ilustraciones estupendas hechas por Lucie Müllerová, con la que ya he trabajado en otros tres libros más: Un loro en mi granja, La noche de los cambios y Un lugar donde ser feliz. Sobre La mejor bellota he puesto algo más de información aquí, por si queréis echar un vistazo.
También os recomendé un estupendo libro de cuentos, se titula Vean ve, mis nanas negras, está escrito por la narradora colombiana Amalia Lú Posso Figueroa y publicado por la editorial alcarreña Palabras del Candil. Un libro sabroso, erótico, alegre, juguetón... En este enlace podéis ver a la autora contando uno de los cuentos del libro (creo que es suficiente buena carta de presentación para invitaros a leerlo). Más información sobre las nanas negras aquí.
Antes de terminar nos dio tiempo a contar un cuentecito de Esopo, fue el turno de "La comadreja y el gallo".
Saludos y feliz semana llena de lecturas.
Y feliz Día Internacional de la Biblioteca este miércoles.
Saludos
Además nos dio tiempo para hablar de libros.
En primer lugar hice mi presentación en sociedad de mi último álbum (no deja de darme algo de pudor esto de hablar de mis libros... en fin): La mejor bellota, con ilustraciones estupendas hechas por Lucie Müllerová, con la que ya he trabajado en otros tres libros más: Un loro en mi granja, La noche de los cambios y Un lugar donde ser feliz. Sobre La mejor bellota he puesto algo más de información aquí, por si queréis echar un vistazo.
También os recomendé un estupendo libro de cuentos, se titula Vean ve, mis nanas negras, está escrito por la narradora colombiana Amalia Lú Posso Figueroa y publicado por la editorial alcarreña Palabras del Candil. Un libro sabroso, erótico, alegre, juguetón... En este enlace podéis ver a la autora contando uno de los cuentos del libro (creo que es suficiente buena carta de presentación para invitaros a leerlo). Más información sobre las nanas negras aquí.
Antes de terminar nos dio tiempo a contar un cuentecito de Esopo, fue el turno de "La comadreja y el gallo".
Y feliz Día Internacional de la Biblioteca este miércoles.
Saludos
domingo, 21 de octubre de 2012
El Palacio de los Sueños
Hace ya tiempo os hablaba en este mismo blog de un libro de Ismaíl Kadaré titulado Tres cantos fúnebres por Kosovo. Aunque es un autor al que sigo desde hace años, cuando leí El expediente H y quedé deslumbrado por completo. No me cansaré de repetir que todos los que vivimos con pasión la narración oral deberíamos conocer los libros de este autor, y especialmente, El expediente H. Pero vayamos con la lectura de hoy.
Acabo de terminar de leer El Palacio de los Sueños, de Ismaíl Kadaré, traducido por Ramón Gómez Lizarralde y publicado por Alianza editorial (en su colección de bolsillo > biblioteca Kadaré).
El libro nos cuenta las peripecias de Mark-Alem, un miembro de la poderosa familia Qyprilli, que entra a trabajar en el misterioso Tabir Saray, el Palacio de los Sueños. El destino del protagonista y de la familia van de la mano a lo largo de toda la novela. El ambiente de incertidumbre, las situaciones oníricas, la trama entre brumas y lámparas a medio gas... consiguen armar una novela completamente fascinante.
La idea de un poderoso Palacio de los Sueños dedicado a recoger todos los sueños del imperio (un imperio con más de 40 naciones), seleccionarlos e interpretarlos para elegir, entre todos, uno (cada semana) que sea llevado al emperador y que éste decida los designios del imperio en función de este "sueño maestro", es absolutamente deslumbrante. El secreto y la incertidumbre que rodea al Tabir Saray, el misterio de sus secciones, sus pasillos laberínticos, sus incomprensibles designios (que nacen de sueños y no de hechos), sus personajes solitarios, sus puertas cerradas... nos atrapa desde las primeras páginas: uno no sabe bien (hablo por el lector, pero también por los protagonistas) en qué plano transcurre la historia: el onírico o el real.
Sucede además que, íntimamente relacionado con este Palacio en brumas, transcurre la vida de la familia Qyprilli, la única estirpe en Europa protagonista de una epopeya que todavía se canta. Así pues, Kadaré vuelve a traer a los cantores a su novela, y lo hace no de manera casual, pues la presencia de los aeda y su canto es el momento culminante de la novela. No me resisto a dejar aquí algunos párrafos, el último algo largo, pero creo que merece la pena:
"Vosotros los Qyprilli sois en la actualidad la única familia aristocrática de Europa, y seguramente del mundo, a quienes se dedica una canción de gesta. (...) Si a una gran familia alemana o francesa se le cantar en la actualidad la centésima parte de lo que se nos dedica a nosotros en los Balcanes, lo proclamaría a los cuatro vientos como el mayor de los orgullos y de los milagros." (p. 74-45)
"Corría la voz de que el soberano envidiaba a los Qyprilli precisamente a causa de esa epopeya. Decenas de divanes y poemas diversos habían sido compuestos para su glorificación por los poetas oficiales, pero en parte alguna se le había dedicado una canción de gesta comparable a la de los Qyprilli." (p. 76)
[los rapsodas] "Entraron al poco, en medio de un profundo silencio. Eran tres, vestidos con sus trajes típicos, dos de mediana edad, el tercero más joven, sosteniendo cada uno entre las manos su frágil instrumento musical (...) los lahutas, según los llamaban, muy semejantes a las guslas de los rapsodas eslavos. Experimentó la misma sorpresa, por no decir desengaño, que había sentido al ver por vez primera las guslas. Como había escuchado hablar tanto de la famosa epopeya, imaginó que los instrumentos musicales con que se acompañaría serían igualmente extraordinarios, pesados, majestuosos, sobrecogedores, y que los rapsodas apenas podrían arrastrarlos. Y la gusla resultó ser un sencillo instrumento de madera, que se sostenía fácilmente en la mano, y con una cuerda sola. Era verdaderamente increíble que aquel pedazo de madera provisto de una cuerda fuera capaz de dar vida a la gigantesca y secular epopeya. Ahora, al ver la lahuta, la decepción le pareció aún más hiriente. (...) Esperaba encontrarla no sólo pesada y enorme, sino casi salpicada por la sangre de las crueldades que la epopeya narraba. Sin embargo era tan tosca como su hermana eslava. La misma madera con un hueco abierto por la cara superior y la misma cuerda solitaria atravesándola.
Los rapsodas continuaban de pie (...). Tenían los cabellos claros, igual que los ojos. Más que menosprecio, sus miradas parecían expresar la negativa a que penetrara en su interior el cuadro que los rodeaba. (...)
Uno de los rapsodas se sentó en un escabel dispuesto allí por el mayordomo, colocó la lahuta sobre sus rodillas y permaneció en silencio un rato, con los ojos fijos sobre la cuerda. A continuación su mano derecha alzó el arco y rozó la cuerda con él. Los primeros sonidos del instrumento eran bajos, monótonos, y expresaban una suerte de obstinación en volver al punto de partida. Eran como una larga, extraordinariamente larga queja, que provocaba angustia en el pecho. A Mark-Alem le pareció que, de continuar unos instantes más, todos ellos sentirían que se quedaban sin aire. ¿Cuánto tardarían en acompañar con palabras aquellos sones corrosivos? Esta pregunta parecía leerse en los ojos de todos. Era preciso revestir con palabras semejante música, de lo contrario la cuerda, con su estridencia prolongada, les acabaría lacerando el alma hasta hacerla sangrar.
Cuando por fin el rapsoda abrió la boca para cantar, Mark-Alem sintió alivio. Pero duró poco, pues, igual que el sonido del instrumento, la voz del rapsoda tenía algo de inhumana. Se diría que mediante una operación singular hubieran arrancado de ella todas las entonaciones cotidianas, para dejar sólo las de carácter perdurable. Era una voz en la que la garganta del hombre y la garganta de la montaña parecían haberse concertado largamente hasta eliminar toda discordancia. Después se habían concertado con otras voces progresivamente más distantes, hasta llegar a los gemidos de las estrellas. Además, tanto la voz como las palabras mismas eran de tal condición que parecían poder brotar así de las bocas de los vivos como de los muertos. La concertación, pues, alcanzaba también a los espíritus y puede que esta última fuera la más íntima, la más lograda.
Mark-Alem no apartaba los ojos de la delgada cuerda solitaria tensada sobre la boca de la oquedad. Era la cuerda la que daba origen al gemido, y la oquedad bajo ella la que lo devolvía, ampliándolo hasta proporciones aterradoresa. Súbitamente a Mark-Alem se le reveló que aquella cavidad era la caja torácica que alojaba el espíritu de la nación a la que él pertenecía. Desde allí se alzaba vibrante el gemido secular. Ya había conocido antes retazos de ella, pero sólo ahora tenía la ocasión de escucharla completa. Sentía en su propio pecho la cavidad vacía de la lahuta.
El otro rapsoda se puso entonces a cantar la balada del puente, y en el profundo silencio que reinaba Mark-Alem tuvo la impresión de distinguir los golpes de los albañiles que, balo el sol frío, construían el puente salpicado con la sangre del sacrificio, el puente que no sólo había dado su nombre a los Qyprilli sino que los había marcado también con su fatalidad. (...) El rapsoda continuaba con la misma voz vibrante. (...)
Todo estaba verdadera y definitivamente claro. Aquella cavidad de la lahuta era justo la tumba donde se debatía el muerto. Sus gemidos surgían desde las profundidades, estremecedores como cosa alguna en el mundo." (pp. 179-183)
Hay muchas más citas que hacen referencia a la epopeya (que resulta clave en la trama) y al canto de los rapsodas (y su destino), pero no debo desvelar más.
Reiterar una vez más que este autor es maravilloso, acaso imprescindible para los amantes de la tradición oral, de la narración oral, de las admirables gestas, cantos, epopeyas... que han pervivido durante siglos en la vieja Europa.
Un libro absolutamente delicioso. Una lectura imprescindible.
Saludos
Acabo de terminar de leer El Palacio de los Sueños, de Ismaíl Kadaré, traducido por Ramón Gómez Lizarralde y publicado por Alianza editorial (en su colección de bolsillo > biblioteca Kadaré).
El libro nos cuenta las peripecias de Mark-Alem, un miembro de la poderosa familia Qyprilli, que entra a trabajar en el misterioso Tabir Saray, el Palacio de los Sueños. El destino del protagonista y de la familia van de la mano a lo largo de toda la novela. El ambiente de incertidumbre, las situaciones oníricas, la trama entre brumas y lámparas a medio gas... consiguen armar una novela completamente fascinante.
La idea de un poderoso Palacio de los Sueños dedicado a recoger todos los sueños del imperio (un imperio con más de 40 naciones), seleccionarlos e interpretarlos para elegir, entre todos, uno (cada semana) que sea llevado al emperador y que éste decida los designios del imperio en función de este "sueño maestro", es absolutamente deslumbrante. El secreto y la incertidumbre que rodea al Tabir Saray, el misterio de sus secciones, sus pasillos laberínticos, sus incomprensibles designios (que nacen de sueños y no de hechos), sus personajes solitarios, sus puertas cerradas... nos atrapa desde las primeras páginas: uno no sabe bien (hablo por el lector, pero también por los protagonistas) en qué plano transcurre la historia: el onírico o el real.
Sucede además que, íntimamente relacionado con este Palacio en brumas, transcurre la vida de la familia Qyprilli, la única estirpe en Europa protagonista de una epopeya que todavía se canta. Así pues, Kadaré vuelve a traer a los cantores a su novela, y lo hace no de manera casual, pues la presencia de los aeda y su canto es el momento culminante de la novela. No me resisto a dejar aquí algunos párrafos, el último algo largo, pero creo que merece la pena:
"Vosotros los Qyprilli sois en la actualidad la única familia aristocrática de Europa, y seguramente del mundo, a quienes se dedica una canción de gesta. (...) Si a una gran familia alemana o francesa se le cantar en la actualidad la centésima parte de lo que se nos dedica a nosotros en los Balcanes, lo proclamaría a los cuatro vientos como el mayor de los orgullos y de los milagros." (p. 74-45)
"Corría la voz de que el soberano envidiaba a los Qyprilli precisamente a causa de esa epopeya. Decenas de divanes y poemas diversos habían sido compuestos para su glorificación por los poetas oficiales, pero en parte alguna se le había dedicado una canción de gesta comparable a la de los Qyprilli." (p. 76)
[los rapsodas] "Entraron al poco, en medio de un profundo silencio. Eran tres, vestidos con sus trajes típicos, dos de mediana edad, el tercero más joven, sosteniendo cada uno entre las manos su frágil instrumento musical (...) los lahutas, según los llamaban, muy semejantes a las guslas de los rapsodas eslavos. Experimentó la misma sorpresa, por no decir desengaño, que había sentido al ver por vez primera las guslas. Como había escuchado hablar tanto de la famosa epopeya, imaginó que los instrumentos musicales con que se acompañaría serían igualmente extraordinarios, pesados, majestuosos, sobrecogedores, y que los rapsodas apenas podrían arrastrarlos. Y la gusla resultó ser un sencillo instrumento de madera, que se sostenía fácilmente en la mano, y con una cuerda sola. Era verdaderamente increíble que aquel pedazo de madera provisto de una cuerda fuera capaz de dar vida a la gigantesca y secular epopeya. Ahora, al ver la lahuta, la decepción le pareció aún más hiriente. (...) Esperaba encontrarla no sólo pesada y enorme, sino casi salpicada por la sangre de las crueldades que la epopeya narraba. Sin embargo era tan tosca como su hermana eslava. La misma madera con un hueco abierto por la cara superior y la misma cuerda solitaria atravesándola.
Los rapsodas continuaban de pie (...). Tenían los cabellos claros, igual que los ojos. Más que menosprecio, sus miradas parecían expresar la negativa a que penetrara en su interior el cuadro que los rodeaba. (...)
Uno de los rapsodas se sentó en un escabel dispuesto allí por el mayordomo, colocó la lahuta sobre sus rodillas y permaneció en silencio un rato, con los ojos fijos sobre la cuerda. A continuación su mano derecha alzó el arco y rozó la cuerda con él. Los primeros sonidos del instrumento eran bajos, monótonos, y expresaban una suerte de obstinación en volver al punto de partida. Eran como una larga, extraordinariamente larga queja, que provocaba angustia en el pecho. A Mark-Alem le pareció que, de continuar unos instantes más, todos ellos sentirían que se quedaban sin aire. ¿Cuánto tardarían en acompañar con palabras aquellos sones corrosivos? Esta pregunta parecía leerse en los ojos de todos. Era preciso revestir con palabras semejante música, de lo contrario la cuerda, con su estridencia prolongada, les acabaría lacerando el alma hasta hacerla sangrar.
Cuando por fin el rapsoda abrió la boca para cantar, Mark-Alem sintió alivio. Pero duró poco, pues, igual que el sonido del instrumento, la voz del rapsoda tenía algo de inhumana. Se diría que mediante una operación singular hubieran arrancado de ella todas las entonaciones cotidianas, para dejar sólo las de carácter perdurable. Era una voz en la que la garganta del hombre y la garganta de la montaña parecían haberse concertado largamente hasta eliminar toda discordancia. Después se habían concertado con otras voces progresivamente más distantes, hasta llegar a los gemidos de las estrellas. Además, tanto la voz como las palabras mismas eran de tal condición que parecían poder brotar así de las bocas de los vivos como de los muertos. La concertación, pues, alcanzaba también a los espíritus y puede que esta última fuera la más íntima, la más lograda.
Mark-Alem no apartaba los ojos de la delgada cuerda solitaria tensada sobre la boca de la oquedad. Era la cuerda la que daba origen al gemido, y la oquedad bajo ella la que lo devolvía, ampliándolo hasta proporciones aterradoresa. Súbitamente a Mark-Alem se le reveló que aquella cavidad era la caja torácica que alojaba el espíritu de la nación a la que él pertenecía. Desde allí se alzaba vibrante el gemido secular. Ya había conocido antes retazos de ella, pero sólo ahora tenía la ocasión de escucharla completa. Sentía en su propio pecho la cavidad vacía de la lahuta.
El otro rapsoda se puso entonces a cantar la balada del puente, y en el profundo silencio que reinaba Mark-Alem tuvo la impresión de distinguir los golpes de los albañiles que, balo el sol frío, construían el puente salpicado con la sangre del sacrificio, el puente que no sólo había dado su nombre a los Qyprilli sino que los había marcado también con su fatalidad. (...) El rapsoda continuaba con la misma voz vibrante. (...)
Todo estaba verdadera y definitivamente claro. Aquella cavidad de la lahuta era justo la tumba donde se debatía el muerto. Sus gemidos surgían desde las profundidades, estremecedores como cosa alguna en el mundo." (pp. 179-183)
Hay muchas más citas que hacen referencia a la epopeya (que resulta clave en la trama) y al canto de los rapsodas (y su destino), pero no debo desvelar más.
Reiterar una vez más que este autor es maravilloso, acaso imprescindible para los amantes de la tradición oral, de la narración oral, de las admirables gestas, cantos, epopeyas... que han pervivido durante siglos en la vieja Europa.
Un libro absolutamente delicioso. Una lectura imprescindible.
Saludos
viernes, 19 de octubre de 2012
101 buenas razones para leer
El otro día me topé con este título en tuíter y al hablar de él en féisbuc (madre qué lío de e-redes) me lo recomendó Arancha OH. Lo cierto es que ya lo tengo en casa y es mi última lectura, así que aquí va.
Acabo de terminar de leer 101 buenas razones para leer, que recoge razones (101 en total) expresadas por niños y niñas para leer. Tiene ilustraciones de Guilleaume Long, prefacio de Beatrice Masini, y está publicado por Anaya.
No es lo que se dice un libro de lectura, sino más bien un libro para invitar a la lectura. Me ha gustado el diálogo estupendo entre texto e ilustración y muchas de las razones seleccionadas. Creo que podría ser un buen libro que fuera punto de partida de algo. Algunos ejemplos:
Saludos
Acabo de terminar de leer 101 buenas razones para leer, que recoge razones (101 en total) expresadas por niños y niñas para leer. Tiene ilustraciones de Guilleaume Long, prefacio de Beatrice Masini, y está publicado por Anaya.
No es lo que se dice un libro de lectura, sino más bien un libro para invitar a la lectura. Me ha gustado el diálogo estupendo entre texto e ilustración y muchas de las razones seleccionadas. Creo que podría ser un buen libro que fuera punto de partida de algo. Algunos ejemplos:
- La opción más obvia es, antes de leerlo, elaborar en clase (o en casa o en la biblioteca...) vuestro panel de razones para leer e ilustrarlo (mural, panel, librito hecho a mano...)
- Otra posibilidad es sacar estas razones y hacer pequeños folletos con los que empapelar vuestro centro, vuestra biblioteca, vuestro pueblo...
- También se puede usar el libro para leer cada día una razón y dialogar brevemente sobre ella.
- Una posibilidad cercana al libro es contar las historias que las ilustraciones nos narran (en algunos casos una misma historia salta de una razón a otra).
- Por supuesto, también podemos escribir las RAZONES PARA NO LEER, seguro que nos dan pistas para trabajar la lectura con nuestros chavales y acercarles los libros.
Saludos
Huelga en corto
Ayer fue 18 de octubre y la CEAPA nos convocó a las familias para que nos sumáramos a la huelga de estudiantes. Así lo hicimos. Mis hijos (y sus amigas Clara y Lucía) no fueron a sus centros (de primaria y secundaria), sino que se quedaron en casa todo el día (salvo para acudir a la manifestación de la tarde). Y no se quedaron jugando, no, ayer estuvieron trabajando duro: buscando información sobre la huelga y rodando un pequeño corto para explicar qué es una huelga.
Este es el resultado:
También podéis ver directamente el vídeo y algunas fotos (y notas) en su blog.
Como os podéis imaginar, estoy orgulloso y emocionado.
Saludos
Este es el resultado:
Como os podéis imaginar, estoy orgulloso y emocionado.
Saludos
jueves, 18 de octubre de 2012
La mejor bellota
Acaba de llegar a casa mi nuevo álbum. Se trata de La mejor bellota, cuento escrito por Pep Bruno e ilustrado por Lucie Müllerová, y publicado por Hermes Editora en su sello infantil Almadraba. Hoy ando muy liado con la protesta de las familias contra los recortes en Educación y por eso me limito a dejar esta breve nota (y foto).
En estos días os doy información más detallada de este álbum que ha quedado precioso.
Saludos
En estos días os doy información más detallada de este álbum que ha quedado precioso.
Saludos
miércoles, 17 de octubre de 2012
Blaise Cendrars
El pasado lunes estuve en Madrid, tenía una reunión de trabajo (un proyecto muy interesante del que os hablaré más adelante si todo sale bien, cruzad los dedos). Aprovechando, pude acercarme a ver y pasear por la nueva gran librería que han abierto en Callao: La Central.
Me gustó la librería, me pareció que, a pesar de ser bastante grande, resultaba acogedora y cercana. No estaba masificada y me pareció, en una primera impresión, que la selección de libros era bastante interesante. Aun así eché de menos algunas cosas como: más variedad de editoriales en el rincón de la LIJ; o un espacio dedicado a la literatura erótica; o algún libro de Palabras del Candil ;-)). Pero en general me llevé una buena sensación de mi primera visita.
Todo esto viene a cuento porque en mi paseo curioseando por la librería me topé con un libro estupendo: la Antología negra de Blaise Cendrars, traducida por Manuel Azaña (ahí es nada), edición a cargo de Jesús Cañete Ochoa, y publicada por Árdora ediciones.
De Blaise Cendrars hace años que tengo en casa como oro en paño un libro titulado Cuentos negros para niños blancos, ilustrado por Arcadio Lobato y publicado por Espasa Calpe en su colección Austral Juvenil (que dirigía Felicidad Orquín). Un libro estupendo y una de las primeras colecciones de cuentos africanos para niños, entre cuyos textos encontramos, por ejemplo, una variante estupenda del cuento del "Medio pollito" (al final de esta entrada os dejo un audio con una versión muy personal de este cuento".
La vida de Blaise Cendrars es una novela de acción: aventuras, viajes insólitos, participación en la Gran Guerra, pérdida de un brazo, poesía, novelas, vanguardias... Pero hoy quiero resaltar aquí su papel fundamental como difusor de la tradición oral africana.
Si bien es verdad que durante el siglo XIX se iban publicando colecciones de cuentos africanos, estas eran vistas como curiosidades antropológicas o textos sin valor literario. Sin embargo, a principios del siglo XX, igual que sucedió con artistas como Picasso que hallaron en la pintura y escultura africanas una inspiración y un referente imprescindibles para su propia búsqueda (y por este motivo fueron revalorizadas y reconocidas), Blaise Cendrars se empeñó en mostrar la belleza literaria que también estaba en los textos de la tradición oral africana, de ahí la importancia de su Antología negra, publicada en 1921, que tuvo una estupenda acogida por parte de los lectores.
Fue Blaise Cendrars quien abrió esta puerta a los cuentos de tradición oral africanos, quien se empeñó en su conocimiento y difusión, quien mostró la belleza y riqueza de sus historias y formas.
Obviamente hoy en día hay muchas y muy buenas colecciones de cuentos de muchas de las culturas que habitan el continente africano, pero esta primera colección tiene un algo de fundacional, de punto de partida, de hallazgo, que hace que me resulte especial.
Además la edición es estupenda, incluye la conferencia de Blaise Cendrars "Sobre la literatura de los negros", un completo estudio crítico de Jesús Cañete, Bibliografía y un par de notas a la edición (de la editorial a la presente edición y del propio autor en su primera edición).
Una lectura en la que ya me hallo enredado. Imprescindible si te gustan los cuentos de tradición oral.
Saludos
PD. Os dejo aquí un audio con una versión personal de la variante africana del "Medio pollito", he omitido al león (que quedaba sin su par en el texto escrito) y he tratado de dar una estructura reiterativa a todos los elementos (aunque es difícil por los distintos intereses del palo, el gato, el elefante...). Espero que os guste.
Me gustó la librería, me pareció que, a pesar de ser bastante grande, resultaba acogedora y cercana. No estaba masificada y me pareció, en una primera impresión, que la selección de libros era bastante interesante. Aun así eché de menos algunas cosas como: más variedad de editoriales en el rincón de la LIJ; o un espacio dedicado a la literatura erótica; o algún libro de Palabras del Candil ;-)). Pero en general me llevé una buena sensación de mi primera visita.
Todo esto viene a cuento porque en mi paseo curioseando por la librería me topé con un libro estupendo: la Antología negra de Blaise Cendrars, traducida por Manuel Azaña (ahí es nada), edición a cargo de Jesús Cañete Ochoa, y publicada por Árdora ediciones.
De Blaise Cendrars hace años que tengo en casa como oro en paño un libro titulado Cuentos negros para niños blancos, ilustrado por Arcadio Lobato y publicado por Espasa Calpe en su colección Austral Juvenil (que dirigía Felicidad Orquín). Un libro estupendo y una de las primeras colecciones de cuentos africanos para niños, entre cuyos textos encontramos, por ejemplo, una variante estupenda del cuento del "Medio pollito" (al final de esta entrada os dejo un audio con una versión muy personal de este cuento".
La vida de Blaise Cendrars es una novela de acción: aventuras, viajes insólitos, participación en la Gran Guerra, pérdida de un brazo, poesía, novelas, vanguardias... Pero hoy quiero resaltar aquí su papel fundamental como difusor de la tradición oral africana.
Si bien es verdad que durante el siglo XIX se iban publicando colecciones de cuentos africanos, estas eran vistas como curiosidades antropológicas o textos sin valor literario. Sin embargo, a principios del siglo XX, igual que sucedió con artistas como Picasso que hallaron en la pintura y escultura africanas una inspiración y un referente imprescindibles para su propia búsqueda (y por este motivo fueron revalorizadas y reconocidas), Blaise Cendrars se empeñó en mostrar la belleza literaria que también estaba en los textos de la tradición oral africana, de ahí la importancia de su Antología negra, publicada en 1921, que tuvo una estupenda acogida por parte de los lectores.
Fue Blaise Cendrars quien abrió esta puerta a los cuentos de tradición oral africanos, quien se empeñó en su conocimiento y difusión, quien mostró la belleza y riqueza de sus historias y formas.
Obviamente hoy en día hay muchas y muy buenas colecciones de cuentos de muchas de las culturas que habitan el continente africano, pero esta primera colección tiene un algo de fundacional, de punto de partida, de hallazgo, que hace que me resulte especial.
Además la edición es estupenda, incluye la conferencia de Blaise Cendrars "Sobre la literatura de los negros", un completo estudio crítico de Jesús Cañete, Bibliografía y un par de notas a la edición (de la editorial a la presente edición y del propio autor en su primera edición).
Una lectura en la que ya me hallo enredado. Imprescindible si te gustan los cuentos de tradición oral.
Saludos
PD. Os dejo aquí un audio con una versión personal de la variante africana del "Medio pollito", he omitido al león (que quedaba sin su par en el texto escrito) y he tratado de dar una estructura reiterativa a todos los elementos (aunque es difícil por los distintos intereses del palo, el gato, el elefante...). Espero que os guste.
martes, 16 de octubre de 2012
ALFabeto
La pasada semana estuve en La ballena de cuentos, librería especializada en LIJ que tenemos en Guadalajara, todo un lujo. Allí estaba también el amigo Manuel, de Légolas CE, buscando entre novedades y anaqueles libros y cuentos para llevarse.
Os podéis imaginar que pasamos un buen rato intercambiando opiniones sobre títulos y editoriales, y charlando sobre autores e ilustradores. Fue Manuel quien me animó a ver este libro que, finalmente compré y hoy os reseño.
Se trata de ALFabeto, de Puño, publicado por Kalandraka. Es un álbum ilustrado muy interesante, una abecedario peculiar, pues en cada lámina podéis encontrar la letra correspondiente del alfabeto (en castellano) y además las ilustraciones están llenas de sugerencias e historias alrededor del abeto protagonista. Muchas evidentes, otras muchas se pueden desarrollar a partir de las ilustraciones, y algunas (guiños y referencias) están al final desveladas por el mismo autor.
Me ha gustado mucho la presentación del libro. Y me han interesado mucho las ilustraciones de Puño, la estética, la disposición de los elementos y la riqueza de cada lámina (que acaba siendo, en verdad, una historia nueva). Me ha gustado e interesado también su cercanía con el cómic: el género omnívoro del álbum se nutre de todos los demás géneros, entre ellos el cómic, como bien puede verse en este estupendo libro.
La verdad es que hacía tiempo que no veía libros de Puño, y me alegra mucho que Manuel me animara a echar un vistazo al ALFabeto porque, de alguna manera, ha sido un reencuentro. Y menudo reencuentro.
El libro os asegura un rato bien entretenido. Para chavales desde bien pequeños hasta bien mayores. Totalmente recomendable.
Saludos
Os podéis imaginar que pasamos un buen rato intercambiando opiniones sobre títulos y editoriales, y charlando sobre autores e ilustradores. Fue Manuel quien me animó a ver este libro que, finalmente compré y hoy os reseño.
Se trata de ALFabeto, de Puño, publicado por Kalandraka. Es un álbum ilustrado muy interesante, una abecedario peculiar, pues en cada lámina podéis encontrar la letra correspondiente del alfabeto (en castellano) y además las ilustraciones están llenas de sugerencias e historias alrededor del abeto protagonista. Muchas evidentes, otras muchas se pueden desarrollar a partir de las ilustraciones, y algunas (guiños y referencias) están al final desveladas por el mismo autor.
Me ha gustado mucho la presentación del libro. Y me han interesado mucho las ilustraciones de Puño, la estética, la disposición de los elementos y la riqueza de cada lámina (que acaba siendo, en verdad, una historia nueva). Me ha gustado e interesado también su cercanía con el cómic: el género omnívoro del álbum se nutre de todos los demás géneros, entre ellos el cómic, como bien puede verse en este estupendo libro.
La verdad es que hacía tiempo que no veía libros de Puño, y me alegra mucho que Manuel me animara a echar un vistazo al ALFabeto porque, de alguna manera, ha sido un reencuentro. Y menudo reencuentro.
El libro os asegura un rato bien entretenido. Para chavales desde bien pequeños hasta bien mayores. Totalmente recomendable.
Saludos
lunes, 15 de octubre de 2012
Hoy en la SER
Hoy es lunes y, por lo tanto, toca ir a la SER con Juan y Dani. En esta ocasión hablaremos de esta noticia que se publicó ayer en El País: "Guadalajara, la biblioteca que resiste" y que ha generado un interesante debate en mi muro de féisbuc. Por supuesto también tendremos tiempo para recomendar un par de libros y contar la pertinente fábula de Esopo.
Estos son los libros elegidos para recomendar hoy:
Por un lado tenemos Papel Carbón, el libro de cuentos primeros de Fernando Iwasaki publicado en Páginas de espuma, un libro del que os he hablado recientemente y con más detalle aquí. Aun así os repito que tiene algunos cuentos maravillosos (como "A Troya, Helena", que me dejó noqueado).
Y por otro lado un álbum maravilloso, se trata de Bombástica Naturalis, de Iban Barrenetxea, publicado por A buen paso. Un libro que me dejó fascinado desde la primera página y que, con cada lectura y relectura, suma. Una joyita imprescindible para tu colección de libros fantásticos. Hablé de él con mucho más detalle en esta entrada hace unos meses: merece la pena que la leas y que te acerques al libro.
Por último conté la fábula de "El cabrero y las cabras montesas", de Esopo.
Aquí tienes el audio de mi participación en el programa.
Feliz semana llena de lecturas.
Saludos
Estos son los libros elegidos para recomendar hoy:
Por un lado tenemos Papel Carbón, el libro de cuentos primeros de Fernando Iwasaki publicado en Páginas de espuma, un libro del que os he hablado recientemente y con más detalle aquí. Aun así os repito que tiene algunos cuentos maravillosos (como "A Troya, Helena", que me dejó noqueado).
Y por otro lado un álbum maravilloso, se trata de Bombástica Naturalis, de Iban Barrenetxea, publicado por A buen paso. Un libro que me dejó fascinado desde la primera página y que, con cada lectura y relectura, suma. Una joyita imprescindible para tu colección de libros fantásticos. Hablé de él con mucho más detalle en esta entrada hace unos meses: merece la pena que la leas y que te acerques al libro.
Por último conté la fábula de "El cabrero y las cabras montesas", de Esopo.
Aquí tienes el audio de mi participación en el programa.
Saludos
sábado, 13 de octubre de 2012
Juan, Miguel y sus cortos
Desde hace tiempo mis hijos están muy interesados en la técnica audiovisual de StopMotion, de hecho hace dos años Juan y Tash hicieron este pequeño corto como regalo de cumpleaños para Miguel, ¡menuda sorpresa!
Desde entonces no han dejado de probar, jugar y aprender, pero no ha sido hasta este verano (en el que Juan, tras dos años ahorrando, pudo comprarse su propio ordenador) que han podido dedicar algo más de tiempo a esta cuestión.
Hoy han colgado en su blog una primera tanda de cuatro pequeños cortos de los hechos en los últimos meses. Aquí os dejo este que me gusta mucho.
Como os podéis imaginar, se me cae la baba...
Saludos
Desde entonces no han dejado de probar, jugar y aprender, pero no ha sido hasta este verano (en el que Juan, tras dos años ahorrando, pudo comprarse su propio ordenador) que han podido dedicar algo más de tiempo a esta cuestión.
Hoy han colgado en su blog una primera tanda de cuatro pequeños cortos de los hechos en los últimos meses. Aquí os dejo este que me gusta mucho.
Saludos
viernes, 12 de octubre de 2012
Papel carbón
Acabo de terminar de leer Papel carbón, un libro de cuentos de Fernando Iwasaki publicado en Páginas de Espuma. Compré el libro en el pasado Maratón de los Cuentos de Guadalajara y lo he tenido en mi mesilla todo este tiempo para que, esas noches en las que no tenía novelota o mucho tiempo para leer, desgranaba un cuento. Y hoy se me acabó.
El libro es una recuperación de cuentos escritos entre 1983 y 1993 por Iwasaki, tecleados a máquina (con copia en papel carbón, de ahí el título).
Por ser una colección de cuentos de una época tan larga se acentúa una cualidad de los libros recopilatorios de cuentos: los estilos y temas son variados. Además sucede que al ser cuentos primerizos tienen un sabor más intenso. Hay gente que disfruta con el café aguado, otros prefieren el café fuerte, y los hay quienes se quedan con un café en su punto, bien tirado, con su crema, y a la temperatura apropiada. Estos cuentos son tazas de buen café: algunos cuentos son algo más cargados, con sabor más fuerte y aroma cerrado, pero muchos de ellos, la gran mayoría, te permiten saborear una estupenda taza de café. Y ninguno me ha parecido aguado.
Estos cuentos primeros de Iwasaki nos anticipan y muestran al gran escritor que ya es. Algunos son algo angulosos y muestran la búsqueda del estilo depurado que este autor ha ido ganando con los años, con los libros. He disfrutado con muchos de estos cuentos, muchos, y algunos de ellos, como "A Troya, Helena", me han emocionado como pocos lo han conseguido.
Un buen libro para saborear a tazas y para disfrutar entero. Una lectura estupenda.
Saludos
El libro es una recuperación de cuentos escritos entre 1983 y 1993 por Iwasaki, tecleados a máquina (con copia en papel carbón, de ahí el título).
Por ser una colección de cuentos de una época tan larga se acentúa una cualidad de los libros recopilatorios de cuentos: los estilos y temas son variados. Además sucede que al ser cuentos primerizos tienen un sabor más intenso. Hay gente que disfruta con el café aguado, otros prefieren el café fuerte, y los hay quienes se quedan con un café en su punto, bien tirado, con su crema, y a la temperatura apropiada. Estos cuentos son tazas de buen café: algunos cuentos son algo más cargados, con sabor más fuerte y aroma cerrado, pero muchos de ellos, la gran mayoría, te permiten saborear una estupenda taza de café. Y ninguno me ha parecido aguado.
Estos cuentos primeros de Iwasaki nos anticipan y muestran al gran escritor que ya es. Algunos son algo angulosos y muestran la búsqueda del estilo depurado que este autor ha ido ganando con los años, con los libros. He disfrutado con muchos de estos cuentos, muchos, y algunos de ellos, como "A Troya, Helena", me han emocionado como pocos lo han conseguido.
Un buen libro para saborear a tazas y para disfrutar entero. Una lectura estupenda.
Saludos
jueves, 11 de octubre de 2012
Marcel Gros
Hemos ido al teatro a ver el espectáculo La gran A... ventura, escrito e interpretado por Marcel Gros, un reconocido payaso catalán que lleva más de veinte años empeñado en hacernos reír. Cosa que, por cierto, consigue.
La verdad es que me interesan, obviamente por cuestiones profesionales, los espectáculos (de gran y mediano formato) en el que un único personaje llena toda la escena. Podéis leer la reseña que escribí hace no mucho aquí sobre La Odisea, de El Brujo, aunque hace años que trato de asistir a espectáculos de este formato: algunos los he ido reseñando (como por ejemplo esta breve nota sobre David Larible), y otros no (como aquel inolvidable espectáculo al que pude asistir en Madrid de Marcel Marceau).
Pero volvamos a Marcel Gros y su propuesta de hoy: un viaje que nos permite disfrutar de unos cuantos gags estupendos (fantástico el del faquir), divertidos (el del barrendero lo es, y muy fino, por cierto) y emocionantes (como la historia del primer payaso), paródicos (genial con el mimo y el Cirque du Soleil), etc.
La tramoya es algo ruidosa, con más elementos de los que usa, y con una estética que no me ha parecido especialmente atractiva. De cualquier manera saca buen rendimiento de los objetos que utiliza (Las telas, la letra A, los desatascadores...).
Marcel Gros hace un buen trabajo: el guión tiene guiños para todos los públicos y gustos, desde humoradas más bastas a puntadas de hilo fino bien traídas al contexto del espectáculo y al momento actual de crisis. Los gags incluyen elementos tradicionales del payaso y se nutren de otras artes escénicas: hay guiños paródicos de danza contemporánea, mimo, magia, títeres... y también hay incluso momento para la narración oral (cuando nos cuenta la historia del primer payaso).
Creo que el trabajo actoral es bueno. Además la entrega es completa y el desgaste notable, pero no deja de echar gasolina para que la intensidad del espectáculo no decaiga. Marcel Gros tiene muchas tablas y se mueve perfectamente en escena, incluso cuando tiene que reordenar la tramoya lo hace de manera que no resulta ruidoso en el contexto del espectáculo.
Me ha encantado también que al terminar se fuera a la puerta del teatro para saludar al público. Cercanía y agradecimiento para con el público que es, no lo olvidemos, el verdadero protagonista del espectáculo.
Un verdadero placer haber disfrutado hoy de Marcel Gros en el Teatro Buero Vallejo de Guadalajara.
Saludos
PD: Unos cuantos vídeos de Marcel Gros. Y su web.
La verdad es que me interesan, obviamente por cuestiones profesionales, los espectáculos (de gran y mediano formato) en el que un único personaje llena toda la escena. Podéis leer la reseña que escribí hace no mucho aquí sobre La Odisea, de El Brujo, aunque hace años que trato de asistir a espectáculos de este formato: algunos los he ido reseñando (como por ejemplo esta breve nota sobre David Larible), y otros no (como aquel inolvidable espectáculo al que pude asistir en Madrid de Marcel Marceau).
Pero volvamos a Marcel Gros y su propuesta de hoy: un viaje que nos permite disfrutar de unos cuantos gags estupendos (fantástico el del faquir), divertidos (el del barrendero lo es, y muy fino, por cierto) y emocionantes (como la historia del primer payaso), paródicos (genial con el mimo y el Cirque du Soleil), etc.
La tramoya es algo ruidosa, con más elementos de los que usa, y con una estética que no me ha parecido especialmente atractiva. De cualquier manera saca buen rendimiento de los objetos que utiliza (Las telas, la letra A, los desatascadores...).
Marcel Gros hace un buen trabajo: el guión tiene guiños para todos los públicos y gustos, desde humoradas más bastas a puntadas de hilo fino bien traídas al contexto del espectáculo y al momento actual de crisis. Los gags incluyen elementos tradicionales del payaso y se nutren de otras artes escénicas: hay guiños paródicos de danza contemporánea, mimo, magia, títeres... y también hay incluso momento para la narración oral (cuando nos cuenta la historia del primer payaso).
Creo que el trabajo actoral es bueno. Además la entrega es completa y el desgaste notable, pero no deja de echar gasolina para que la intensidad del espectáculo no decaiga. Marcel Gros tiene muchas tablas y se mueve perfectamente en escena, incluso cuando tiene que reordenar la tramoya lo hace de manera que no resulta ruidoso en el contexto del espectáculo.
Me ha encantado también que al terminar se fuera a la puerta del teatro para saludar al público. Cercanía y agradecimiento para con el público que es, no lo olvidemos, el verdadero protagonista del espectáculo.
Un verdadero placer haber disfrutado hoy de Marcel Gros en el Teatro Buero Vallejo de Guadalajara.
Saludos
PD: Unos cuantos vídeos de Marcel Gros. Y su web.
miércoles, 10 de octubre de 2012
Próximos cursos de formación
Después de pensarlo varias semanas he aceptado la oferta que mi amigo Alfredo me hizo para impartir cursos en su academia. Serán dos cursos intensivos, de veinte horas, a realizar cada uno en un final de semana. Si la demanda superara las 15 plazas podría volver a realizar cada uno de ellos. Tenéis toda la información aquí:
Si estás interesado en alguno de ellos no dudes en contactar conmigo.
Saludos
- Información general sobre los cursos
- Información sobre el curso de Animación a la Lectura (objetivos, contenidos, costes, fechas...)
- Información sobre el curso de Narración Oral (objetivos, contenidos, costes, fechas...)
Foto de Paula Martins. Curso de Animación a la Lectura impartido en Beja, Portugal, sept10 |
Saludos
martes, 9 de octubre de 2012
El abanico de seda
Hace unas semanas que leí este libro (y recomendé en la SER) y hasta hoy no he tenido tiempo para escribir sobre él con algo de calma. Vamos con ello. Acabo de terminar de leer El abanico de seda, un libro escrito por Lisa See, traducido por Gemma Rovira Ortega y publicado por Salamandra. El libro me lo recomendó Vera.
El libro es una suerte de diario, o más bien, la revisión de la propia vida que la protagonista escribe en sus últimos años. A lo largo de sus páginas Lirio Blanco nos va desgranando sus días, llevándonos de la mano a la China del S. XIX, una sociedad compleja con unas costumbres y modos de vida muy estructurados, férreos en ocasiones. La protagonista nos habla sobre todo de su relación con Flor de Nieve, su laotong, una suerte de amiga íntima desde la infancia. El devenir de sus días (de la protagonista y de Flor de Nieve) es el eje central de la novela y, según avanzan las páginas, se va convirtiendo en una historia cada vez más emocionante, compleja, intensa, que además, en sus últimos capítulos, da un giro inesperado y explica el (verdadero) sentido del libro que Lirio Blanco está escribiendo.
El paseo en el tiempo es deslumbrante: las costumbres de la China del XIX, y especialmente el modo de vida de las mujeres (con su escritura propia, el nu shu), está contado de manera que, nada más abrir el libro nos transporta a ese momento y ese lugar. Con toda la belleza y la crudeza. En este sentido, la parte dedicada al vendado de los pies es increíble.
El libro me ha gustado mucho, he disfrutado a lo largo de toda su lectura y aunque venía sospechando que algo no funcionaba bien el giro de las últimas páginas (tras la muerte de Flor de Nieve) me pilló de sorpresa. Fue muy emocionante. Emocionante porque la narradora es capaz de llevarnos en todo momento por su vereda sin impedirnos ver a nuestro alrededor señales que muestran otros caminos, y nosotros, como lectores, no dejamos de reafirmarnos en la senda propuesta.
Además en este libro aparecen en muchas ocasiones referencias a los cuentos contados, aquí os dejo algunas:
"Comían, reían y recitaban cuentos de nu shu, como "El cuento de Sangu", que narra las peripecias de la hija de un hombre rico que permanece junto a su pobre esposo, soportando innumerables penurias, hasta que ambos son recompensados por su fidelidad convirtiéndose en mandarines; o "La carpa encantanda", en la que un pez se transforma en una hermosa doncella que se enamora de un funcionario de alto rango, pero acaba recuperando su forma original."(p. 52)
[Este párrafo es algo más largo pero merece la pena pues nos muestra cómo eran contados-cantados algunos cuentos de manera coral. Una absoluta delicia (aunque el cuento es brutal). También es muy revelador el párrafo final: del valor de los cuentos para entretener y enseñar.]
"Su cuento preferido era "La historia de la mujer que tenía tres hermanos". Las niñas no lo sabían entero y pidieron a mi madre que dirigiera las preguntas y respuestas, aunque ella había memorizado casi todo el texto. En cambio, suplicaron a mi tía que las guiara a lo largo del relato. Luna Hermosa y yo nos unimos a sus ruegos, porque el cuento -fascinante y verídico, trágico y cómico al mismo tiempo- era una buena manera de practicar los cantos relacionados con nuestra escritura secreta. (...)
-Érase una vez una mujer que tenía tres hermanos -comenzó mi tía-. Todos tenían esposa, pero ella no estaba casada. Pese a que era virtuosa y trabajadora, sus hermanos no querían ofrecer una dote. ¡Qué desgraciada se sentía! ¿Qué podía hacer?
Mi madre contestó:
-Está tan triste que sale al jardín y se ahorca en un árbol.
Luna Hermosa, mis dos hermanas, las hermanas de juramento y yo entonamos a coro:
-El hermano mayor recorre el jardín y finge no verla. El hermano mediano recorre el jardín y finge no ver que su hermana está muerta. El hermano pequeño la ve, rompe a llorar y se lleva el cadáver a casa.
Desde el otro lado de la habitación mi madre levantó la cabeza y me sorprendió observándola. Encontes sonrió, satisfecha quizá de que no me hubiera dejado ninguna palabra.
Mi tía continuó con la historia:
-Érase una vez una mujer que tenía tres hermanos. Cuando murió, nadie quiso ocuparse de su cadáver. Pese a que había sido virtuosa y trabajadora, sus hermanos no cuidaron de ella. ¡Qué crueldad! ¿Qué ocurrirá?
-La desatienden cuando está muerta igual que cuando estaba viva, hasta que su cadáver empieza a oler mal -dijo mi madre.
Una vez más, las niñas recitamos las frases que sabíamos de memoria:
-El hermano mayor da un trozo de tela para tapar su cadáver. El hermano mediano da dos trozos de tela. El hermano pequeño la envuelve con toda la ropa que encuentra para que no pase frío en el más allá.
-Érase una vez una mujer que tenía tres hermanos -prosiguió mi tía-. Ya está vestida para el más allá pero sus hermanos no quieren gastar dinero en un ataúd. Ella era virtuosa y trabajadora, pero sus hermanos son tacaños. ¡Qué injusticia! ¿Encontrará algún día descanso la mujer?
-Sola, completamente sola -entonó mi madre-, errará convertida en fantasma. (...)
-El hermano mayor dice: No hace falta que la enterremos en un ataúd. Ya está bien como está. El hermano mediano dice: Podríamos enterrarla en esa caja vieja que hay en el cobertizo. El hermano menor dice: Este es todo el dinero que tengo. Con él compraré un ataúd.
Cuando nos acercamos al final el ritmo de la historia cambió. Mi tía cantó:
-Érase una vez una mujer que tenía tres hermanos. Esto es lo que han hecho, pero ¿qué será de la hermana ahora? El hermano mayor es malo; el hermano mediano, cruel; pero el amor podría prender en el hermano menor.
Las hermanas de juramento dejaron que Luna Hermosa y yo termináramos el cuento:
-El hermano mayor dice: Enterrémosla aquí, junto al camino de los carabaos. (Donde la pisotearían eternamente.) El hermano mediano dice: Enterrémosla bajo el puente. (Donde el agua se la llevaría.) El hermano menor, el único que tiene buen corazón, dice: La enterraremos detrás de la casa para que todos la recuerden. Al final la hermana, que había tenido una vida desgraciada, halló gran felicidad en el más allá.
Me encantaba esta historia. Era divertida recitarla con mi madre y las demás, pero después de la muerte de mi abuela y mi hermana entendía mejor los mensajes que encerraba. El relato me enseñaba que una muchacha -o una mujer- podía tener un valor diferente para cada persona. También ofrecía instrucciones prácticas sobre cómo atender a los difuntos. (...)" (pp. 52-54)
[En esta ocasión una única narradora cuenta un cuento:]
"Una tarde, mientras yo bordaba el cinturón con que me ceñiría el traje de boda, la señora Wang vino a distraernos con "La historia de la esposa Wang" (...) Cuando la señora Wang vio que todas estábamos esperando, removió el trasero sobre el taburete para ponerse cómoda y empezó su relato. (...) En los últimos años la señora Wang había engordado mucho, y por eso tanto sus relatos como sus movimientos eran más lentos. (...)
Pensé que la señora Wang había contado esa historia para hablarme de mi futuro." (pp. 127-28)
[Cuentos para ahuyentar el miedo:]
"Pese a lo cansados que estábamos, teníamos tanto miedo que no podíamos dormir; ni siquiera nos atrevíamos a cerrar los ojos. Y teníamos hambre y sed. En el pequeño corro alrededor de la hoguera, las mujeres aliviaron nuestros temores cantando una historia." (p. 238)
[De las enseñanzas de los cuentos:]
"Lo que sucedió me recordaba a la fábula que mi tía solía cantar acerca de la muchacha que tenía tres hermanos. Ahora comprendo que nos enseñaban esas canciones y esos cuentos no sólo para que aprendiéramos cómo debíamos comportarnos, sino también porque íbamos a vivir versiones parecidas de esas historias una y otra vez a lo largo de la vida." (p.296)
En suma, una lectura muy entretenida. Un libro estupendo que os recomiendo.
Saludos
El libro es una suerte de diario, o más bien, la revisión de la propia vida que la protagonista escribe en sus últimos años. A lo largo de sus páginas Lirio Blanco nos va desgranando sus días, llevándonos de la mano a la China del S. XIX, una sociedad compleja con unas costumbres y modos de vida muy estructurados, férreos en ocasiones. La protagonista nos habla sobre todo de su relación con Flor de Nieve, su laotong, una suerte de amiga íntima desde la infancia. El devenir de sus días (de la protagonista y de Flor de Nieve) es el eje central de la novela y, según avanzan las páginas, se va convirtiendo en una historia cada vez más emocionante, compleja, intensa, que además, en sus últimos capítulos, da un giro inesperado y explica el (verdadero) sentido del libro que Lirio Blanco está escribiendo.
El paseo en el tiempo es deslumbrante: las costumbres de la China del XIX, y especialmente el modo de vida de las mujeres (con su escritura propia, el nu shu), está contado de manera que, nada más abrir el libro nos transporta a ese momento y ese lugar. Con toda la belleza y la crudeza. En este sentido, la parte dedicada al vendado de los pies es increíble.
El libro me ha gustado mucho, he disfrutado a lo largo de toda su lectura y aunque venía sospechando que algo no funcionaba bien el giro de las últimas páginas (tras la muerte de Flor de Nieve) me pilló de sorpresa. Fue muy emocionante. Emocionante porque la narradora es capaz de llevarnos en todo momento por su vereda sin impedirnos ver a nuestro alrededor señales que muestran otros caminos, y nosotros, como lectores, no dejamos de reafirmarnos en la senda propuesta.
Además en este libro aparecen en muchas ocasiones referencias a los cuentos contados, aquí os dejo algunas:
"Comían, reían y recitaban cuentos de nu shu, como "El cuento de Sangu", que narra las peripecias de la hija de un hombre rico que permanece junto a su pobre esposo, soportando innumerables penurias, hasta que ambos son recompensados por su fidelidad convirtiéndose en mandarines; o "La carpa encantanda", en la que un pez se transforma en una hermosa doncella que se enamora de un funcionario de alto rango, pero acaba recuperando su forma original."(p. 52)
[Este párrafo es algo más largo pero merece la pena pues nos muestra cómo eran contados-cantados algunos cuentos de manera coral. Una absoluta delicia (aunque el cuento es brutal). También es muy revelador el párrafo final: del valor de los cuentos para entretener y enseñar.]
"Su cuento preferido era "La historia de la mujer que tenía tres hermanos". Las niñas no lo sabían entero y pidieron a mi madre que dirigiera las preguntas y respuestas, aunque ella había memorizado casi todo el texto. En cambio, suplicaron a mi tía que las guiara a lo largo del relato. Luna Hermosa y yo nos unimos a sus ruegos, porque el cuento -fascinante y verídico, trágico y cómico al mismo tiempo- era una buena manera de practicar los cantos relacionados con nuestra escritura secreta. (...)
-Érase una vez una mujer que tenía tres hermanos -comenzó mi tía-. Todos tenían esposa, pero ella no estaba casada. Pese a que era virtuosa y trabajadora, sus hermanos no querían ofrecer una dote. ¡Qué desgraciada se sentía! ¿Qué podía hacer?
Mi madre contestó:
-Está tan triste que sale al jardín y se ahorca en un árbol.
Luna Hermosa, mis dos hermanas, las hermanas de juramento y yo entonamos a coro:
-El hermano mayor recorre el jardín y finge no verla. El hermano mediano recorre el jardín y finge no ver que su hermana está muerta. El hermano pequeño la ve, rompe a llorar y se lleva el cadáver a casa.
Desde el otro lado de la habitación mi madre levantó la cabeza y me sorprendió observándola. Encontes sonrió, satisfecha quizá de que no me hubiera dejado ninguna palabra.
Mi tía continuó con la historia:
-Érase una vez una mujer que tenía tres hermanos. Cuando murió, nadie quiso ocuparse de su cadáver. Pese a que había sido virtuosa y trabajadora, sus hermanos no cuidaron de ella. ¡Qué crueldad! ¿Qué ocurrirá?
-La desatienden cuando está muerta igual que cuando estaba viva, hasta que su cadáver empieza a oler mal -dijo mi madre.
Una vez más, las niñas recitamos las frases que sabíamos de memoria:
-El hermano mayor da un trozo de tela para tapar su cadáver. El hermano mediano da dos trozos de tela. El hermano pequeño la envuelve con toda la ropa que encuentra para que no pase frío en el más allá.
-Érase una vez una mujer que tenía tres hermanos -prosiguió mi tía-. Ya está vestida para el más allá pero sus hermanos no quieren gastar dinero en un ataúd. Ella era virtuosa y trabajadora, pero sus hermanos son tacaños. ¡Qué injusticia! ¿Encontrará algún día descanso la mujer?
-Sola, completamente sola -entonó mi madre-, errará convertida en fantasma. (...)
-El hermano mayor dice: No hace falta que la enterremos en un ataúd. Ya está bien como está. El hermano mediano dice: Podríamos enterrarla en esa caja vieja que hay en el cobertizo. El hermano menor dice: Este es todo el dinero que tengo. Con él compraré un ataúd.
Cuando nos acercamos al final el ritmo de la historia cambió. Mi tía cantó:
-Érase una vez una mujer que tenía tres hermanos. Esto es lo que han hecho, pero ¿qué será de la hermana ahora? El hermano mayor es malo; el hermano mediano, cruel; pero el amor podría prender en el hermano menor.
Las hermanas de juramento dejaron que Luna Hermosa y yo termináramos el cuento:
-El hermano mayor dice: Enterrémosla aquí, junto al camino de los carabaos. (Donde la pisotearían eternamente.) El hermano mediano dice: Enterrémosla bajo el puente. (Donde el agua se la llevaría.) El hermano menor, el único que tiene buen corazón, dice: La enterraremos detrás de la casa para que todos la recuerden. Al final la hermana, que había tenido una vida desgraciada, halló gran felicidad en el más allá.
Me encantaba esta historia. Era divertida recitarla con mi madre y las demás, pero después de la muerte de mi abuela y mi hermana entendía mejor los mensajes que encerraba. El relato me enseñaba que una muchacha -o una mujer- podía tener un valor diferente para cada persona. También ofrecía instrucciones prácticas sobre cómo atender a los difuntos. (...)" (pp. 52-54)
[En esta ocasión una única narradora cuenta un cuento:]
"Una tarde, mientras yo bordaba el cinturón con que me ceñiría el traje de boda, la señora Wang vino a distraernos con "La historia de la esposa Wang" (...) Cuando la señora Wang vio que todas estábamos esperando, removió el trasero sobre el taburete para ponerse cómoda y empezó su relato. (...) En los últimos años la señora Wang había engordado mucho, y por eso tanto sus relatos como sus movimientos eran más lentos. (...)
Pensé que la señora Wang había contado esa historia para hablarme de mi futuro." (pp. 127-28)
[Cuentos para ahuyentar el miedo:]
"Pese a lo cansados que estábamos, teníamos tanto miedo que no podíamos dormir; ni siquiera nos atrevíamos a cerrar los ojos. Y teníamos hambre y sed. En el pequeño corro alrededor de la hoguera, las mujeres aliviaron nuestros temores cantando una historia." (p. 238)
[De las enseñanzas de los cuentos:]
"Lo que sucedió me recordaba a la fábula que mi tía solía cantar acerca de la muchacha que tenía tres hermanos. Ahora comprendo que nos enseñaban esas canciones y esos cuentos no sólo para que aprendiéramos cómo debíamos comportarnos, sino también porque íbamos a vivir versiones parecidas de esas historias una y otra vez a lo largo de la vida." (p.296)
En suma, una lectura muy entretenida. Un libro estupendo que os recomiendo.
Saludos
lunes, 8 de octubre de 2012
Hoy en la SER
Es lunes y toca ir a la SER. Hoy había muchos temas de los que hablar y por eso casi no hemos tenido tiempo para las recomendaciones de libros, casi. El grueso de la intervención se la llevó charlar sobre la concentración del pasado viernes en las puertas del Teatro Moderno, Blanca Calvo tuvo la gentileza de intervenir telefónicamente para comentarlo con nosotros. Solo por eso ya merece la pena que escuchéis el audio de hoy ;-))
Después hablé de dos libros, muy brevemente.
El primero es un álbum titulado La vaca Condesa, escrito por Juan A. Belmontes e ilustrado por Evelyn Daviddi y publicado por OQO. Una historia con una estructura interna que nos recuerda a los cuentos tradicionales y que se resuelve de manera que todo ajusta.
Traje también otro libro fantástico de Sergio Tofano, más conocido como Sto, titulado Sin pies ni cabeza, publicado por Siruela. Un libro de cuentos alegres, divertidos, muy entretenidos y con un punto surrealista genial. Una lectura maravillosa, inteligente y sorprendente. Ideal para todos los públicos, para leer solo o acompañado. Una lectura gozosa. Feliz.
Para terminar, la fábula de Esopo. Hoy tocó El águila, el grajo y el pastor. Una delicia.
Feliz semana llena de cuentos y buenas lecturas.
Saludos
Después hablé de dos libros, muy brevemente.
El primero es un álbum titulado La vaca Condesa, escrito por Juan A. Belmontes e ilustrado por Evelyn Daviddi y publicado por OQO. Una historia con una estructura interna que nos recuerda a los cuentos tradicionales y que se resuelve de manera que todo ajusta.
Traje también otro libro fantástico de Sergio Tofano, más conocido como Sto, titulado Sin pies ni cabeza, publicado por Siruela. Un libro de cuentos alegres, divertidos, muy entretenidos y con un punto surrealista genial. Una lectura maravillosa, inteligente y sorprendente. Ideal para todos los públicos, para leer solo o acompañado. Una lectura gozosa. Feliz.
Para terminar, la fábula de Esopo. Hoy tocó El águila, el grajo y el pastor. Una delicia.
Saludos
sábado, 6 de octubre de 2012
600 socios
Ayer estuvimos haciendo cola en la puerta del Teatro Moderno, ese teatro vinculado al nacimiento del Ateneo en el último tercio del siglo XIX por iniciativa popular. Un teatro que nace desde el pueblo y que el pueblo quiere recuperar. Y digo que quiere recuperar porque los gestores de lo público, los administradores de lo de todos, los políticos de Castilla La Mancha, han cerrado el teatro como paso previo para su privatización. Un escalón más en su empeño de desmontaje y venta del Estado de Bienestar, y con él, desmontaje y venta de sueños, logros y anhelos que, en muchos casos, han sido muy costosos de conseguir.
Obviamente, para lograr la sumisión y resignación de las gentes, es fundamental desarmar un Sistema Educativo Público de calidad y acabar con todo lo que pueda suponer Cultura no oficial: al Estado que nuestros políticos actuales sueñan le interesa carne de fábrica y no mentes críticas.
La cultura es la alegría de las gentes, pero también es una invitación a la reflexión: un empeño por entender lo que somos, recordar lo que fuimos y soñar lo que podríamos ser.
Pero volvamos a las puertas del Teatro Moderno, vean esta crónica de Óscar Cuevas para Canal19:
Sería un modo fantástico de que el Teatro volviera al pueblo, a las gentes de Guadalajara, a la ciudadanía. Y así mantener vivo un espacio para la cultura, la reflexión, el entretenimiento... en suma, para el crecimiento de las personas y los pueblos.
Estad pendientes para cuando nos inviten a asociarnos en el blog de la plataforma. [Yo también lo difundiré en este blog y por todos los medios a mi alcance].
No hará falta llegar a los 600 socios, con 596 más será suficiente. Porque en esta casa mía vivimos dos adultos y dos niños. Y los cuatro seremos socios.
Saludos
Obviamente, para lograr la sumisión y resignación de las gentes, es fundamental desarmar un Sistema Educativo Público de calidad y acabar con todo lo que pueda suponer Cultura no oficial: al Estado que nuestros políticos actuales sueñan le interesa carne de fábrica y no mentes críticas.
La cultura es la alegría de las gentes, pero también es una invitación a la reflexión: un empeño por entender lo que somos, recordar lo que fuimos y soñar lo que podríamos ser.
Pero volvamos a las puertas del Teatro Moderno, vean esta crónica de Óscar Cuevas para Canal19:
Quizás no fuéramos miles de personas, pero desde luego éramos muchos, muchos. Y de ámbitos e ideologías muy diversas. Y familias, y jóvenes, y personas mayores... Por todo esto el éxito de la convocatoria de ayer haciendo cola en la puerta del Teatro Moderno ("Que empiece ya que el público sí está") es un éxito del pueblo, de la gente. Una excelente noticia porque no nos resignamos.
Y hay más. Una excelente noticia porque ayer se habló de una vía alternativa para recuperar el Teatro Moderno: si se consigue que la recién nacida "Asociación de Amigos del Moderno" llegue a los 600 socios se podrían cubrir los gastos del teatro y se podría optar a su gestión. 600 socios como 600 pequeños grandes mecenas.Sería un modo fantástico de que el Teatro volviera al pueblo, a las gentes de Guadalajara, a la ciudadanía. Y así mantener vivo un espacio para la cultura, la reflexión, el entretenimiento... en suma, para el crecimiento de las personas y los pueblos.
Estad pendientes para cuando nos inviten a asociarnos en el blog de la plataforma. [Yo también lo difundiré en este blog y por todos los medios a mi alcance].
No hará falta llegar a los 600 socios, con 596 más será suficiente. Porque en esta casa mía vivimos dos adultos y dos niños. Y los cuatro seremos socios.
Saludos
viernes, 5 de octubre de 2012
Cuentos en familia
La pasada semana estuve contando en la Biblioteca Gloria Fuertes de Fuenlabrada, allí pude conocer en persona a Carlos Lapeña Morón, admirado poeta, con quien compartí agradable conversación y cervecica post cuentum. Tuve también la fortuna de que me regalara un ejemplar de su libro Cuentos en familia, que he leído esta mañana y cuya breve reseña es la que sigue.
Acabo de terminar de leer Cuentos en familia, de Carlos Lapeña Morón, con ilustraciones de David Pintor, y publicado por Anaya en su colección El Duende Verde. Este libro fue merecedor del segundo premio en el XXIV Concurso de narrativa infantil Villa D'Ibi.
El libro tiene una estructura muy sencilla y eficaz: un edificio habitado por seis familias nos cuenta una aventura de cada una de ellas. Cada aventurita es un pequeño cuento.
El libro es agradable de leer, ligero, y sus historias de la vida cotidiana resultarán muy cercanas, muy familiares, a los pequeños lectores y, dadlo por seguro, a los padres de los pequeños lectores. Como sucede con todo libro de cuentos, la versatilidad del género permite tocar temas diversos: un poquito de suspense, algo de intriga, mucho de vida cotidiana y de humor...
Creo que la que más me ha gustado ha sido la historia del 2ºB, titulada "Un regalo para los dos", bien encajada y resuelta. Y también he disfrutado mucho con "Natalia Miralcielo", la niña del 3ºB, sobre todo por cuestiones formales que no voy a desvelar ;-))
En suma, un librito alegre, ligero, ideal para leer en familia, como su propio título indica.
Saludos
miércoles, 3 de octubre de 2012
Maratón de imágenes
Me he topado en la red con las fotografías que los amigos de la Asociación Fotográfica de Guadalajara hacen durante el Maratón de los Cuentos. He pasado un rato bien entretenido disfrutando y recordando buenos momentos y cuentos. Y claro, también me he encontrado por ahí contando. Os dejo alguna foto que me ha gustado especialmente.
Todas las fotografías las podéis ver aquí. Tenéis para entreteneros un buen rato.
Aquí está la serie de siete fotografías (deslumbrante) de mi cuento contado en el Panteón de la Condesa de la Vega del Pozo dentro de "la ruta del misterio". Los fotógrafos son Paul Rojas Roche, Juan Carlos Aragonés y Míriam Martínez Salaices.
También os dejo esta otra foto de cuando conté en los mínimos (qué bien lo pasé, caramba, hacía años que no podía ir a los mínimos).
En fin. Una vez más muchas gracias a la AFGu por su generosidad y a la gente del SLIJGu y la BPE de Guadalajara por organizar esta maravillosa fiesta.
Saludos
Todas las fotografías las podéis ver aquí. Tenéis para entreteneros un buen rato.
Aquí está la serie de siete fotografías (deslumbrante) de mi cuento contado en el Panteón de la Condesa de la Vega del Pozo dentro de "la ruta del misterio". Los fotógrafos son Paul Rojas Roche, Juan Carlos Aragonés y Míriam Martínez Salaices.
foto de Míriam Martínez Salaices |
También os dejo esta otra foto de cuando conté en los mínimos (qué bien lo pasé, caramba, hacía años que no podía ir a los mínimos).
Foto de Pedro San Andrés |
En fin. Una vez más muchas gracias a la AFGu por su generosidad y a la gente del SLIJGu y la BPE de Guadalajara por organizar esta maravillosa fiesta.
Saludos
lunes, 1 de octubre de 2012
Hoy en la SER
Hoy es lunes y, como en pasadas temporadas, comienzo mi colaboración semanal con la SER de Guadalajara. Juan Solo y Daniel Rodríguez son los estupendos profesionales (y amigos) que llevan las riendas del programa y quienes me invitan a colaborar con libros y cuentos.
Este año, además de los libros recomendados, voy a intentar contar todos los días un cuentito de Esopo.
Pero dejemos ya los preámbulos y vayamos al lío.
Para comenzar traigo hoy una novelita estupenda que la pasada semana me recomendó Vera (vía guasap... qué cosas) titulada El abanico de seda, de Lisa See, traducido por Gemma Rovira Ortega y publicado por Salamandra.
El libro nos cuenta la vida y tribulaciones de dos muchachas chinas de mediados del siglo XIX, dos laotong en una sociedad compleja, muy estructurada y de costumbres férreas, en la que parece que apenas hay espacios para vivir una amistad. Sin embargo Lirio Blanco y Flor de Nieve encuentran resquicios para compartir sueños y vida.
Me ha gustado esta novelita en la que, además de ubicarnos en la China del XIX (uno puede cerrar los ojos y sentir que está allí, en el cuarto de las mujeres) tiene una trama intensa y enganchosa, que además en las últimas páginas da un giro lleno de emoción.
Creo que más adelante os hablaré con más detalle de la novela: el nu shu, los lotos dorados, etc.
Un libro que es un verdadero placer, un viaje en el tiempo y una lectura que no podrás olvidar.
Traigo también a la emisora un álbum muy especial, se trata de El cazo de Lorenzo, de Isabelle Carrier, traducido por Élodiea Bourgeois y publicado por Editorial Juventud. Y digo que es muy especial porque tiene una clara intencionalidad: contarnos que hay niños y niñas que son diferentes; por lo tanto es un álbum fantástico para explicar la discapacidad a los más pequeños (extraordinarios la fuerza y el resultado de la simbología del cazo). Y aunque es un álbum con esta evidente intencionalidad didáctica (todos los cuentos llevan una carga didáctica en sus tripas más o menos disimulada) la historia está muy bien contada, fluye perfectamente y entretiene. Es verdad que se puede utilizar el cuento para hablar de las discapacidades. Pero también es verdad que, sencillamente, se puede disfrutar de la buena historia que nos cuenta. Un álbum estupendo. Un regalo.
En cuanto al cuentito de Esopo, si os parece bien, hoy os cuento la fábula de La comadreja médica y las gallinas.
Feliz semana de cuentos.
Saludos
Este año, además de los libros recomendados, voy a intentar contar todos los días un cuentito de Esopo.
Pero dejemos ya los preámbulos y vayamos al lío.
Para comenzar traigo hoy una novelita estupenda que la pasada semana me recomendó Vera (vía guasap... qué cosas) titulada El abanico de seda, de Lisa See, traducido por Gemma Rovira Ortega y publicado por Salamandra.
El libro nos cuenta la vida y tribulaciones de dos muchachas chinas de mediados del siglo XIX, dos laotong en una sociedad compleja, muy estructurada y de costumbres férreas, en la que parece que apenas hay espacios para vivir una amistad. Sin embargo Lirio Blanco y Flor de Nieve encuentran resquicios para compartir sueños y vida.
Me ha gustado esta novelita en la que, además de ubicarnos en la China del XIX (uno puede cerrar los ojos y sentir que está allí, en el cuarto de las mujeres) tiene una trama intensa y enganchosa, que además en las últimas páginas da un giro lleno de emoción.
Creo que más adelante os hablaré con más detalle de la novela: el nu shu, los lotos dorados, etc.
Un libro que es un verdadero placer, un viaje en el tiempo y una lectura que no podrás olvidar.
En cuanto al cuentito de Esopo, si os parece bien, hoy os cuento la fábula de La comadreja médica y las gallinas.
Feliz semana de cuentos.
Saludos
Suscribirse a:
Entradas (Atom)