martes, 29 de diciembre de 2009
Las 99 pulgas
Para nosotros (Félix, Pablo y yo mismo) este libro es especial porque pasamos casi dos años elaborándolo y, cuando por fin estuvo listo, anduvimos con él de editorial en editorial para oír siempre la misma respuesta: es un libro estupendo pero no cabe en nuestra línea editorial.
Harto de esperar pensé que tal vez no es que no hubiera una línea editorial para este libro, sino que no había una editorial en la que cupieran libros de narradores orales y libros en los que el cuento, ya fuera para adultos, jóvenes o niños, tuviera un lugar destacado. Así fue como nació la idea de Palabras del Candil y como, a partir de un sueño, nació este proyecto loco y maravilloso.
Por eso 99 pulgas es un libro muy especial, porque de alguna manera fue la semilla de la que brotó una editorial que, cuatro años después, tiene casi ya 30 títulos.
El libro sigue siendo uno de los más vendidos de la editorial y también uno de los más leídos (estamos a punto de agotar la segunda edición, ahí es nada). Ha tenido reseñas en blogs y revistas especializadas e incluso ha tenido su momento estelar en el Hoy por hoy, de la Cadena SER, con Javier Rioyo, todo un lujo.
En fin, que no se me ocurre mejor manera de empezar un proyecto que hacerlo de la mano de Félix y Pablo con esta colección de cuentos breves.
Si puedes no dejes de echarle un vistazo, seguro que encontrarás algún cuento que te interese.
Saludos
lunes, 28 de diciembre de 2009
Déjame entrar
Y con Déjame entrar he tenido suerte. Me enganchó desde el principio y lo he leído con mucho gusto. Además es un libro ideal para leer de noche y con frío (por lo de los vampiros, obviamente). Yo no soy aficionado a las lecturas de terror, pero es que esta novela me ha parecido mucho más que una novela de género, tiene más filos y puntas, más recorrido, más matices, y sobre todo una trama estupenda y un final que pide más.
Y por si fuera poco, también tengo una cita de cuento para la colección:
"[Oskar, el niño protagonista] miró a su madre. Ella estaba inclinada sobre la cama, con las manos sobre las rodillas. Los ojos observadores, preocupados.
-¿Quieres algo?
-No. Bueno, sí.
-¿Qué es?
-No, no era nada.
-Pero dilo.
-¿Me puedes... contar un cuento?
Un vislumbre de diferentes sentimientos cruzó el rostro de su madre: tristeza, alegría, inquietud, una sonrisa forzada, una arruga de preocupación. Todo en unos segundos. Luego dijo:
-Yo... no me sé ningún cuento. Pero... puedo leerte uno siquieres. Si tenemos algún libro...
Su mirada voló hacia la estantería que había al lado de la cabeza de Oskar.
-No, no hace falta.
-Pero si lo hago encantada.
-No. No quiero.
-¿Por qué no? Si acabas de decir...
-Sí, pero... no. No quiero.
-¿Te... canto algo?
-¡No!
Su madre se mordió los labios, ofendida. Después decidió no estarlo, puesto que Oskar estaba enfermo:
-Tal vez pueda inventarme algo si eso...
-No, está bien. Ahora quiero dormir." (p. 360)
En el contexto del libro es un momento muy interesante. El niño no sabe si ha sido contagiado y va a convertirse en vampiro y este es el último momento en el que intenta acercarse a su madre, refugiarse en ella. Y la puerta que da paso a ese refugio es el cuento.
Me recuerda a una frase que leí en un artículo de Manuel Vicent en El País (seguro que tengo la referencia por ahí, a ver si la encuentro) que decía más o menos así: "todos los juguetes de mi infancia se han roto menos los cuentos".
En los dos casos el cuento como un referente de la tierra de la infancia, de la patria del hombre. En fin, los cuentos, siempre los cuentos.
Saludos
jueves, 24 de diciembre de 2009
El lado oscuro del amor
miércoles, 23 de diciembre de 2009
Algunas citas de Lo es
Aquí os incluyo algunas citas de Lo es que me han gustado mucho.
"A veces me invitan a cócteles. Me lleva con ella y yo me siento confuso viendo el modo en que la gente está encima de trozos de pan duro y de galletas saladas, sin que nadie cante ni cuente un cuento como hacían en Límerick [el pueblo de su infancia], hasta que empiezan a mirar el reloj y dicen: "¿Tienes hambre? ¿Quieres que vayamos a comer algo?", y se van marchando, y a eso lo llaman una fiesta." (p. 286)
"Sus amigos hablaban del buen gusto, y se me echaban encima cuando yo les decía que el buen gusto es lo que surge cuando se muere la imaginación. El aire estaba cargado de buen gusto y yo sentía que me ahogaba." (p. 500)
"Después de llenar la tripa, todo es poesía." (p.502)
De alguna manera estos libros me han recordado mis veinte años, cuando devoré uno tras otro todos los libros que pude encontrar de Henry Miller. Creo que los de Frank McCourt son más limpios, más directos, con una descripción menos farragosa y con algo más de humor. En fin, esta noche comienzo con El profesor, también de este autor, ya os contaré.
Saludos
La Guía de Animación a la Lectura de Castilla La Mancha
Saludos
martes, 22 de diciembre de 2009
Los motivos de los cuentos folklóricos
Si no sabes quien es S. Thompson puedes echar un vistazo aquí, aunque si has trajinado alguna vez con libros que contienen recopilaciones de cuentos tradicionales habrás visto que muchos de ellos están catalogados según un número principiado por las siglas ATU. Estas siglas provienen de Aarne-Thomson-Uther, que son los tres estudiosos que fueron desarrollando un sistema de catalogación de cuentos folklóricos que ha permitido ordenar y comparar cuentos de todas las tradiciones y culturas del mundo. Más información sobre la clasificación ATU, aquí.
En España muchas recopilaciones de cuentos siguen esta clasificación, y la más ambiciosa es el Catálogo tipológico del cuento folclórico español, de M. Chevalier y J. Camarena, con cuatro libros publicados (dos en Gredos y dos en CEC) y otros dos libros inéditos.
Pero volviendo al enlace que da origen a este post, el motivo en los cuentos folklóricos sería algo así como una parte del cuento que puedes encontrar en otros cuentos. Como si el cuento fuera un mosaico formado por motivos-teselas. La cosa es más complicada, pero quizás el ejemplo valga.
Un tema complejo pero apasionante, porque nos ayuda a reflexionar sobre la universalidad de los cuentos folklóricos, sus semejanzas a pesar de las distancias y las diferencias entre culturas y personas. Es decir, en el fondo no somos tan distintos pues los cuentos de todos los lugares tienen siempre elementos comunes.
Saludos
lunes, 21 de diciembre de 2009
El señor Viento del Norte
Hoy ha llegado el señor Viento del Norte, es tiempo para placeres sencillos, y también para recordar este álbum de 1983 de Carmen Posadas y Alfonso Ruano.
Hoy ha llegado el señor Viento del Norte y ha sido para quedarse unos cuantos meses. Disfrutemos de su compañía.
Saludos
domingo, 20 de diciembre de 2009
Una estupenda noticia
Hace un año por estas fechas ganó nada más y nada menos que el Premio Lazarillo y el Villa de Ibi, así, como quien no quiere la cosa. Ya se barruntaba que el asunto era serio porque hace años se había hecho con el Ciudad de Alicante. En fin, no es que este chico prometa, es que este chico es un pedazo de escritor de tomo y lomo. No dejéis de acercaros a sus libros.
Enhorabuena amigo.
Abrazos
jueves, 17 de diciembre de 2009
El contador de cuentos
Saki era un autor difícil de encontrar, con todos sus libros agotados, pero de un par de años a esta parte cada vez es más habitual toparse con algún título suyo en las buenas librerías. Saki (1870-1916), escritor inglés, tuvo una vida de novela. Sus cuentos son estupendos (inolvidable Crónicas de Clovis y Animales más que animales, o este del que hoy hablo) y yo llegué a ellos gracias a Estrella Ortiz, quien me prestó su ejemplar de Juguetes de paz.
Premio Nacional de Teatro Infantil y Juvenil
Además sus cedés con canciones infantiles (en su mayor parte tradicionales) son una delicia (y sus directos una maravilla, una fiesta).
¡Enhorabuena, enhorabuena!
Más información sobre la noticia aquí.
XXXIII Salón del Libro Infantil y Juvenil
El Salón está organizado por el Consejo General del Libro (de la OEPLI), el Ayuntamiento de Madrid y algunas editoriales. Y aunque está enfocado a la literatura escrita, este año hay espacio para la oralidad y, entre las actividades previstas, habrá un maratón de cuentos contados.
La exposición central de libros versa sobre "Animales fantásticos" y tiene una pinta estupenda. Además de la exposición de libros y de las actividades del programa, hay dos exposiciones de ilustraciones: una de Miguel Calatayud (Premio Nacional de Ilustración 2009) y otra colectiva con el lema del Salón "Animales fantásticos", en la que participa la propia MªReyes.
La editorial Palabras del Candil también aporta su granito de arena y entre los libros seleccionados para la exposición central está Alfonsina, de Pepe Maestro (ilustraciones de Lourdes Quesada). Otros libros nuestros también estarán expuestos.
No dejéis de pasaros.
Saludos.
miércoles, 16 de diciembre de 2009
Una reflexión sobre el sexo
Aunque en este blog toco un poco de todo pensaba no referirme a este asunto en cuestión, pero después de leer el otro día a Houellebecq no me puedo quitar de la cabeza un párrafo que aquí os dejo.
"Lo que los occidentales ya no saben hacer es precisamente eso: ofrecer su cuerpo como objeto agradable, dar placer de manera gratuita. Han perdido por completo el sentido de la entrega. Por mucho que se esfuercen, no consiguen que el sexo sea algo natural. No sólo se avergüenzan de su propio cuerpo, que no está a la altura de las exigencias del porno, sino que, por los mismos motivos, no sienten la menor atracción hacia el cuerpo de los demás. Es imposible hacer el amor sin un cierto abandono, sin la aceptación, al menos temporal, de un cierto estado de dependencia y de debilidad. La exaltación sentimental y la obsesión sexual tienen el mismo origen, las dos proceden del olvido parcial de uno mismo; no es un terreno en el que podamos realizarnos sin perdernos. Nos hemos vuelto fríos, racionales, extremadamente conscientes de nuestra existencia individual y de nuestros derechos; ante todo, queremos evitar la alienación y la dependencia; para colmo estamos obsesionados con la salud y con la higiene: ésas no son las condiciones ideales para hacer el amor." (Michel Houellebecq, Plataforma, Anagrama, p. 216).
Pues eso.
Saludos
Munia y Asun Balzola
Hoy he recibido en casa el último de los libros de Munia (5) que me faltaba por adquirir, se trata de Munia y la luna, en editorial Destino. Munia es quizás el personaje más conocido de la creadora Asun Balzola, precursora y decana de los ilustradores españoles. Ella perteneció a la "primera generación de ilustradores", como me dijo una vez Javier Zabala, punta de lanza de la nueva ilustración española que, ante la imposibilidad de desarrollar aquí sus propuestas, casi publicó más fuera de España que dentro.
De la colección "Algunas veces Munia" el libro que más me gusta es el de Munia y la señora Piltronera, aunque durante el día de hoy, mi favorito va a ser Munia y la luna, porque lo tengo por fin (¡por fin!) encima de la mesa y lo puedo leer y releer y compartir esta tarde con Mariaje y nuestros hijos.
En fin, una chulada.
Más información sobre Asun Balzola: aquí, aquí y aquí. ¿Quieres ver ilustraciones suyas? aquí.
martes, 15 de diciembre de 2009
Libros y árboles
Hay otros libros que nos acercan a los árboles. A mí me gusta mucho un álbum de Tim Bowley, narrador oral y amigo, Jaime y las bellotas, publicado por Kalandraka. Y también me gusta un montón El árbol generoso, de Sheil Silverstein, en Litexsa Venezolana. Aunque sin lugar a dudas mi libro favorito sobre este tema, y uno de mis libros de cabecera (de esos libros que releo con frecuencia) es El hombre que plantaba árboles, de Jean Giono, en la editorial José J. de Olañeta.
El hombre que plantaba árboles es un cuento maravilloso que es una metáfora de muchas cosas y una historia de perseverancia, de voluntad, de naturaleza, de vida, de cambio, de posibilidad... un cuento maravilloso que no debéis dejar de leer, regalar, releer y volver a regalar. Por cierto, un cuento que se parece mucho a la historia real que cuenta Wangari y los árboles de la paz.Además del libro puedes ver este corto de animación con la historia, una belleza. En tres partes: una, dos y tres.
Saludos
Dípticos para estas navidades
Este año, además, Raquel Marín nos cedió una bellísima ilustración para la portada del díptico.
Puedes ver y descargarte los dípticos aquí.
Saludos
lunes, 14 de diciembre de 2009
Niños y televisión
Quienes llevamos años contando cuentos a niños y niñas hemos podido comprobar cómo resulta cada vez más difícil conseguir que atiendan: es una puñeta no ser multicolor, ni tener estridencias, ni ser una rápida sucesión de imágenes y secuencias, ni tener música trepidante... como en la tele. Afortunadamente no hay nada que pueda despistarte de una buena historia, pero como digo, la cosa está cada vez más difícil.
Y esto es solo una de las partes del problema: porque mientras los niños y niñas ven la tele no conversan, no miran a los ojos de los otros, no escuchan, no visualizan, no imaginan... madre mía, no sé qué hacéis que no la tiráis ya por la ventana.
Más post sobre este asunto aquí y aquí, y relacionados aquí, aquí y aquí (de este último, si podéis, no dejéis de ver el vídeo de Tonucci, aunque es seguro que abundaré sobre ello en otro post).
Recomendado en las Bibliotecas Municipales de Madrid
Una buena de vampiros
Caray, leí con cierto enganche los cuatro tomos de Stephenie Meyer, pero sigo pensando que les sobran el 50% de las páginas y que el estilo (¿es la traducción?) es terrible: no soporta una lectura en voz alta de dos páginas, haced la prueba. Eso sí, lo de ir a ver las pelis de la saga me lo he perdonado, paso, vamos, es que no tengo ni una pizca de interés.
Sin embargo el otro día vi una película que me pareció inteligente, muy inteligente, muy bien hecha, y que me tuvo enganchado todo el tiempo: Déjame entrar, del director sueco Tomas Alfedson, basada en una novela de John Ajvide Lindqvist (que ha publicado Espasa: Déjame entrar). Donde los vampiros (la vampiresa) son vampiros y la historia se mueve entre la tragedia, el peligro, la ternura, el amor...
Una película excelente, totalmente recomendable, no dejéis de verla. Mejor en compañía.
Saludos
domingo, 13 de diciembre de 2009
Los cuentos que alimentan
La época de la que habla es la década de los años treinta y cuarenta del pasado siglo, y en el libro podemos encontrar muchos momentos en los que los cuentos tienen presencia, sobre todo en momentos de hambre y desesperanza, en los que los cuentos se convierten en el único alimento posible. Y también en momentos de celebración y encuentro: en velatorios, reuniones familiares, etc. Os pongo aquí unos ejemplos.
Uno. "Mi padre está en la cocina tomando té negro en su gran tazón blanco esmaltado. Me levanta y me sienta en su regazo.
-Papá, ¿me cuentas el cuento de Cu Cu?
-Cuchulain. Dilo conmigo: Cu-ju-lín. Te contareé el cuento cuando digas bien el nombre Cu-ju-lín.
Yo lo digo bien y él me cuenta el cuento de Cuchulain, que cuando era un muchacho tenía un nombre diferente, Setanta. [cuenta el cuento]
Este es mi cuento. Papá no puede contar este cuento a Malachy ni a ningún otro niño de los otros apartamentos del pasillo.
Termina el cuento y me deja probar su té. Está amargo, pero yo soy feliz sentado en su regazo" (pp. 19-20)
Dos. [En el velatorio de un hermano pequeño del protagonista] "Pa Keating contaba cuentos divertidos y los mayores se reían, a pesar de que no querían reírse o de que no debían reírse delante de un niño muerto. [cuenta una historia divertida y algo escatológica] La tía Aggie sollozó y dijo que aquel no era un cuento decente para contarlo delante de un niño muerto, y la abuela dijo que era mejor escuchar un cuento así que estar sentados con las caras largas." (p.89)
[Otro velatorio:] "Podréis venir al velatorio y habrá jamón, y queso, y bollos, y jerez, y gaseosa, y de todo, y podréis escuchar las canciones y los cuentos toda la noche. ¿Quién puede rechazar eso? Nada como un velatorio para pasar un buen rato." (pp. 181-182)
Tres. [También hay lecturas en voz alta de cuentos, por ejemplo:] "Mikey nos lee un cuento que yo no había oído nunca, un cuento cochino que trata de Cuchulain y que yo no podré contar nunca a mi padre ni a mi madre, un cuento de cómo Cuchulain tomó por esposa a Emer. [cuenta la historia, divertida] Mikey y Malachy se ríen con este cuento, aunque no creo que Malachy lo entienda. Es pequeño y le falta mucho para hacer la Primera Comunión y sólo se ríe de la palabra mear." (p. 131)
Cuatro. "Antes de acostarnos nos sentamos alrededor del fuego y si le decimos papá, cuéntanos un cuento, él se inventa un cuento que trata de alguien del callejón y el cuento nos lleva por todo el mundo, por los aires, bajo el mar y de vuelta al callejón. Todos los que salen en el cuento son de un color diferente, y todo está patas arriba y al revés. Los automóviles y los aviones van por debajo del agua y los submarinos vuelan por el aire. Los tiburones se posan en los árboles y los salmones gigantes juegan en la luna con los canguros. Los osos polares luchan con los elefantes en Australia y los pingüinos enseñan a los zulúes a tocar la gaita. Después del cuento nos lleva al piso de arriba y se arrodilla a nuestro lado mientras rezamos. [...] Yo pienso que nuestro padre es como la Santísima Trinidad, que tiene tres personas diferentes: el de la mañana con el periódico, el de la noche con los cuentos y las oraciones y el que hace la cosa mala y llega a casa oliendo a whiskey" (p.223)
Cinco. [también hay lugar para las poesías] "Seamus viene a la sala [del hospital] tres veces por semana y se trae aprendidas poesías nuevas [...] Recita la poesía y a todos los que están en la sala les encanta. Quieren aprendérsela, y él la recita tres veces más hasta que toda la sala está recitando [...] La recitan ahora con Seamus y, cuando termian, todos lo vitorean y lo aplauden y Seamus se ríe, satisfecho de sí mismo." (p.245)
Seis. "Nos quedamos sentados en el suelo y nos contamos cuentos que hablan de cosas que han pasado de cossas que no han pasado nunca y de las cosas que pasarán cuando nos vayamos todos a América".
Hay algunos ejemplos más, pero estos son suficientes para comprender la importancia de la oralidad en la vida de los protagonistas del libro. No olvidemos que no es una novela, que se trata de una autobiografía. Los cuentos van de la mano, en muchos casos, de los pocos momentos de felicidad que encontramos en el libro.
El cuento como vínculo íntimo con el narrador (uno), el cuento como un modo de superar la tristeza y los malos momentos (dos-a); el cuento como corazón de la fiesta, el juego y la reunión (dos-b, tres, cuatro, cinco y seis). Y siempre el cuento como posibilidad, como ventana, como escapada, como sueño. El cuento como puente, como camino para imaginar otras vidas posibles.
viernes, 11 de diciembre de 2009
Pasa el tiempo...
Resulta que hablando con una de las profesoras nos hemos dado cuenta de que hace años (y no pocos) yo mismo le conté cuentos a ella cuando era alumna del instituto de Pastrana (Guadalajara); pero es que hace años también fui a contarle cuentos y a hablarle sobre libros y cuentos para niños cuando estaba estudiando en la Escuela de Magisterio de la Universidad de Alcalá, en Guadalajara. Y hoy, pues mira, hoy he estado contando cuentos en su clase, porque ya es profesora, funcionaria.
¡Madre mía, cómo pasa el tiempo!
Las dos sesiones de cuentos fueron gozosas, las profes estupendas (y el profe también) y los niños y niñas, alegres. En fin, que me he vuelto a casa con el rumbe rumbe del paso del tiempo y no me lo puedo quitar de la cabeza, porque, como quien dice, fue ayer cuando comencé a contar cuentos...
Saludos
jueves, 10 de diciembre de 2009
El cuento de los contadores de cuentos
A la sombra del cuento
Tengo especial debilidad por este libro que fue punta de lanza de la editorial, compañero en los primeros momentos y apuesta segura. Sí, sí, apuesta segura, porque sigue siendo, sin duda, uno de nuestros mejores libros.
Contiene un total de dieciocho cuentos bastante variados: largos, larguísimos, cortos y cortísimos, más o menos poéticos, más o menos divertidos, más o menos reflexivos...
Además de esta diversidad la colección de cuentos tiene también elementos comunes a todas sus páginas: su intensidad emocional y, sobre todo, su alta calidad literaria.
Un libro que empieza con un parto y acaba con una muerte: un libro como una vida.
Es un placer leer a Charo Pita, no puedes perdértelo.
Saludos
miércoles, 9 de diciembre de 2009
Dos citas de Murakami sobre contar
De Sputnik, mi amor, en Tusquets, en p.165:
"Todas las cosas deben ser contadas cuando llega el momento. Si no, uno sigue eternamente encadenado a su secreto".
Coincido plenamente en que hay historias que eligen su momento para ser contadas, y no hacerlo, no ser capaz de "escuchar" a la historia que implora salir por esa boca, esa lengua, esos ojos... puede ser fatal: la historia crece y busca espacio, se adentra en el cerebro, se desliza por los vasos sanguíneos, obtura los meatos, succiona el tuétano de los huesos. Lo dicho, fatal. Todas las cosas deben ser contadas cuando llega el momento. Así es.
De Crónica del pájaro que da cuerda al mundo, en Tusquets también, p.82:
"Cada relato era una interesante historia de suspense, pero cualquier historia del mundo tiende a perder su brillo cuando la oyes por séptima u octava vez. Además, no las contaba con el tono de voz adecuado a un relato. Tenías la sensación de que estaba gritando hacia el otro lado de un barranco un día de viento fuerte".
En esta ocasión no me queda más que discrepar. Hay algunas historias que las he contado (y las he oído) cientos de veces, y creo que siguen teniendo su brillo, y eso es debido posiblemente a que cada vez es una nueva vez, siempre es distinto, porque la historia se cuenta en un contexto único e irrepetible, con un público y en un estado de ánimo diversos: porque nunca te bañas dos veces en el mismo río.
Hay también niños que piden continuamente una misma historia, y la pueden oír decenas e incluso cientos de veces, y siguen deslumbrados por sus palabras y su trama, por lo que cuenta y la carga que lleva.
Una buena historia, bien contada, no pierde nunca su brillo.
Otra cuestión es que la forma de contar del cuentista no fuera buena, como sugiere el propio narrador del libro de Murakami. En ese caso incluso la mejor historia se puede desinflar, y no hace falta escucharla ocho veces para que se hunda.
De cualquier forma, leed a Murakami, él sí sabe contar buenas historias.
Saludos
Dos de tele
Dos. Buscando información sobre Roal Dahl (prometo pronto una entrada monográfica sobre este autor imprescindible) me he topado con la letra de una canción de los Oompa Loompas (en Charlie y la fábrica de chocolate, ya sabes) anti-tele, no me resisto a ponerla aquí:
Hemos aprendido algo primordial.
Algo que a los niños les hace mucho mal.
Y es que en el mundo no hay nada peor
que sentarles frente a un televisor.
De hecho sería muy recomendable
suprimir ese trasto abominable.
En todas las casas que hemos visitado
así a los pequeños hemos encontrado:
Absortos, dormidos, casi idiotizados,
mirando la tele como hipnotizados.
Oh, sí, ya sabemos que les entretiene.
Y que por lo menos quietos les mantiene.
No gritan, no lloran, no brincan, no juegan.
No saltan, ni corren, tampoco se pegan.
A usted eso le da mucha tranquilidad.
Es libre de hacer muchas cosas, ¿verdad?
Mas yo le pregunto, ¿ha pensado un momento
para qué le sirve a su hijo este invento?
Le pudre todas las ideas.
Mata su imaginación.
Su pobre mente se transforma en un inútil reflector.
Con ver figuras se conforma,
no sueña, ni evoca, ni piensa, señor
¿Qué más se puede decir? Está todo escrito.
Saludos
Otro clásico
Tres enlaces
Me han llegado también estas dos alertas de Google.
1 Una reseña de Pétala que acaban de colgar en este blog preocupado por las bibliotecas escolares, las aulas y muchas más cosas.
2 Un artículo mío que Gretel seleccionó de mi web y que ahora está alojado en una página con caracteres orientales... hay que ver lo que viajan las palabras. De cualquier forma el artículo sigue siendo de mis favoritos, por si no lo conoces, aquí está.
Saludos
lunes, 7 de diciembre de 2009
Vivir sin leer
A Houellebecq lo conocí gracias a mi amigo Txus, quien me regaló su novela Las partículas elementales, que me encantó. Y ahora este segundo libro que acabo de terminar me confirma que va a ser uno de esos escritores que no olvidaré, tanto por los temas que toca (y cómo los trata) como por su forma de escribir y tramar las novelas.
De Plataforma he señalado unas cuantas reflexiones, aquí os dejo una que me ha gustado. El protagonista estaba de vacaciones y se había llevado dos bestsellers insufribles, así que:
"Hice un agujero en la arena para enterrar los dos libros; el problema es que ahora tenía que encontrar algo que leer. Vivir sin leer es peligroso, obliga a conformarse con la vida" (p.86).
El texto tiene un sentido distinto si lo leéis en su contexto, pero eso lo dejo para quienes os decidáis a adentraros en la novela.
Saludos
domingo, 6 de diciembre de 2009
Contando en Salamanca
1 Para empezar se trataba de una sesión de cuentos que celebraba los 24 años de la biblioteca especializada para jóvenes y adolescentes, ahí es nada. No sé si habéis tenido oportunidad de ir a esta biblioteca (C/Peña Primera, 14 y 16), pero es bastante interesante, no solo por los fondos y por las propuestas novedosas que presenta, sino por los profesionales que tiene (hace años y gracias a Lorenzo y los demás bibliotecarios de la FGSR empecé a conocer y a interesarme por el cómic: supieron en verdad qué recomendarme y darme unas pautas para adentrarme en ese género). Son buenos en lo suyo, por eso uno comprende que gente como ellos es la que está detrás de una página tan estupenda como sol-e.com.
En fin, que si algún día os va de paso merece la pena que os paséis por el lugar y curioseéis y preguntéis todo lo que se os ocurra.
2 Para continuar es una de las pocas veces en las que he visto que se ha convocado a jóvenes para una sesión de cuentos fuera del horario de instituto, y se ha llenado el aforo. Lo cual también dice mucho del lugar. No es la primera vez que me pasa, porque en Puerto Lápice llevo algunos años contando para jóvenes (y van) o en Santa Cruz de Mudela también hice una sesión para jóvenes (y fueron), pero sí es de esas pocas veces en las que esto se programa de esta manera y sucede.
El público juvenil y adolescente, generalmente, suele ser público cautivo que asiste a las sesiones de cuentos porque son dentro del horario de instituto. Y cuando no sucede así, suelen ser sesiones fallidas. Quizás sería bueno reflexionar sobre esto: ¿es que a los jóvenes no les interesan los cuentos? pero si van y los disfrutan ¿entonces no les interesan fuera del horario escolar?, ¿o es más bien que hay otras cosas que les interesan más cuando tienen algo de tiempo libre?
3 Para terminar: la sesión fue maravillosa, nos reímos mucho y pasamos también algo de miedo (es lo que tienen los cuentos de miedo), y la hora y cuarto pasó volando. Cómo me gusta contar a este público, no puedo olvidar que fue el primer grupo de edad al que conté profesionalmente.
En fin, que fue una buena sesión, y no se me ocurre mejor manera de empezar el puente.
Pasadlo bien.
Saludos.
jueves, 3 de diciembre de 2009
Contando y adivinando
En fin, que de Valdeganga y Cristina y sus gentes me llevo un recuerdo maravilloso. Y estas adivinanzas.
1 Ni es de carne ni es de hueso,
y al entrar en la cama
se pone tieso
2 Entre sábanas blancas
y cobertores verdes
le cuelgan los pirindeles
3 Trozo de carne viva
que a medianoche se empina
4 Un bancal muy bien labrado
sin mula y sin arado
(esta la acerté)
5 Cien mocitas en un barranco
y todas tienen el culo blanco
(esta también)
6 Largo como un alpargate
y tiene pelos en el chichirimate
Me falta alguna por poner, a ver si la puedo localizar en estos días.
Por cierto, mira qué retahíla me traje también:
A la una canta el gallo
A las dos la totovía
A las tres el ruiseñor
Y a las cuatro ya es de día.
Qué gusto.
Saludos
PD: ¿Te gustan las adivinanzas? Hay más aquí y aquí.
martes, 1 de diciembre de 2009
Un par de enlaces
Pero es que me ha saltado una alerta del libro 99 pulgas, escrito a seis manos con Pablo Albo y Félix Albo (¡madre mía!, si hace ya 3 años que se publicó en Palabras del Candil, si es que fue ¡el libro inaugural!), aquí. Y mira, mira qué cosa más bonica dicen aquí de las pulgas.
En fin, que dicen por ahí.
Saludos
La casa más grande del mundo
El libro en cuestión es La casa más grande del mundo y, obviamente, es uno de los cuentos que estoy contando en la sesión de Casas y cuentos.
Buceando en la red me he encontrado este artículo de Ana Garralón sobre Leo Lionni en RevistaBabar, una delicia también.
Más sobre el autor aquí.
Saludos
Poesía para un Premio Cervantes
Biografía y bibliografía aquí (la entrada tiene más enlaces sobre el autor al final).
Algunos de sus poemas aquí (Alta traición es uno de sus poemas más famosos).
Artículos a raíz del premio en El País, ABC, Público, La Razón y El Mundo
Saludos
domingo, 29 de noviembre de 2009
Un pequeño gran libro
Vaya semana de encuentros
El lunes estuve en Madrid con Virginia Imaz y Ana Griot hablando de la asociación, por allí también estaban Aldo Méndez, Alicia Merino, MªReyes y Marta Guijarro (de Chiara), Victoria Gullón, Nieves (de Borrón y Cuento Nuevo), Miguel (de Canto y Cuento), Rafa Ordóñez y Mercedes Carrión; muchos de ellos amigos y colegas (algunas muy amigas, la verdad). También estuvo mi querida Teresa y Marina (bibliotecarias).
El martes fui a Barcelona a una tertulia literaria, se excusó Nicolás Buenaventura, quien tenía previsto venir pero a última hora no pudo, en fin, tenía tenía muchas ganas de verlo y abrazarlo, otra vez será; pero sí vinieron Ignasi Potrony (con textos y reflexiones de Nicolás para la ocasión) y Rubén Martínez Santana, narradores ambos. Ah, ¡conocí a Pilar!, por fin, la compañera de Nicolás. Un sol.
El jueves estuvo comiendo en casa Pablo Albo, amigo muy amigo, colega de oficio y loco enredado en esto de la editorial.
El viernes estuve en Zaragoza y pude ir a comer con Cristina Verbena (qué sol, oye) y con Carolina Rueda. Todo un lujo.
Lo dicho, una semana en la que he podido hablar y compartir tiempo con muchos/as de mis amigos/as y colegas. Qué suerte.
Saludos
jueves, 26 de noviembre de 2009
El lector engatusado
miércoles, 25 de noviembre de 2009
No más violencia contra las mujeres
Algunos títulos imprescindibles:
-para hombres y mujeres: Miguel Lorente Acosta, Mi marido me pega lo normal, Booket; y de ficción: Bolaños, 2666, Anagrama; y Los hombres que no amaban a las mujeres, de la trilogía de Millenium, de Stieg Larson. [ver aquí]
-para niños y niñas: Anthony Browne, La familia de los cerdos, FCE; Adela Turín y Nella Bosnia, Arturo y Clementina, ed. Lumen (en esta editorial otros títulos de la colección A favor de las niñas: Rosa Caramelo, Una feliz catástrofe, etc.); Bodecker y Blegvad, Corre, corre, Mary, corre, en Lumen también.
Seguro que hay más títulos importantes. Hoy os hago llegar esta pincelada: todos imprescindibles.
No más violencia contra las mujeres.
Saludos
PD: me envía Ade este enlace sobre el tema.
martes, 24 de noviembre de 2009
Más alternativa
Quería hoy aportar dos nuevas colecciones de libros que pienso que son maravillosos para trabajar en el aula, y sobre todo en Alternativa
Por un lado no dejéis de lado la Mitología, conocer, leer, contar, trabajar los mitos clásicos es un regalo... de los dioses. Yo utilizo bastante los cuatro libritos de A. Esteban y M. Aguirre, Cuentos de la mitología griega, en Ediciones de la Torre; y en estos días Juan (mi hijo de 10 años) ha terminado de leer (y le ha gustado mucho) el clásico de Roger Lancelyn Green, Relatos de los héroes griegos, en Siruela. Yo, como lector, vuelvo una y otra vez a Las Metamorfosis de Ovidio y a La Odisea, y utilizo mucho el diccionario en dos tomos de mitología clásica en Alianza y Los mitos griegos, de Robert Graves, también en Alianza.
El segundo grupo de libros que me parece maravilloso para Alternativa a la religión y también para utilizar en Educación para la Ciudadanía (esta sí es una asignatura necesaria, ya lo creo. Y con más post aquí y aquí), es la colección de SúperPreguntas, en Edebé. Si no conoces estos libros échales un vistazo porque son una absoluta maravilla.
Ojalá esto os resulte útil
Saludos
lunes, 23 de noviembre de 2009
Dos notas de agenda
Mañana, a la misma hora, las 19,00, estaré en la biblioteca "Francesc Bonnemaison", en Barcelona (C/Sant Pere Més Baix, 7), con Rubén Martínez Santana hablando de textos orales y textos escritos, y de los puentes que teje la voz entre ambos. Moderará el debate Albert Lladó (sala Dante, segunda planta).
Dos oportunidades para vernos.
Contar cuentos y política
Aquí (gracias Luis por enviar la noticia).
Saludos
Antonio Rubio
Pero lo mejor de todo es que allí me encontré con Antonio Rubio. Antonio Rubio es maestro poeta, escritor bullicioso, alegría de palabras, y autor imprescindible para cualquiera que guste de la literatura para niños y niñas.
A Antonio hace ya algunos años que lo conozco y he coincidido con él en algunos cursos, jornadas, encuentros y fiestas de la palabra. Siempre anda inquieto rumiando versos o sueños. Pero es que antes de conocerlo en persona lo conocía por sus palabras de tinta, por sus versos hermosos. Y es que no tiene pocos libros ya (mira aquí, pon Antonio Rubio Herrero y en ordenar: autor; y dale a buscar). Y pensando en ello me he dado cuenta de que a veces, en momentos importantes de nuestra vida, algún libro de Antonio anda cerca. Os voy a poner unos ejemplos.
El primer libro de poesía para niños que trabajé y del que aprendí algunos versos para mis sesiones de cuentos fue Versos vegetales, en Anaya. Pero es que además este libro estuvo muy presente en las primeras clases que impartió Mariaje (mi compañera de viaje) en el aula de infantil. De hecho el año en el que Mariaje aprobó las oposiciones llevaba entre los materiales cinco libros que deslumbraron al tribunal, cinco libros recién salidos de imprenta y agrupados en una pequeña colección llamada De la cuna a la luna, en Kalandraka (Luna, Cocodrilo, Pajarita de Papel, Cinco, Miau), seguro que los conocen, y si no es así, no duden en buscarlos.
Pero hay más. Los trabajos de Juan (también en Kalandraka) fue un libro que a mi hijo Juan, cuando era pequeño, le encantaba. Y también el primer libro que Juan leyó él solo fue Tres cuentos de urraca (en Anaya).
Otro libro con el que hemos jugado mucho y reído mucho (con Juan y Miguel en casa) y usado mucho en el trabajo (tanto Mariaje como yo) ha sido El murciélago Aurelio (en SM), otra delicia.
Y por último Siete llaves de cuento (otra vez en Kalandraka), qué quieren que les diga, un manual imprescindible para quienes nos dedicamos a palabras y niños, a sueños y cuentos, a versos y juegos. Un subidón de optimismo y energía cuando queremos volver a beber de las fuentes.
Pues esto, entre otras muchas cosas, es Antonio Rubio. Como para no alegrarse al decir que el sábado compartimos cuentos y charla y pasamos un rato estupendo.
Saludos
domingo, 22 de noviembre de 2009
Tu escribes y ellos deciden
Aquí podéis ver una reseña de Darabuc de La casa de mi abuela, el libro que acabo de sacar en OQO y que ilustra Matteo Gubellini. Como digo, es relativamente fácil encontrar alguna reseña (incluso con textos tan secretos como Cuaderno de imágenes o 99 pulgas Google es capaz de encontrar reseñas). Pienso que el libro que más reseñas tuvo de todos los que he publicado fue Cuento para contar mientras se come un huevo frito, o tal vez fue debido a que yo estaba más pendiente de ello, no sé (fue el primer libro que publiqué y que, por cierto, creo que pronto se reedita), tienes algunas aquí.
Supongo que si me pusiera a buscar ahora encontraría más reseñas de Un loro en mi granja, más que nada porque es un libro premiado y eso ya lo señala.
Pero otras veces encuentras cosas más peculiares, aquí os dejo enlazado este blog de un aula de infantil que lleva Ana Zambrano (una profe bastante rumbosa, si os fijáis) donde hicieron un montaje (como una fotonovela) con La cabra boba.
Lo cierto es que cuando un libro sale de imprenta y empieza a moverse por librerías y bibliotecas recorre su propio camino. Se defiende solo. Ya no es cosa tuya. Tú has podido controlar (más o menos) en el proceso de creación del texto y gestación del libro, pero en cuanto el libro sale, él se busca la vida. Lo primero que te llegan son esas olas de reseñas, olas pequeñas como de playa en un día soleado. Pero a veces te llevas sorpresas; por ejemplo, he recibido correos de gente que afirma haber visto libros míos en algún museo (El huevo frito en el Guggenheim de Bilbao, o La cabra boba en un museo de Finlandia).
O en lugares insólitos.
Al respecto me pasó algo emocionante con La cabra boba, paseando por Lavalle, en pleno corazón de Buenos Aires, allí estaba, mirándome a través del escaparate de una librería maravillosa.
Lo dicho: tú los escribes y luego ellos deciden, se buscan la vida, se defienden solos. Y si no... malo. ´
En realidad nunca sabes para quién estás escribiendo, si ese cuento va a ser importante para alguien o significará algo en la vida de algún niño, alguna niña, o de algún adulto. Es uno de esos misterios que dan hondura al gesto de teclear, abismo al de soñar.
Saludos
Pep
viernes, 20 de noviembre de 2009
El circo de la mariposa
Primera parte aquí.
Segunda parte aquí.
Saludos y buen final de semana
PD: os hablé de Soah en otra entrada anterior, ayer leí un artículo en El País sobre este documental estremecedor. Aquí.
jueves, 19 de noviembre de 2009
Cuentos como alternativa (a la religión)
Afortunadamente el grupo de padres y madres de los compañeros/as de mis hijos accedieron a que preparara propuestas para que los alumnos de alternativa trabajaran con cuentos. Y así llevo tres años con esta tarea.
Ayer por la noche terminé con las propuestas de este año: para 2º y 5º de primaria, ya puedes consultarlas en mi web y, por supuesto, puedes utilizarlas siempre que te parezca. Seguramente sean mejorables. Ah, y seguramente no solo sirvan para clase de alternativa, a lo mejor son ideas que puedes aplicar en otros talleres y lugares.
Solo te recuerdo que me gusta que se cite la fuente.
Para ver todas las propuestas accede directamente desde aquí (además de las propuestas tienes mi opinión sobre esta no-asignatura).
Saludos
miércoles, 18 de noviembre de 2009
Un tesoro en el desván
Antes que esta pequeña colección que hoy comienza (pronto tendremos dos títulos más: cuentos sicilianos de Guifà y cuentos persas) solo se había publicado en España, que sepamos, un libro que tocaba este tema: El pájaro que canta el bien y el mal, de José Manuel de Prada Samper (en Lengua de Trapo), una delicia, un viaje a través del tiempo para estudiar a la narradora tradicional Azcaria Prieto.
El libro Un tesoro en el desván contiene más de setenta cuentos y textos tradicionales recogidos por el autor a sus padres, además de una completa introducción, un profuso estudio de cada texto y una completísima bibliografía. Justifica el autor en la contraportada la publicación de una colección de cuentos tan privada:
"Esta colección tan privada es a la vez, sin embargo, una invitación a considerar la dimensión de cualquier individuo como patrimonio universal, en tanto en cuanto su memoria es el soporte que mantiene viva la tradición en el fascinante viaje de nuestra especie desde su origen hasta su destino".
Pronto podréis echarle un vistazo en librerías y bibliotecas.
Ojalá os guste y os resulte interesante.
Narrador invitado en GRETEL
Este mes de noviembre soy el narrador invitado en la página de Gretel, web dediaca a la literatura infantil y juvenil y auspiciada por la Universidad Autónoma de Barcelona, El Banco del Libro de Venezuela, la Fundación Germán Sánchez Ruipérez y la Fundación SM (además de patrocinadores como Edebé, Edelvives, Diputación de Barcelona, IBBY y Ekaré).
Lo de narrador invitado significa que cuentan algo sobre mí y sobre lo que tengo publicado, los enlaces donde ver más cosas acerca de un servidor y un par de cuentos que grabé y que ahí quedan colgados para quien quiera escucharlos (una lástima las prisas, podría haberlo hecho con más cuidado). Está todo aquí.
De todas formas aprovechad y echad un vistazo a la web, merece la pena.
Saludos
martes, 17 de noviembre de 2009
Los cuentos que me contaron por el camino de Don Quijote
Pero volvamos al libro de hoy.
Los cuentos que me contaron por el camino de don Quijote es un libro maravilloso que escribió Javier Villafañe en la década de los ochenta del pasado siglo. Si no sabéis quién era Javier Villafañe os cuento: él era un escritor y titiritero argentino que durante unos años recorrió La Mancha de El Quijote con sus títeres, su carreta y su mula, representando su teatrillo por escuelas y plazas. A cambio pedía a los niños que le regalaran cuentos. Así recogió más de 55.000 cuentos, ahí es nada, de niños y niñas de La Mancha. De todos esos cuentos hizo una selección de 177 que cuidadosamente agrupó en este libro.
Ahora entendéis por qué os digo que es un libro maravilloso, ¿verdad?: sólo la aventura de su gestación es algo inaudito. Villafañe continuó recogiendo cuentos por los caminos de Aragón (hay otro libro agotado con una selección de esos textos) con su teatrillo de títeres. Vivió muchos años en España, escribió cuentos y poesías, algunas de ellas maravillosas (os recomiendo "Los cinco burritos"). Y podéis buscar más información sobre él aquí, aquí y aquí (por cierto, este año se celebran los cien años de su nacimiento).
Después de leer todo esto entenderéis que para una pequeña editorial como la nuestra es todo un honor que alguien de la talla de Villafañe esté entre nuestros autores. Un honor y una aventura, imaginaos lo difícil que ha sido para nosotros contactar con los herederos de los derechos de este autor en Argentina.
En fin, un libro que fue y es una aventura. Un libro en el que podéis encontrar cuentos verdaderamente maravillosos, en el que podéis valorar la tradición que sabían los niños de La Mancha hace treinta años, en el que podéis disfrutar y sorprenderos con los cuentos más inverosímiles que podáis imaginar.
Ojalá os guste y lo disfrutéis leyéndolo tanto como nosotros editándolo.
lunes, 16 de noviembre de 2009
Otro grande
Mejor el libro
No es el primer libro al que llego a partir de una película, me pasó recientemente con Revolutionary Road, maravilloso (imprescindible) libro de Richard Yates (en Alfaguara) al que llegué a partir de la versión cinematográfica de Sam Mendes, con dos actorazos como Kate Winslet y Leonardo DiCaprio.
Lo cierto es que si he leído un libro que me ha gustado entonces trato de no ver la película (como me sucedió con El lector, excelente libro de Bernhard Schlink, aunque la actriz protagonista del film fuera la misma Winslet), porque en caso de relectura en vez de "ver" y "escuchar" mi propia historia, lo que imagino cuando leo, lo que sucedería dentro de mi cabeza al leer sería una remembranza, una revisualización de la película: los protagonistas del libro tendrían la misma cara y las mismas voces que los actores de la película, los espacios donde transcurre la acción serían los mismos... es decir, todo sería más pequeño, habría menos posibilidades de ampliar y encontrar detalles, sabores.
No me pasa esto con los libros que no me han gustado especialmente. Por ejemplo no tengo ningún problema en ver la trilogía fílmica de El señor de los Anillos porque dudo de que vuelva a releer un libro-tochón que me pareció pelín pesado (eso sí, no creo que vaya al cine a ver la versión de El Hobbit).
Sea cual sea el camino por el que he llegado a un libro que además tiene una versión cinematográfica, prácticamente en todos los casos en los que he visto la película y he leído el libro (y he decidido que el libro me interesa, me gusta) pienso que el libro es mejor, con mucho. Me parece mucho más rico, más lleno de matices, más complejo. Incluso en casos como Revolutionary Road donde la película me gustó mucho, el libro me gustó mucho más.
Igual me ha sucedido con El animal moribundo, un libro que me ha parecido muy bueno, generoso, difícilmente abarcable en el territorio del cine. Un libro muy inteligente y lleno de sabiduría, con una trama sencilla pero con unos personajes con gran hondura, una historia que tal vez se haya escrito muchas veces (hombre mayor, mujer joven, deseo y celos) pero que en esta ocasión se vuelve a escribir y se profundiza en los sentimientos del protagonista hasta lo más recóndito del alma, con digresiones reflexivas excelentes, con un estilo ágil, directo, y, sobre todo, con una voz que suena a verdad desde la primera hasta la última palabra.
Os dejo aquí una perla del libro:
"¿Qué es la ridiculez? Renunciar voluntariamente a tu libertad, esa es la definición de ridiculez. Si te quitan la libertad a la fuerza, no hace falta decir que no eres ridículo, excepto para quien te la ha quitado violentamente. Pero quien se deshace de su libertad, quien está deseando deshacerse de ella, entra en la esfera de lo ridículo, que hace pensar en la más famosa de las obras de Ionesco y que ha sido cantera de la comedia de toda la historia de la literatura. Quien es libre puede estar loco, ser estúpido, repelente, sufrir precisamente porque es libre, pero no es ridículo. Tiene dimensión como ser." (p. 85)
Una maravilla.
Saludos
domingo, 15 de noviembre de 2009
Un Madrid de Cuento 2009
Que lo disfrutéis.
Saludos
Sobre la función de la escuela
Para que os hagáis una idea aquí os dejo esta perla:
"Algunos creen que la enseñanza no debe ser -en el terreno moral y cívico- más que una reiteración ampliada de las doctrinas que profesan los progenitores, sean cuales fueren: los maestros sólo son unos empleados al servicio de los prejuicios familiares. Ni educación para la ciudadanía, ni ciencias del mundo contemporáneo, ni formación sexual obligatoria, nada de lo que pueda alterar sacrosantas supersticiones caseras."
Saludos
jueves, 12 de noviembre de 2009
Sobre el cartel de Casas y cuentos
Hoy os traigo este enlace para que veáis cuál ha sido el proceso de reflexión previa y elaboración del cartel (no tanto en cuestiones de técnica pictórica sino de organización del cartel, plasmación de la idea, etc.).
Una visita a la cabeza del buzo... (un genio el Gamón).
Saludos
Pep
Nueva web de fomento de la lectura
Se ve que es una web pensada para que sean los usuarios quienes vayan dando contenidos, un espacio de intercambio. Funcionará (según pienso) si además de la web hay administradores (especialistas: no en informática, sino en leer, en libros, en jóvenes...) que gestionan esa información externa y, al mismo tiempo, van incluyendo contenidos propios y profesionales.
Un recurso más.
Para madres y padres que ejercen
Saludos
miércoles, 11 de noviembre de 2009
Bibliotecas de doble uso
Qué quieren que les diga: una absoluta maravilla. Todo son ventajas, miren: tres administraciones remando en la misma dirección (Consejería de Cultura, Consejería de Educación y Ayuntamiento), lo que supone menos coste para cada una de ellas pero más recursos para la biblioteca (con tres menos hace un más mayor que si fuera un único más). Pero todavía hay más, esta biblioteca tiene una bibliotecaria, lo que supone una persona más por las mañanas trabajando en el centro educativo, es decir, la biblioteca tiene a alguien diseñando estrategias de animación a la lectura para todos los alumnos del colegio, un apoyo indudable para las profesoras y una ventaja incuestionable para esos alumnos que todas las semanas pasan al menos una hora en la biblioteca leyendo y disfrutando con libros. Además son más recursos, porque no se duplican títulos, me explico: hay pueblos con una biblioteca escolar y una municipal y muchas veces sucede que gastan sus exangües presupuestos en comprar los mismos libros: doble gasto y mitad de rendimiento.
Lo miren por donde lo miren, una maravilla.
Hace años que oí hablar a Blanca Calvo de estas bibliotecas, al parecer habituales en países nórdicos. Hoy son una realidad aquí, en Castilla La Mancha, una vez más pionera a nivel estatal de políticas bibliotecarias. Enhorabuena a quienes han sacado este proyecto adelante y ojalá sean cada vez más las bibliotecas de doble uso en toda España, porque no lo duden, son una idea excelente.
Más información sobre las bibliotecas de doble uso (explicación del proyecto: en texto, en vídeo; una puesta en marcha aquí).
Saludos
martes, 10 de noviembre de 2009
La palabra a pesar de todo
La palabra es tozuda, a pesar del horror, a pesar de las dificultades, a pesar de la muerte, a pesar del olvido... el silencio se quiebra como la hoja reseca perforada por un clavo. La palabra, sí, la palabra, a pesar de todo, la palabra.
La sombra de la Bruna es alargada
"Pero lo que más nos atraía a nosotros de aquel enjambre inquieto, aureolado de una polvareda espesa y maloliente, eran los narradores de crímenes. De entre todos, la Bruna disfrutaba de nuestras preferencias, ya que al interés avasallador de sus relatos unía el mérito de recitarlos cantando y acompañada por las notas agrias y desafinadas de la guitarra de su marido ciego. La Bruna era una mujer muy popular. Siempre tenía en torno de ella una multitud ávida y curiosa que coreaba con profundos lamentos el dramatismo aterrador de sus canciones. Se le atribuía a la Bruna una fecundidad asombrosa. Había quien afirmaba que la Bruna había llenado de hijos las cunetas de todas las carreteras de España. Nunca le preocupaba el momento. Traía el hijo por sus propios medios allí donde la sorprendía el trance. La criatura, con el cordón umbilical colgando, era adoptada siempre en el pueblo más próximo al lugar del parto. De esa sencilla manera la Bruna no había perdido aún su libertad, y su voz cascada podía seguir sonando por los ámbitos del mundo entero. A más de esto, la Bruna tenía buen cuidado de variar de repertorio, con el fin de que sus incondicionales continuasesn prestándole el calor de su ferviente apoyo. Jamás se presentó en público un viernes sin que una copla nueva figurase en su extenso repertorio. Tengo para mí que la voz de la Bruna tenía mucha influencia en el decrecimiento que se apreciaba aquel año en las compraventas de los mercados de los viernes. La gente se movía inquieta entre las bestias hasta que las notas de la Bruna comenzaban a congregar público a su alrededor.
Aquellos marinos, / que unas horas antes, / bravos y arrogantes, / cruzaban el mar...
La tragedia del Reina Regente cobraba en la expresión desgarradora de la Bruna unas proporciones inconmensurables. Brillaban los ojos del público y un estremecimiento recorría, uno tras otro, a toda la multitud allí apiñada. Mas la emoción de los oyentes se centuplicaba cuando el relato recaía sobre alguna criatura tierna y desgraciada. Sobre todo uno que hablaba del secuestro de un niño inocente por su madrastra. A Alfredo [el amigo del protagonista] era ésta, también, la copla que más le llenaba, tal vez por estimar su realidad vital muy semejante a la de aquel muchachito maltratado. (...)
La multitud hipaba, sollozaba, se encogía, se estremecía y la Bruna, inmutable, proseguía, proseguía su copla desoladora." (Obras completas I, edición a cargo de Ramón García Domínguez, en Galaxia Gutenberg/Círculo de Lectores, pp. 51 y 52).
Todo un tratado sobre la profesión, ¿verdad?: la libertad del narrador, la propia voz, el repertorio, el acto narrativo como algo comunitario... impresionante.
Saludos