Acabo de terminar de leer un librito delicioso de Andrés Barba: La microguerra de todos los tiempos, publicado por la editorial Siruela. Este autor se encuentra entre mis favoritos (puedes acceder aquí a su ficha).
El libro nos lleva a Gombronia, un lugar cuyos habitantes viven al ritmo implacable del reloj (nunca mejor dicho); allí nos presenta a Manuel y a Mara (los protagonistas de la historia) y nos plantea el "pero" que pondrá en marcha a los personajes: el reloj del pueblo se ha estropeado y hay que arreglarlo.
Si el primer paseo por Gombronia y sus gentes ya resultaba interesante, el viaje que hacen Manuel y Mara es delicioso. El lugar por el que pasan (con sus tres países y sus avatares -no quiero destripar la historia) es una propuesta estupenda para hablar del tiempo y de la actitud vital ante el paso del mismo.
Me gusta (desde la primera vez que leí a este autor) la manera como tiene de contar las cosas, su estilo (que pienso que es propio y muy reconocible) y sus historias ambientadas en lugares particulares (que permiten lecturas en planos simbólicos, metafóricos), con tramas sencillas (ojo, que no simples) y ricas, con personajes cercanos (y al mismo tiempo extraordinarios), que te crees desde las primeras líneas.
He disfrutado mucho devorando este libro. Siempre es un placer leer a Andrés Barba. Léanlo.
Saludos
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