Acabo de terminar de releer Marabajo, un libro escrito por Pablo Albo con ilustraciones de Jesús Aguado y publicado por Anaya en su colección El duende verde. Esta obra obtuvo en 2008 el Primer Preimio del XXVII Concurso de Narrativa "Vila d'Ibi". Y este autor tiene ficha entre mis autores favoritos.
Me pasa con Pablo que cuanto más leo (y releo) sus libros, más me gustan, y eso es importante, porque para mí una medida de calidad literaria es la capacidad que un texto tiene para soportar relecturas. Hace años que leí este librito y que volví a leerlo (esa segunda vez en voz alta a mis hijos) y, ahora, lo he vuelto a leer. Y de nuevo lo he hecho con gusto.
El libro nos cuenta una historia pequeña, la aventura que corren un nutrido grupo de personajes marinos alrededor de una bota que, de pronto, apareció en el fondo del mar donde ellos habitan. Al hilo de esta historia se trenzan otras pequeñas y grande historias como la trágica y diversa muerte de 149.999 cangrejos, o como la historia de amor de Decorosa, o la aparición de una hermosa perla transparente, o la vida y muerte de un salmonete que confundían con un sargo, o la continua llantina de un calamar gigante pequeño, o la historia de los incansables erizos, o de las gambas filósofas... Como puedes apreciar, un montón de historias que se mezclan y suman dando cuerpo a un libro estupendo.
Visto así, podríamos hablar (que me perdonen los eruditos del teatro) de una rebanada de vida en una pequeña playa, la de los Doce Puentes. Si uno corta la barra de pan que es la historia de esa playa, la instantánea (la rebanada) que podríamos ver es esta trenza de pequeñas y grandes historias, ricas y tontas, hermosas y oscuras, trágicas y divertidas, de animales marinos (y algún que otro aéreo y terrestre).
En suma, un librito breve, aparentemente sencillo (digo aparentemente porque tiene una estructura compleja y muy bien tramada y engarzada), muy entretenido, que se lee en un suspiro y en el que cabe el buen humor, la poesía y la tinta de calamar.
Totalmente recomendable.
Saludos
En nuestra familia, Pablo Albo, ha sido todo un descubrimiento, de verdad, algo así como cuando nos descubrísteis a Arnold Lobel, lo recomendaba el cole pues empezamos a leer y a recopilar libros. Con Pablo Albo, estamos leyendo parte de sus libros, el de MARABAJO es extraordinario, pero la anécdota se la lleva ¿Rinoceronte que rinoceronte? Cuando lo compramos hace dos semanas, nos ponemos a leerlo, y a mitad del cuento, los niños tenían un cabreo que "paquemás", y es que no podía parar de reír a carcajada limpia y los niños "que no te entiendo mamá!!!" , "que te dejes de reír que no se te entiende!!!". Creo que que a la cuarta, pude leer el libro mas tranquilamente, decididamente, sí que resisten las lecturas, los libros de Pablo Albo.
ResponderEliminar