Esta es una historia sencilla: los distintos miembros de una familia ven un perro negro que merodea su casa, según pasan los personajes y avanza el tiempo el perro se va haciendo más grande (grande como un tigre, como un elefante...). La familia casi al completo se atrinchera y esconde tratando de que el enorme perro los vea, y es entonces cuando entra en escena la más pequeña de la familia y... bueno, esto no he de desvelarlo.
El protagonista de este libro álbum es el miedo encarnado en ese perro negro del que los personajes se van parapetando, escondiendo, ocultando... y que, con el paso de las páginas, va creciendo. Sólo hay una manera de hacer que ese miedo mengüe y podamos convivir con él: porque los miedos no desaparecen (siempre habrá algo que temer) pero sí podemos habilitar estrategias para convivir con ellos. Estrategias que los más pequeños incorporan desde el juego, los cuentos, las canciones... todo ello sugerido en este libro álbum.
Creo, además, que resulta muy interesante el contraste que ofrecen unas ilustraciones tan realistas que incluyen a un elemento simbólico como es el perro negro. Unas ilustraciones, por cierto, bien hermosas.
Un libro estupendo que fue merecedor del Premio Kirico en 2014, ahí es nada, y uno de esos libros que bien merece la pena tener a mano en estos tiempos de miedo e ira. Echadle un vistazo, seguro que os va a interesar.
Saludos
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